Los socios del Gobierno de coalición se reunirán este lunes en la mesa de seguimiento del Acuerdo gubernamental entre PSOE y Unidas Podemos (UP) para intentar reconducir la situación después de la crisis abierta por la reforma laboral y la reacción airada de Podemos a la retirada del acta de diputado a Alberto Rodríguez, que finalmente no ha cristalizado en una querella contra Meritxell Batet.
Fuentes del Gobierno han confirmado a EFE la celebración de la reunión al objeto de reconducir las tensiones nacidas entre los socios en los últimos días. Las mismas fuentes recordaron la solicitud hecha a cabo el pasado viernes por Unidas Podemos para que la comisión de seguimiento del Acuerdo de Gobierno entre los dos partidos se reuniera y se abordara en ella la reforma laboral en el marco de un clima de “entendimiento y coordinación”.
A la reunión, prevista para las 18.00, acudirán Josep Vendrell, jefe de gabinete de Yolanda Díaz, y Joaquín Pérez, secretario de Estado de Empleo y Economía Social. Podemos enviará a sus máximos representantes: su secretaria general y ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, la número dos del partido y ministra de Igualdad, Irene Montero, y el portavoz en el Congreso de Unidas Podemos, Pablo Echenique.
Por la parte del PSOE, asistirán Adriana Lastra, vicesecretaria General del partido socialista; María Jesús Montero, ministra de Hacienda y Función Pública, Héctor Gómez, portavoz parlamentario del PSOE y Félix Bolaños, ministro de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática.
Las relaciones entre los socios de Gobierno se tensaron cuando el ala socialista decidió reservarse el control de la reforma laboral que venía negociando desde hace meses la vicepresidenta segunda y líder de Unidas Podemos, Yolanda Díaz,. Para el grupo confederal la intención de la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, de irrumpir en un asunto que está entre las competencias del Ministerio de Trabajo es una “gravísima injerencia”. Pedro Sánchez respaldó desde Bruselas a Calviño y rebajó la participación de Díaz en la derogación de la reforma laboral, que, según dijo, compete a cinco ministerios.
La inhabilitación de Alberto Rodríguez
La reforma laboral junto a la inhabilitación del diputado Alberto Rodríguez tras la sentencia del Tribunal Supremo y el posterior anuncio de querella de Podemos contra la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, han tensionado las relaciones entre los socios de Gobierno.
Esta misma noche del domingo se ha sabido que el exdiputado de Podemos Alberto Rodríguez no se querellará contra Batet, a propuesta de los nuevos abogados contratados para preparar el recurso a su condena por agresión a un agente policial dictada por el Tribunal Supremo, aunque sí recurrirá su condena para recuperar el escaño, según dijeron a Efe fuentes de su defensa.
Batet tomó la decisión de suspender su condición de diputado después del escrito enviado el mismo día por el presidente de la Sala Segunda del Supremo, Manuel Marchena, recordándole que Rodríguez había sido condenado a pena de cárcel e inhabilitación de sufragio pasivo. La decisión llegó después de un informe contrario de los letrados del Congreso, que avalaron que el exdiputado canario podía mantener su acta porque su condena de cárcel fue sustituida por una multa y porque su condena de inhabilitación se refiere al sufragio pasivo y no a poder ejercer un cargo público. Entendían que no podía presentarse a unas elecciones en 45 días pero que puede seguir en el Congreso.