Aunque el Gobierno y sus socios parlamentarios aspiran a que la decisión de EH Bildu de retirar de las listas a las municipales a siete condenados por delitos de sangre acabe por romper la estrategia de PP y Vox de hacer de ETA el centro de la campaña, la sesión de control de este miércoles en el Congreso volvió a demostrar que, por el momento, la derecha gana esa partida.
Tras el cara a cara casi monográfico del Senado, los de Feijóo volvieron a dejar patente que no piensan renunciar a su plan y que intentarán estirar el comodín de ETA tanto como les resulte posible. Un asunto que protagonizó un día más el choque entre la oposición y el Ejecutivo en el pleno y que llegó a impregnar también la interlocución entre Pedro Sánchez y la portavoz de EH Bildu, Mertxe Aizpurua.
La diputada independentista vasca tomaba la palabra justo después del choque del Gobierno con el PP para asegurar que su formación quiere “mirar al futuro como hemos hecho siempre”. Sánchez, que tanto en el Senado ante Feijóo como este mismo miércoles en el Congreso ya se había empleado a fondo para retratar “el cinismo del PP” respecto a ETA, no dejó pasar en su respuesta a EH Bildu la crítica a la confección de las listas. “Ustedes se han equivocado en la elaboración de las listas municipales, señora Aizpurua”, le dijo a la portavoz. “Puede ser legal pero desde luego no es decente. Lo que se tiene que pedir a esas personas que integran las listas es un mensaje mucho más rotundo de reparación, perdón, reconciliación y homenaje las víctimas que sufrieron tantos años de dolor”, añadió.
La sesión de control la había abierto unos minutos antes la portavoz parlamentaria del PP, Cuca Gamarra. Tras volver a referirse a los independentistas vascos como “los socios preferentes” de Pedro Sánchez, Gamarra le insistió al presidente en su exigencia de romper con Bildu. “Ustedes han dilapidado los valores democráticos”, acusó la portavoz popular provocando el enfado de la bancada socialista.
El presidente del Gobierno tomó entonces la palabra para recordar que, ya en 2015 y bajo un gobierno del PP, Bildu presentó en sus listas a condenados con penas por terrorismo cumplidas. “Y ustedes no dijeron nada”, lamentó. Sánchez le achacó a los populares que “sean capaces de decir cosas tan deleznables que luego no son capaces de repetirlas”. Y dio paso a un diálogo con el conjunto de la bancada de la derecha.
“¿Serían capaces de repetir que Zapatero traicionó a los muertos?”, preguntó en referencia a la acusación en su día de Mariano Rajoy al entonces presidente socialista. De manera generalizada, los escaños de la derecha respondieron que sí. Repitió Sánchez la fórmula con Alfredo Pérez Rubalcaba. “¿Serían capaces de decir que Rubalcaba era cómplice de ETA?”. El número de voces que volvieron a replicar que sí disminuyó en ese caso considerablemente. Y aún quedaba una pregunta. “¿Serían capaces, como dijo Rajoy, de volver a decir que tienen la convicción moral de que ETA estaba detrás de los atentados del 11M?”. A la tercera el presidente consiguió acallar a todos los escaños de la derecha.
En la línea de su jefe de filas en el Senado, Gamarra reiteró ante Pedro Sánchez que “ser tan cruel con el PPy tan complaciente con Bildu va a marcar su historia para siempre”. El presidente volvió a replicar al PP para para insistir en el argumento de que callar en 2015 y atacar ahora al Gobierno por las listas de Bildu es “un ejemplo del mayor cinismo que siempre ha tenido el PP a la hora de utilizar el dolor de las victimas”. “La democracia derrotó a ETA y fueron gobiernos socialistas quienes lo hicieron y eso es lo que no pueden soportar”, remachó.
El ataque de la derecha al Gobierno a cuenta de las listas de EH Bildu y la batalla campal política formada entre los dos principales partidos en torno a ETA monopoliza la discusión de la campaña y eleva el tono de los reproches. Tras la sesión de control, el diputado socialista Rafael Simancas denunció en sus redes sociales: “He llorado a demasiados amigos asesinados por terroristas. He asistido a demasiados entierros de compañeros. He mirado demasiadas veces los bajos del coche en el que llevaba a mi hijo al colegio, como para soportar la bazofia inmoral de esta derecha sin escrúpulos ni vergüenza”.
En los pasillos del Congreso, la portavoz de EH Bildu aseguró sobre la retirada de los siete candidatos de su partido que tenían delitos de sangre y pasado en ETA que, con su decisión, “han decidido no añadir más dolor a las víctimas”. Aizpurua recalcó el “compromiso clarísimo” de EH Bildu “con la paz y la convivencia” y “con la declaración del 18 de octubre”, en referencia al momento en que Arnaldo Otegi, en el décimo aniversario del fin de ETA –2021–, se dirigió a las víctimas para lamentar un “dolor” que “nunca debió haberse producido”.