Este presupuesto es el resultante de la suma de lo recaudado con la campaña de microcréditos de Podemos (a día de hoy ha recaudado 1,48 millones), de los ahorros de la propia formación morada, del adelanto de la subvención del Estado (que puede ser de un máximo del 30 por ciento antes de las elecciones) y de lo que aporten a la campaña tanto Izquierda Unida como Equo, con los que confluye Podemos.
La formación confirma así que no financian la campaña con créditos bancarios. De hecho en el programa electoral incluyen que impulsarán una reforma para que los partidos políticos que concurran a elecciones no puedan pedir créditos bancarios para costear la campaña electoral.
A esto, suman que ni Izquierda Unida ni Equo aportan fondos que provengan de créditos bancarios ya que en el acuerdo de confluencia se comprometían a que no puedan financiarse con la banca.
En la campaña de 2016 Unidos Podemos declaró unos recursos de 3,9 millones, que se desglosaron en 843.000 en concepto de adelanto de subvenciones, y 3,12 millones aportados por el propio partido.