El Partido Popular vetará la participación ciudadana en la web social del Partido Popular, en la que hasta ahora, simplemente con registrarse, cualquier ciudadano podía tener acceso a los argumentarios del partido, chatear, opinar o votar encuestas sobre diversos temas de la actualidad política. A partir de febrero solo podrán entrar en este foro los afiliados al PP, como se avisa en la propia página web desde hace unos días. Los populares justifican la decisión para que los afiliados “puedan estar tranquilos sobre la privacidad” tanto de sus identidades como de sus opiniones.
Este veto coincide con el cambio de diseño de la web oficial del PP que se dará a conocer en la Convención Nacional que los populares celebran este fin de semana en Valladolid y que servirá como pistoletazo de salida a las próximas elecciones europeas. Los ciudadanos, lógicamente, sí podrán conectarse con la nueva página oficial en la que se ofrece información de la organización del partido, se cuelgan las actividades de sus dirigentes y sus agendas y, de paso, también se hace propaganda de los logros del Gobierno. A lo que ya no tendrán acceso es al enlace popular.es, salvo que estén registrados como militantes del PP.
El aviso figura ya desde este miércoles en la página y se justifica por la necesidad de “garantizar la identidad de las personas adscritas al mismo”. Las fuentes del PP consultadas por eldiario.es han restado importancia a la decisión y rechazado que se trate de un “veto”, sino una medida encaminada a que los afiliados puedan entrar en el foro con mayor “tranquilidad”. Las mismas fuentes aseguran que no ha habido quejas ni incidentes que motiven el cierre de esta red social a la ciudadanía.
Hasta ahora, sí querías acceder a popular.es solo tenías que registrarte con tu correo electrónico y el código postal. De inmediato, recibías un email con la URL de la web para que completaras tus datos.
Una vez inscrito en el censo de la web ya se puede participar en los chats, ver las consignas o argumentarios que pasa la dirección de Génova a sus cargos públicos para unificar mensajes o los comentarios tanto críticos como laudatorios que vierten en el foro particulares y afiliados del PP sobre temas de actualidad o decisiones que ha tomado el Gobierno.
En estos momentos en esta web hay tres encuestas creadas en 2013. En la primera se pregunta si “apoyas la reforma de la Educación que acabará con el fracaso y el abandono escolar”. La opción que ha logrado triunfar con el 71% de apoyo es el “sí, era necesaria en un país que solo ha tenido leyes educativas socialistas”. En la segunda encuesta se pregunta si “crees que los escraches intimidatorios puedan contribuir a mejorar social y económicamente la situación del país” y gana con el 67% un lacónico “no, en absoluto”. En la tercera, se pregunta “qué opinas del buzón del Ministerio de Hacienda para conocer las propuestas ciudadanas sobre la reforma de la Administración”, y gana con un 71% la respuesta “es una forma de saber la opinión de los ciudadanos”.
Esta medida restrictiva tomada por el PP choca con las manifestaciones que constantemente hacen sus dirigentes presumiendo de ser los campeones de la “transparencia”. Además, contrasta con el empeño de otros partidos por facilitar la participación ciudadana en asuntos internos, como la designación de candidatos en un proceso de primarias, fórmula a la que se acaba de apuntar el PSOE y que ya practican otros partidos, como Equo.
La formación ecologista concurrió a las últimas elecciones generales con Compromís en Valencia y logró un diputado en el Congreso, Joan Baldoví. En septiembre de 2013 abrió una página web para que los ciudadanos pudieran aportar sus enmiendas a la ley de Transparencia. El propio Baldoví promocionaba en un vídeo la iniciativa bautizada como “democracia participativa”: “Tu voz será mi voz, tu voto el mío”, aseguraba el diputado valenciano. En el experimento participaron cerca de 2.300 personas.