Los 12 escaños obtenidos por Vox en su estreno en las elecciones andaluzas no sólo le permitirán contar con grupo propio en el nuevo Parlamento andaluz, sino que también le darán entrada en el Senado, al tener derecho a designar a un miembro en representación de la comunidad autónoma. Se trata de la primera vez que el partido de extrema derecha consigue representación a nivel estatal.
De acuerdo con la nueva distribución de fuerzas en el Parlamento andaluz, el retroceso electoral de PSOE y PP ha provocado que ambas formaciones pierdan representantes en la Cámara Alta: los socialistas pasan de cinco a tres, mientras que los 'populares', de tres a dos, según han informado a Europa Press fuentes parlamentarias.
Ciudadanos, que no obtuvo senador en las pasadas autonómicas, consigue dos y Adelante Andalucía –confluencia que integra a Podemos e IU– mantiene uno. Se trata del representante que obtuvo la formación morada tras las autonómicas de 2015. Dicho de otro modo, IU y Cs fueron las únicas formaciones con representación parlamentaria a las que no les correspondió representación en la X Legislatura.
En la actualidad, los cinco senadores del PSOE en representación de la comunidad autónoma de Andalucía son José Caballos, Juan Cornejo, Francisco Menacho, Elena Víboras y Fuensanta Lima, mientras que por el PP son Javier Arenas, Antonio Sanz y Rosario Soto. La novena es Maribel Mora, por Podemos.
No obstante, el artículo 106.17 del Estatuto atribuye al Parlamento andaluz “la designación, en su caso, de los senadores y senadoras que correspondan a la Comunidad Autónoma, de acuerdo con lo establecido en la Constitución” y establece que “la designación podrá recaer en cualquier ciudadano que ostente la condición política de andaluz”, de forma que no tendrán que ser necesariamente elegidos entre los parlamentarios autonómicos.
No será efectivo hasta la constitución del Parlamento
La distribución definitiva no se aprobará hasta que se constituya el nuevo Parlamento surgido las urnas, ya que el artículo 180 del Reglamento de la Cámara establece que “la Mesa, de acuerdo con la Junta de Portavoces, fijará el número de senadores que corresponda proporcionalmente a cada grupo parlamentario”.
Así, el presidente del Parlamento será el encargado de “fijar el plazo en que los representantes de los diferentes grupos parlamentarios habrán de proponer sus candidatos”. Acabado el plazo, el presidente de la Cámara hará públicas las propuestas presentadas y convocará al Pleno del Parlamento para la correspondiente designación.
Si fuera precisa la sustitución de alguno de los senadores, el sustituto o sustituta será propuesto por el mismo grupo parlamentario al que corresponda la vacante que se pretende cubrir.