Diego Torres ha declarado este sábado ante el juez que instruye el caso Nòos. En su declaración, Torres ha involucrado a la Casa del Rey en la actividad que desempeñaba el Instituto que dirigía junto con el duque de Palma.
Así, ha asegurado que la infanta Cristina formaba parte de la gestión del Instituto Nóos, investigado por presunta malversación de fondos públicos. Torres ha afirmado que la infanta y su secretario, Carlos García Revenga, eran miembros de la Junta Directiva de la entidad, con un papel tan activo como el del resto de integrantes. Torres ha indicado al juez y a los fiscales anticorrupción que los cinco miembros de la Junta Directiva, incluida la Infanta Cristina, tomaban las decisiones y aportaban según sus conocimientos. Además, ha destacado que el marido de la Infanta Cristina solía “consultar” con su mujer las actividades que se llevaban a cabo a través del Instituto Nóos y que, por tanto, la infanta estaba al corriente de las mismas. La polémica declaración del exsocio de Urdangarin podría conllevar que la acusación popular pida la imputación de la infanta Cristina.
La defensa del exsocio del duque de Palma ha entregado al juez nuevos correos electrónicos y documentos sobre la gestión del Instituto Nóos con la intención de poner de manifiesto que tanto la infanta como su secretario, Carlos García Revenga, intervenían en la toma de decisiones y en el control de la gestión de la organización. García Revenga también está imputado en el caso después de que unos correos electrónicos entregados al juez Castro demostraran que Urdangarin le consultaba las decisiones del Instituto Nóos que ahora se están investigando. Iñaki Urdangarin y García Revenga declararán ante el juez el próximo 23 de febrero.
Referencias al rey
Por otra parte, Torres ha afirmado que la defensa de Iñaki Urdangarin le presionó para que asumiera toda la culpabilidad del caso prometiéndole que así no le faltaría “ni trabajo ni dinero”. Al preguntarle el fiscal si está presionando de uno u otro modo a Urdangarin, Torres ha respondido que no, sino todo lo contrario: que el abogado de Torres le ha amenazado a él.
En su declaración, ha exhibido correos electrónicos en los que Urdangarin pedía a la amiga del rey Corinna Sayn-Wittgenstein que llevara a cabo unas gestiones para integrarle en una fundación, tal y como previamente le había explicado a ella “su suegro”. No es la primera vez que la princesa alemana aparece en emails en el contexto del 'caso Nóos'. Hace un mes, Torres entregó al juez unos correos que demostraban que la amiga del rey había participado en la Valencia Summit 2004 invitada por el Instituto Nóos. Una factura que forma parte del sumario del caso puso de manifiesto que la fundación cargó a una empresa de la Generalitat valenciana el gasto de alojamiento de Corinna Sayn Wittgenstein.
Torres también se ha referido en varias ocasiones al abogado José Manuel Romero, asesor jurídico de la Casa Real y conde de Fontao, quien recomendó a Urdangarin en 2006 que evitara tener un papel protagonista en la actividad pública del Instituto Nóos. El exsocio del duque de Palma ha afirmado que el conde de Fontao les pidió “cubrieran las apariencias” sobre la actividad de Urdangarin.
Además, ha asegurado que la Infanta Cristina y la Casa Real conocían que el yerno del rey continuó con sus negocios, si bien no en primera línea, después de que en el año 2006 fuese instado a dejarlos por el monarca.
Negociaciones en La Zarzuela
Torres ha relatado que él mismo y su socio en el Instituto Nóos, Iñaki Urdangarin, negociaron en el palacio de La Zarzuela la celebración del foro deportivo Valencia Summit con el expresidente de la Generalitat, Francisco Camps, y la alcaldesa valenciana, Rita Barberá. La organización de este evento supuso un ingreso para Nóos de un millón de euros.
En su declaración ante el juez que instruye el caso Nóos, José Castro, Torres ha precisado que la reunión tuvo lugar en la residencia real en marzo de 2004, según han informado a EFE fuentes jurídicas.
En cuanto a la cuenta con 960.000 euros a su nombre hallada por la Agencia Tributaria en un paraíso fiscal, Torres ha asegurado que estos fondos eran fruto de los ahorros que había acumulado antes de ponerse al frente de Nóos junto con Urdangarin.
Urdangarin y Torres están impitados en las diligencias que instruye el juez José Castro como pieza separada del caso Palma Arena. El Fiscal Anticorrupción Pedro Horrach atribuye al aristócrata consorte y a su exsocio cinco graves delitos de corrupción: blanqueo de capitales, fraude a la Administración, falsedad documental, malversación y prevaricación.