El presidente del tribunal del caso Gürtel, Ángel Hurtado, ha comunicado este lunes que el juicio “no se va a suspender”, como pretendían la mayoría de los acusados, entre ellos Luis Bárcenas y el PP, que comparece como presunto beneficiario de 245.000 euros de la corrupción.
Hurtado ha intervenido al término de la jornada matinal para advertir de que el juicio va a continuar. Acababa de terminar la respuesta de las acusaciones a las cuestiones previas de la defensa cuando el presidente del tribunal ha anunciado que éste resolverá algunas de esas peticiones por la tarde y otras quedarán pendientes para la sentencia. Pero que, en cualquier caso, queda descartada la nulidad del proceso.
Ya por la tarde, el magistrado ha afirmado que la impugnación de las pruebas que han pedido algunas de las defensas se tratarán durante el juicio y se resolverán en sentencia. En cualquier caso, ha recordado que las grabaciones efectuadas por José Luis Peñas, y cuya anulación han pedido buena parte de los acusados, este extremo ya se rechazó en la fase de instrucción.
Sobre el resto de cuestiones previas, el presidente de la sala ha anunciado que se acepta la petición de la Fiscalía para el cambio de orden de las declaraciones. Las fiscales habían pedido que tres de los 37 acusados, dos empresarios y un exconcejal de Pozuelo, declaren antes que el principal imputado, Francisco Correa, lo que ha alentado las sospechas de que entre los imputados hay quien quiere colaborar con la justicia y tirar de la manta.
Hurtado ha asegurado que la petición de la Fiscalía “tiene base suficiente pese a las quejas de los abogados”. Adelantar la declaración de Jacobo Gordon y Alfonso García-Pozuelo, y el exconcejal de Pozuelo de Alarcón es Roberto Fernández “pueden servir para un mejor esclarecimiento de los hechos”.
Rajoy no declarará como testigo
El tribunal, sin embargo, ha rechazado la petición de algunas acusaciones de llamar a declarar como testigo a Mariano Rajoy. Hurtado ha recordado que un auto en fase de instrucción ya rechazó esta petición y la postergó a la celebración del juicio oral. Éste “no ha empezado”, así que la sala deja abierta la posibilidad de llamarle más adelante, en función de cómo se desarrolle el juicio. Es el mismo criterio expresado por la Fiscalía: rechaza que se le llame a declarar por el momento, “sin perjuicio” de cómo se desarrolle el proceso.
El presidente del tribunal sí que ha dejado claro que se aceptó la declaración como testigos de varios altos cargos del PP, tres de los cuales fueron secretarios generales del partido: Francisco Álvarez Cascos, Javier Arenas y Ángel Acebes. Así, ha dicho que la sala considera que estos podrán dar respuesta a las cuestiones que justificaban la petición de que declarase Rajoy: “Esa es la razón que nos lleva a mantener la denegación de esa prueba testifical”.
Sobre la petición del abogado del PP, Jesús Santos, de que la formación fuese excluida como responsable civil subsidiario, Hurtado ha dicho que esta cuestión, la responsabilidad del PP, se dirimiría durante el juicio oral que ahora comienza.
En su respuesta al resto de cuestiones previas, los magistrados sí que han accedido a que los acusados no estén presentes en todas las sesiones del juicio. Permite a algunos no acudir cuando no se traten hechos que les afecten directamente, pero hace una excepción: “Hay una serie de acusados que su participación tiene una mayor relevancia”. Así, los principales acusados -Correa, Crespo, 'El Bigotes', Bárcenas, Sepúlveda o López Viejo, entre otros- tendrán que acudir a todas las sesiones.
El tribunal ha rechazado la mayoría de las alegaciones de los abogados defensores, como la de no usar la documentación sobre las cuentas en Suiza de algunos de los acusados, la prescripción de los delitos o la falta de competencia de la Audiencia Nacional. También ha rechazado los intentos de anular el juicio basándose en la instrucción del juez Baltasar Garzón.