Pedro Sánchez ha calificado de “extraordinaria noticia” la bajada de la evolución de la inflación, que se ha situado en el 1% en el mes de junio y ha aprovechado para lanzar un mensaje a Alberto Núñez Feijóo, que ha prometido hacer una enmienda a la totalidad a la gestión económica del Gobierno. “Si la economía española va como una moto, lo que nos dice el sentido común, lo sensato, es no derogar lo que funciona”, ha dicho el presidente a su llegada a Bruselas.
La publicación de los datos sobre la evolución de los precios se ha producido justo antes de la celebración del Consejo Europeo y Sánchez ha aprovechado para recordar que la cifra de España es la más baja de las principales economías de la UE, algo que tiene lugar ya desde hace meses, pero un especial simbolismo en esta ocasión dado que baja del 2%, que es el umbral que ha establecido el BCE como objetivo en el horizonte. Además, es el nivel más bajo desde 2021.
El jefe del Ejecutivo ha recordado que en ese marco se ha producido la prolongación de las medidas de apoyo a la economía por la guerra en Ucrania y que eso permite dar “certidumbre”. Así, ha defendido que ese es el “debate” de cara a las elecciones del 23 de julio en las que se enfrenta a Feijóo y ha asegurado que cambiar de rumbo económico supondría “echar el freno” a una situación que va bien. España es, igualmente, una de las economía que más crece.
Para Sánchez, el dato de inflación “reafirma” la gestión del Gobierno “en un contexto tan tan extraordinariamente difícil”. “La economía española es la que más crece de la UE. Estamos creando empleo como nunca y controlando los precios como nadie. Este es un éxito de país”, ha dicho en una intervención sin preguntas a la espera de la rueda de prensa del viernes, cuando concluya la cumbre de líderes de los 27.
“Queda mucho por hacer, este no es un mensaje autocomplaciente, muchas familias que tienen dificultades para llegar a fin de mes; pero estamos yendo en la dirección correcta”, ha puntualizado.
El presidente del Gobierno ha apuntado que aprovechará la cita para exponer los “objetivos ambiciosos” de la presidencia de la UE. “Trasladaré el compromiso de España, porque es un compromiso de Estado”, ha sentenciado sobre el semestre, que arrancará con una inusual celebración de elecciones generales que dejan en la incertidumbre quién se encargará de pilotar los dosieres por parte del Gobierno español en el grueso de la presidencia, aunque en Moncloa sostienen que todo funcionará con “normalidad” y que no influirá en la agenda legislativa de la UE.
Poco después de que Sánchez llegara a la sede del Consejo, Alberto Núñez Feijóo aprovechaba su presencia en Bruselas, donde ha participado en una reunión de líderes del Partido Popular Europeo, para cuestionar la marcha de la economía española y de nuevo la gestión de los fondos europeos. No obstante, ha dado marcha atrás y ha asegurado que mantendrá “intacta” la reforma laboral si así lo consideran patronal y sindicatos. “Sustancialmente es una buena reforma”, ha dicho sobre el texto que el PP rechazó y que salió adelante gracias al error de su diputado Alberto Casero.
Feijóo también ha arremetido contra Sánchez por la organización de la presidencia europea que comienza oficialmente este sábado. “No he recibido ni una llamada del presidente, no tengo ni un documento relacionado con un evento de estas características”, se ha quejado Feijóo, cuyos eurodiputados plantaron al ministro de Exteriores, José Manuel Albares, en una reunión preparatoria porque exigían que el presidente hablara antes con el jefe de la oposición. “He tenido más información de la presidencia del Consejo por parte del primer ministro sueco que me recibió en Estocolmo en su despacho para darme cuenta de los contenidos, que del Gobierno de mi país”, ha agregado.
El líder del PP ha asegurado que ha creado un grupo de trabajo con exministros, embajadores afines al PP y eurodiputados para estar preparado para asumir la presidencia si llega a Moncloa tras las elecciones del 23 de julio. Así, ha defendido la “necesidad de crear un grupo de trabajo permanente entre el Gobierno y el principal partido de la oposición para mantenernos informados de las cuestiones que España ponga sobre la mesa como presidencia del Consejo”. La información hasta ahora se ha canalizado a través de la comisión mixta de Relaciones con la UE de las Cortes, que ahora están disueltas por la convocatoria electoral.