España avanza. “Si nada se tuerce”, en expresión del presidente del Gobierno, muchas Comunidades estarán fuera del estado de alarma en las próximas semanas, y todo el país recuperará la movilidad a finales de junio o principios de julio. Así de optimista se ha mostrado Pedro Sánchez ante los presidentes autonómicos en la undécima conferencia telemática, donde compartió la preocupación de todos ellos por el impacto de la COVID-19 en la temporada turística.
El turismo, según afirmó Sánchez, ha sido el sector más beneficiado de líneas de avales ICO. Hasta el 18 de mayo se habían financiado más de 82.324 operaciones para 64.000 empresas con 6.400 millones de euros. A esto hay que añadir los 400 millones de la línea Thomas Cook-Covid, que ha aportado 4.724 operaciones. Y, en cuanto a las prestaciones de autónomos por cese de actividad, la hostelería y el turismo han sido los sectores más beneficiados, un 20% del total de las solicitudes resueltas. Casi 3 de cada 10 trabajadores protegidos por ERTES corresponden a actividades de hostelería y turismo. Y, además, el Ministerio de Industria y Turismo ya elabora protocolos con las medidas de seguridad necesarias para la vuelta a la normalidad, según develó el presidente. Sánchez adelantó también que esta semana empezará la negociación con los grupos parlamentarios para la aprobación del fondo no reembolsable de 16.000 millones que se distribuirá entre las Comunidades. El primer pago será en julio; el segundo en noviembre y un abono final para diciembre.
El presidente de la Generalitat, Quim Torra, tomó la palabra para anunciar que esta misma mañana le remitrá las 40 propuestas que considera imprescindibles para hacer frente a la crisis provocada por la pandemia del coronavirus, entre las que incluye la recuperación de competencias y el fin del ministro de Sanidad como autoridad delegada del mando único. De entrada, Torra reclama una transferencia de 4.000 millones del fondo autonómico anunciado por Sánchez y calcula que serán necesarios 500 millones para reforzar el transporte público. Además, el president ha subrayado que a partir de ahora una de las prioridades será la de hacer frente a la “emergencia educativa”. Sánchez le agradeció sus propuestas, pero le pidió empatía con la situación del Gobierno, dada la gravedad de la crisis y el impacto sobre los ingresos del país.
Por su parte, el lehendakari, Iñigo Urkullu, se quejó otra vez de que los presidentes autonómicos se enteren en la ya habitual comparecencia de Sánchez de los sábados de lo que les cuenta, un día después por vía telemática, a lo que el presidente le respondió con la necesidad de mantener la cita dominical hasta finales de junio y, después en función de la situación y de esa “nueva normalidad” ver la cadencia, que podría ser una vez al mes o cada 15 días. Su opinión es que “es un espacio ya consolidado que hay que mantener”.
En relación al pacto suscrito con Bildu para sacar adelante la última prórroga del estado de alarma, Urkullu calificó de “desconcertante” el acuerdo del Gobierno con los abertzales, al tiempo que afeó que en las Conferencias de Presidentes se hable de un Plan de Reconstrucción social y económica que luego se traslada a las Cortes Generales del Estado.
También la madrileña Isabel Díaz Ayuso ha aprovechado para cuestionar el acuerdo alcanzado con EH Bildu. Por un lado, ha reprochado al presidente que dé a Euskadi y Navarra una mayor capacidad de endeudamiento, como ha solicitado también la Comunidad de Madrid, en lo que considera una “desigualdad territorial flagrante”. Sánchez le ha recordado que esas autonomías tienen un régimen foral. Díaz Ayuso también ha cuestionado que se abra el debate sobre la derogación de la reforma laboral en un momento tan “delicado e inoportuno” para la economía española.
La presidenta madrileña, que ha bajado el tono contra el Gobierno tras el paso de la región a fase 1, ha asegurado que no pedirá esta semana la evolución a la siguiente, pero ha planteado que se eliminen las franjas para los paseos y actividades deportivas, entre las que ha citado el golf, el tenis y los deportes de motor.
En su respuesta, Sánchez ha aprovechado para pedir a Díaz Ayuso, como representante de una de las regiones más azotadas por la COVID-19, que eleve al PP la necesidad de una “actitud menos obstruccionista” a la hora de plantear la prórroga del estado de alarma, que para el Ejecutivo es “imprescindible” para restringir la movilidad interprovincial.
El gallego Alberto Núñez Feijóo, insistió por cuarta semana consecutiva en conocer los criterios para el reparto de tres tramos del Fondo No Reembolsable porque tienen las Autonomías tienen que generar el crédito y si se demora el proceso, no dará tiempo a la ejecución. Luego, defendió que Galicia, después de la última prórroga aprobada para 15 días, no debería seguir en estado de alarma pasado el 7 de junio. Sostuvo que la diferencia entre la fase 2 y la 3 sólo es de aforos permitidos en locales públicos y que es innecesario para ello el mando único. “Las cosas están yendo bien”, afirmó tras sumarse a la propuesta de Urkullu para que Correos ayude en los respectivos procesos electorales de sus Autonomías, algo a lo que se comprometió con ambos Pedro Sánchez.
Tras explicar que “los datos evolucionan positivamente, incluso están sobrepasando las expectativas”, Pedro Sánchez apostó por mantener la cautela porque “eso hará más robusta la recuperación y dará más seguridad a la ciudadanía”, pero no se comprometió a levantar el estado de alarma como reclama Galicia, si bien insistió en que será asimétrico y se prolongará en los territorios que así lo soliciten. No entró en más detalles.
