El representante de la Unión Europea y los de las legaciones europeas en Jerusalén y Ramala expresaron hoy “profunda preocupación” por las condiciones de detención de menores palestinos en el sistema militar israelí e instaron a Israel a respetar los derechos de los niños.
“Israel tiene la obligación, en virtud del derecho internacional, de respetar los derechos del niño que, entre otras cosas, confirma que el arresto, detención y encarcelamiento de un niño se utilizará únicamente como último recurso y por el tiempo más breve posible”, recordaron en un comunicado la representación de los 28 y los cónsules.
La nota hace referencia al caso de la adolescente activista Ahed Tamimi, detenida en diciembre tras hacerse viral un vídeo que muestra como da una bofetada a un soldado y que alcanzó en marzo un pacto con la Fiscalía militar para declararse culpable de varios cargos y aceptar una pena de ocho meses de prisión y una multa.
“Las misiones de la Unión Europea en Jerusalén y Ramala expresan su profunda preocupación sobre las circunstancias de su arresto, la duración y condiciones de la detención y cómo se llevaron los procedimientos en su caso y en casos similares en el sistema de justicia militar, afirma el escrito.
Los representantes europeos también condenan que efectivos israelíes “han matado a varios menores israelíes utilizando la fuerza letal”.
Aseguran estar “profundamente alarmados por el uso de munición real por las Fuerzas de Seguridad israelíes como medio de control de multitudes” e instan a Israel a “utilizar métodos de fuerza proporcionada” en las manifestaciones, ejercer “máxima contención”, abrir investigaciones “adecuadas” tras cada muerte y enjuiciar cuando sea necesario.
El 20 de marzo pasado, la ONG israelí Betselem denunció en un informe que Israel no garantiza la protección de menores palestinos en las Cortes Militares tanto en la fase de detención, el interrogatorio y el procesamiento legal al que los enfrenta.
Según el Servicio de Prisiones de Israel, 365 menores palestinos permanecían en cárceles, comisarías o centros de detención a finales del mes de febrero.