Sánchez evita condenar la actuación policial en Melilla y pide confiar en las investigaciones de la Fiscalía y el Defensor del Pueblo
Pedro Sánchez confiesa que no había visto las imágenes de la masacre en la valla de Melilla cuando el pasado viernes dijo que el asunto había estado “bien resuelto”. Aunque ha lamentado el fallecimiento de más de una treintena de personas, el presidente ha insistido en que también hay que ponerse en la “piel” de los agentes tanto de la gendarmería marroquí como de la Guardia Civil y la Policía Nacional, cuya actuación ha evitado condenar. “Tenemos que ponernos en la piel de todos y cada uno de los actores de esta tragedia que por desgracia hemos sufrido”, ha expresado el socialista en una entrevista en la Cadena SER en la que ha asegurado que hay que ser “empáticos” con las personas migrantes al tiempo que ha asegurado que en el último año se han perpetrado “doce ataques violentos” en la valla de Melilla.
“Sobre los sentimientos no se puede razonar”, ha respondido a la pregunta de si esos intentos de salto a la valla suponen una amenaza a la integridad territorial de España, aunque más adelante ha sostenido que la obligación del Gobierno es velar por la soberanía así como por la tranquilidad en las fronteras. “Para evitar tragedias como la de Nador, lo que tenemos que hacer es trabajar en Sudán, que es el país del que vienen estos migrantes que hemos visto intentar asaltar de manera violenta la valla”, ha señalado el presidente, que ha apostado por trabajar con los países de origen y tránsito de las personas migrantes, como Marruecos y Mauritania. Sánchez ha recordado que la UE es el principal donante en cooperación al desarrollo en esa región con 24.000 millones de euros.
El presidente del Gobierno se ha zafado de la presión que está ejerciendo el socio minoritario para que se lleva a cabo una investigación de lo sucedido el pasado viernes en la valla de Melilla y que se cobró la vida de 37 personas y lo ha dejado en manos de la Fiscalía General del Estado y del Defensor del Pueblo en España. También se ha referido a la Fiscalía de Marruecos y ha recordado que hay 30 personas imputadas por colaboración y tráfico de personas. Moncloa pone el foco en las mafias. No obstante, Marruecos ha intentado ocultar los restos de los cadáveres y planificaba enterrarlos sin identificar ni realizar autopsias. “Tenemos que confiar en las instituciones”, ha pedido Sánchez, que ha asegurado que habrá “colaboración” por parte del Gobierno.
“Tenemos que ser empáticos y ponernos en la piel de los migrantes que han sufrido y han muerto pero también en la piel de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado”, ha dicho antes de recordar que 40 guardias civiles y 100 gendarmes fueron heridos y de reivindicar el “derechos que tienen nuestros compatriotas a tener sus fronteras seguras”.
Sánchez ha dado por hecho que el nuevo concepto estratégico que aprobará la OTAN en la cumbre que se celebra estos días en Madrid incorporará el flanco sur a la estrategia de seguridad como potencial amenaza para los aliados centrados ahora mismo en el este, donde Rusia ha pasado en diez años de ser un socio estratégico al principal riesgo.
En ese sentido, en Moncloa están eufóricos con el acuerdo alcanzado con Joe Biden que, entre otras cuestiones, supondrá un aumento de la presencia de EEUU en la base de Rota, donde pretende desplegar dos buques destructores adicionales a los cuatro actuales. Sánchez ha defendido la necesidad de reforzar la capacidad de disuasión de España. “No de ataque”, ha insistido en varias ocasiones.
“Habrá debate, pero estoy convencido de que saldrá adelante este importante acuerdo”, ha reconocido sobre la distinta posición que tienen sus socios, especialmente Unidas Podemos, respecto al refuerzo militar. “Estoy convencido de que lo vamos a sacar”, ha señalado sobre ese acuerdo que tiene que ser aprobado por el Consejo de Ministros, al tratarse de un cambio en el actual convenio sellado en 1988, y ratificado en el Congreso. “El PP sabemos que ha cambiado de cara pero continuamos con la misma cruz, una oposición negacionista y destructiva; pero entiendo que en esta cuestión no va a haber problema”, ha afirmado.
Sánchez carga contra el PP por el recurso contra el aborto
A pesar de que cuenta con Alberto Núñez Feijóo para ese tema, ha pedido un viraje a los partidos a su izquierda. “A la izquierda del PSOE se tiene que hacer la reflexión de que debemos garantizar nuestra seguridad y defensa aumentando nuestra capacidad de disuasión, no de ataque”. No obstante, ha dado por hecho que logrará que el acuerdo se apruebe como “la hoja de servicios legislativos” que la coalición lleva a sus espaldas, según ha recordado.
Sánchez ha revelado que habló con Biden de la sentencia del Tribunal Supremo de EEUU que prohíbe el aborto, se ha mostrado convencido de que ese retroceso podría darse en España. “¿Por qué no?”, le ha contestado a Angels Barceló. El presidente ha aprovechado para vincularlo con el bloqueo a la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y del Tribunal Constitucional por parte de Feijóo. “¿Dónde está la retirada por parte del PP de su recurso a la ley de interrupción voluntaria del embarazo? ¿Por qué bloquea la renovación? ¿Por qué interés espurio no renueva el Tribunal Constitucional?”, se ha preguntado.
El socialista ha reiterado que el Gobierno es “incómodo” para los poderes económicos, políticos y mediáticos de la derecha a los que ha acusado de tener intereses “oscuros”. “No estoy descubriendo América, a la derecha política, económica y mediática le cambiamos el paso con una moción de censura”, ha aseverado el presidente, que ha asegurado que en España hay “uno o dos partidos que no son autónomos” en referencia al PP y a Vox. “Si preguntamos a cualquier ciudadano que nos esté escuchando, ¿está de acuerdo con subir el SMI? ¿con subir las pensiones? Yo creo que la mayoría sí. Entonces, ¿por qué es tan difícil aprobar estas cuestiones en el Parlamento? Hay una serie de intereses oscuros, se quiere volver a un viejo orden”, ha afirmado.
“No nos van a quebrar”, ha sentenciado el presidente, que ha defendido las medidas que ha puesto en marcha el Gobierno durante la pandemia y ahora para hacer frente a las consecuencias económicas de la guerra. Sánchez ha reconocido que el 10,2% de inflación en junio es un dato malo, pero sostiene que era lo previsto y lo ha atribuido a los cortes de suministro de gas impuestos por Putin.
26