Varios senadores de Estados Unidos pidieron hoy una investigación “imparcial” sobre las circunstancias de la muerte del disidente cubano Oswaldo Payá, en el quinto aniversario de su deceso.
En un comunicado conjunto, los senadores Dick Durbin, Bill Nelson, Jeff Merkley, Marco Rubio, Bob Menendezy Ted Cruz, estos tres últimos de origen cubano, presentaron una resolución en honor al legado de Payá, que murió en 2012 en un accidente de tráfico, e instaron a que se aclarasen las circunstancias del suceso.
“El disidente cubano Oswaldo Payá fue asesinado por el régimen de Castro, que intentó disfrazar el asesinato como un accidente de tráfico. Durante décadas los Castro sistemáticamente han asesinado, encarcelado y agredieron a sus opositores políticos, y Oswaldo no fue la excepción”, acusó Rubio.
Payá “fue un valiente defensor de la libertad y los derechos humanos -añadió-, y si el gobierno cubano no tiene nada que ocultar, debería permitir que se lleve a cabo una investigación independiente de su muerte”.
Por su parte, Menéndez defendió que aún no se ha llegado hasta el fondo de “lo que realmente sucedió”, y dijo no poder permitir que “miembros inocentes de la comunidad internacional sean objeto de abusos y víctimas de agresiones por un régimen para poder ocultar la verdad”.
“Me siento orgulloso de unirme a mis colegas en este esfuerzo por emprender una investigación completa e independiente de las circunstancias sospechosas que rodean la trágica muerte de Oswaldo Paya y comprometernos a seguir buscando maneras de responsabilizar al régimen de Castro por su brutalidad y represión que ha privado al pueblo cubano de los derechos humanos básicos que tan orgullosamente proclamamos apoyar en todo el mundo ”, expresó.
Por su parte, Cruz insistió en el legado de Payá, que llevó “esperanza y libertad a una nación oprimida para hacer una Cuba mejor, libre del dominio comunista”, continua influyendo en Cuba y “otros países bajo un gobierno tiránico como Venezuela”
“Oswaldo Payá fue un defensor comprometido con la libertad del pueblo cubano, y su trabajo y legado nunca deben ser olvidados”, aseguró por su lado Nelson.
El disidente, que fundó el Movimiento Cristiano Liberación (MCL) en 1988 para promover la democracia y las libertades civiles a través de la resistencia no violenta en Cuba, falleció en julio de 2012 junto al también disidente cubano Harold Cepero tras impactar contra un árbol el vehículo en el que viajaban y que conducía Ángel Carromero, político conservador español.
Su hija, Rosa María Payá, insiste en que la muerte de su padre fue un asesinato orquestado por las autoridades de La Habana, lo que fundamenta en un informe de la organización internacional Human Rights Foundation (HRF) que apunta “indicios sólidos” de que el automóvil en el que viajaba Payá y sus acompañantes fue embestido por otro.