El andaluz Juan Moreno Bonilla ha solicitado al presidente del Gobierno que actúe con “equidad” y rectifique la decisión de “dejar atrás” a las provincias de Málaga y Granada en el proceso de desescalada, puesto que cumplen con los criterios epidemiológicos y de capacidad asistencial marcados por el Ministerio de Sanidad, “incluso mejor que otras provincias que sí están en la Fase 2”. Mostró la “insatisfacción” de Andalucía con esa medida, “que es difícil de entender y no entendemos” y que, además, envía “un mensaje innecesario e irreal sobre destinos turísticos que son internacionales” y cuya imagen se está viendo dañada por esa decisión.
Respecto al Ingreso Mínimo Vital, recordó a Sánchez que conviene aclarar si las Comunidades jugarán algún papel, ya que las autonomías tienen la competencia exclusiva en la materia y existe al respecto abundante jurisprudencia del Tribunal Constitucional. Su intención es “evitar disfunciones futuras y conflictos institucionales con las Comunidades”, tras haber oído al presidente del Gobierno que la intención es poner en marcha ese asunto a través de los ayuntamientos. Luego, reclamó una rebaja en el IVA de las mascarillas en tanto en cuanto serán desde ahora un producto de primera necesidad, un criterio único para el arranque del curso escolar en septiembre y un Plan Nacional de Rescate al Turismo, del que “seguimos sin tener noticias”. Igual que Urkullu, el de la Junta de Andalucía demandó “una metodología más útil” para las Conferencias de Presidentes para no enterarse “por televisión 15, 10 u 8 horas antes de las decisiones adoptadas”.
Page quiere prórrogas “sin condiciones”
En referencia velada a lo ocurrido esta semana con Bildu y la reforma “íntegra” de la reforma laboral, Emiliano García Page, presidente de Castilla-La Mancha, pidió que no se impongan condiciones al Gobierno en el caso de que se tenga que prorrogar el estado de alarma y que se apoye sin más su renovación. “No creo que a nadie se le pase por la cabeza pensar que meter a la gente en su casa e impedirles salir sea una ecuación de ninguna receta electoral. Es una situación demasiado excepcional, y por tanto apoyo el instrumento para que tengamos claro, que el 90% de la ciudadanía española sabe que es lo que tenemos que hacer. Hay que anteponer la situación sanitaria a todas las demás”, afirmó.
Page defendió que “la inmensa mayoría estamos de acuerdo con el estado de alarma” y que le gustaría que no hubiera que prolongarlo, pero que si fuera así, “que lo fuera incondicional” porque “cuando se pone en un lado de la balanza el salvar vidas, lo verdaderamente dramático es tener que aguantar que se pongan condiciones o circunstancias que no tienen nada que ver con lo incómodo de la situación”.
Julio será, en su opinión, un escenario de reencuentro, ya que habrá movilidad entre provincias, pero pidió que no se deseche la posibilidad de “flexibilizar un poco la conexión entre provincia en junio” porque “todos sabemos que una parte de nuestra recuperación va a depender del turismo nacional. Es decir, de que unos españoles confíen en poder ir a otras zonas de España e intentar que no se establezcan barreras psicológicas de la enfermedad”. También el extremeño Guillermo Fernández Vara defiende que se autorice la movilidad entre provincias que se encuentren en la misma fase y en concreto entre Cáceres y Badajoz una vez que comience la fase 2. También el aragonés Javier Lambán lo ha solicitado como una medida de alivio acelerado para el mundo rural.
El president valenciano, Ximo Puig, planteó la necesidad de estudiar medidas que garanticen la igualdad de las familias en el acceso a las mascarillas en la medida en que se tratará de un gasto que muchas familias tendrán dificultades para asumir. También apostó por la conveniencia de crear un Centro Nacional de Salud Pública con participación de todas las Autonomías de cara a futuras pandemias, ya que “la profundización en la cooperación y el bagaje federalizante aprendido” debiera ser una de las lecciones de esta crisis. También defendió el éxito de la unidad de acción basada en el estado de alarma y añadió que, mientras no haya una alternativa para restringir un derecho constitucional como el de la movilidad, desde las instituciones se tiene que blindar la seguridad y la salud de las personas. “Es un asunto en el que todos somos corresponsables y los presidentes autonómicos tenemos que tener una posición activa, de forma que hay que separar esta cuestión de otras consideraciones que pueden abocar a una confrontación estéril. En caso contrario, cada uno deberá asumir la responsabilidad de lo que no sería sino un desatino”, concluyó.
La presidenta de Navarra, María Chivite, ha agradecido que se haya tenido en cuenta su propuesta de que los trabajadores extranjeros que acuden a la región no tengan que pasar la cuarentena obligatoria y, además de interesarse por el fondo para las comunidades, ha pedido “medidas urgentes para la reactivación de sectores económicos fundamentales para la Comunidad foral como la automoción, la vivienda y el turismo”. Por su parte, la presidenta balear, Francina Armengol, que lleva semanas reclamando en este foro medidas para paliar los desastrosos efectos por la pérdida del turismo, ha asegurado que el archipiélago estará listo para recibir extranjeros a través de corredores seguros antes de julio, que es la fecha que ha señalado Sánchez, y ha reclamado descuentos aéreos para atraer al turismo nacional.