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Cómo informamos sobre Podemos

La división interna en Podemos no es una invención de la prensa. Es una realidad que está ahí y que ni siquiera sus propios dirigentes niegan ni en privado y, desde hace unas semanas, tampoco en público. Ni endurecemos la información negativa sobre Podemos ni tampoco queremos caer en el otro error, que tú mismo señalas: el de tapar las cosas feas o endulzar la información.

Con Podemos la prensa ha cometido muchos abusos, y eso hace que entre sus simpatizantes y votantes exista una mayor suspicacia ante cualquier información negativa que aparezca en los medios, sea verdadera o falsa. Es algo comprensible. Pero te aseguro que por parte de eldiario.es hemos querido hacer una cobertura sobre este debate interno y las votaciones en Vistalegre lo más equilibrada posible, lo más periodística posible, dando voz a todas las partes y contando lo que ocurría sin otra intención que informar a nuestros lectores.

Otros cuatro lectores y socios de eldiario.es han preguntado esta semana con distintas cuestiones sobre nuestra cobertura sobre el debate interno en Podemos, que ha sido –según nuestros datos de audiencia– el asunto que más ha interesado esta semana y también el que más debate ha provocado. Respondo a todas ellas.

Es cierto que no solemos hacer informaciones a partir de un artículo de opinión, pero en el caso de la tribuna de Luis Alegre no estábamos ante un artículo de opinión más. Alegre es uno de los cinco fundadores de Podemos, su exsecretario autonómico en Madrid y exmiembro de la ejecutiva. Su opinión, como cualquier opinión, es una visión personal. Igual que lo es una entrevista, o una declaración pública; igual que lo son casi todas las declaraciones en política. Pero que alguien como Alegre diga lo que dijo sobre el entorno de Iglesias era un hecho noticioso que no podíamos ignorar. Puedes creerle o puedes pensar que se equivoca o que dice ahora esto por otros motivos distintos a los que expone. Pero es noticia en cualquier caso.

Así lo entendimos en la redacción de eldiario.es y en absolutamente todos los demás medios, que se hicieron eco de ese artículo. También lo entendieron así los lectores –el domingo fue trending topic mundial en Twitter y ha sido uno de los artículos de opinión más leídos esta semana en eldiario.es, con casi 200.000 lectores–. Por eso hemos publicado varias noticias sobre sus repercusiones y sobre las respuestas que ha provocado en los principales dirigentes de Podemos. Creo que era nuestra obligación seguir el tema, y no simplemente publicar ese artículo y hacer como que no pasaba nada.

Te aseguro que nuestra intención no es ni perjudicar a Podemos ni a uno u otro candidato. Tampoco influir en las votaciones internas de este partido a favor o en contra de Iglesias. Nuestro trabajo es contar la verdad de lo que sucede, perjudique o beneficie a quien sea. De la misma manera que este tema era espinoso para el equipo de Pablo Iglesias, también hemos publicado en varias ocasiones las críticas de Juan Carlos Monedero o Jorge Verstrynge contra Iñigo Errejón.

Lo hicimos el sábado 4 de febrero cuando ocurrió la noticia. Publicamos este artículo, que fue abriendo la portada gran parte del día. También se ha citado esa polémica en otras informaciones y artículos de opinión esta semana.

No ha habido queja alguna. Simplemente salió de portada como cualquier otra noticia o contenido –casi nada aguanta en la portada más de un día o, como máximo, dos–. Este tipo de encuestas son poco científicas, pero interesantes para fomentar el debate entre nuestros lectores y socios. En los comentarios había aportaciones muy valiosas, creo que reflejo del interés de nuestros lectores por este debate interno en Podemos.

No lo hicimos porque Juan Moreno Yagüe se presenta a secretario general pero no ha presentado lista al consejo ciudadano, que es donde está el gran debate interno en el partido entre los partidarios de Iglesias, los de Errejón y los de Miguel Urbán. Como el debate estaba en la otra votación, hicimos la encuesta sobre ella. Mezclar a Yagüe con Errejón habría sido confundir churras y merinas dentro del debate interno. Entiendo que es algo discutible, es verdad que podríamos haber sacado también una segunda encuesta sobre “a quién prefieres como secretario general” entre Iglesias y Moreno Yagüe. Pero en su momento apostamos por la otra porque consideramos que tenía mayor interés.

Nos ofrecimos a celebrar ese debate –yo mismo le pregunté al respecto a Pablo Iglesias en La Sexta Noche– pero no ha habido acuerdo entre ellos. También entrevistamos a Juan Moreno Yagüe y le publicamos una tribuna de opinión esta semana para presentar su plan para Podemos. Hemos dado voz a su propuesta, aunque no tanta relevancia en nuestra portada como a las entrevistas de Iglesias, Errejón y Urbán, por un criterio estrictamente periodístico. Sinceramente consideramos que el debate interno dentro de Podemos era el otro, y que Moreno Yagüe no cuenta internamente con los apoyos que respaldan a los otros líderes del partido como para justificar un despliegue como el que sí hemos hecho con los otros

Estamos haciendo algunos experimentos con audios a través del canal de Telegram de eldiario.es, que os recomiendo seguir. También acogemos a varios podcasts hermanos de eldiario.es: Carne Cruda, Kinótico y La Cafetera de Radiocable. Sobre lo que propones, no parece una mala idea. Antes tenemos pendiente algo en lo que sí estamos trabajando para las próximas semanas: cambiar el boletín de adelanto para socios para que sea algo más que una lista de titulares, como ya estamos haciendo con otros boletines temáticos.

Por ahora no tenemos correctores o especialistas en edición, como hubo en los buenos tiempos en los diarios impresos. Sí hay un protocolo de edición de cada artículo, por parte de los redactores jefe de cada área, y también una segunda lectura por parte de la mesa de cierre. Aun así, es cierto que se nos escapan muchos más errores de los que debiéramos. Es algo que me critica a todas horas mi madre, Montse G. Román, que es filóloga, periodista, escritora… y también ha trabajado algunos años como correctora –y suele editar muchos de mis artículos–.

Sinceramente creo que tenemos mucho que mejorar en lo que criticas, no solo porque también lo diga mi madre, aunque también defiendo que la edición perfecta es imposible en la prensa diaria. Las prisas existen porque trabajamos sobre algo vivo y urgente: la actualidad. Es verdad que en algunos temas que se cierran con más plazo no están justificados los errores, pero en otros son casi inevitables. En cualquiera caso, no quiero usar este argumento como excusa porque coincido contigo en que uno de los retos pendientes de eldiario.es es mejorar nuestra edición.

Respecto a los errores en la información, ayudaría si tú u otros lectores fueseis un poco más concretos. Esta sección está dedicada justamente a eso, a responder por nuestros errores o al menos a explicarnos ante ellos.

Es un problema técnico que aún tenemos pendiente solucionar y del que ya he respondido otras semanas en esta sección. Tenemos varios proveedores de publicidad –el soporte de vídeo es uno de ellos – que no pasan por nuestro sistema de publicación, sino que son externos. Por eso aún no hemos podido evitar que los socios veáis publicidad en los vídeos. Espero que se arregle pronto.

El nuevo sistema de votación de comentarios ya está en desarrollo y calculamos que estará en funcionamiento en marzo. Lo he dicho más veces: en los comentarios hay de todo, también intervenciones interesantísimas. Yo los sigo mucho y también intervengo en ellos. Esperamos encontrar un buen equilibrio entre la pluralidad y la calidad del debate. No queremos que los comentarios sean un sitio donde todo el mundo piense igual, pero tampoco un lugar donde proliferen los insultos.

Os invito a todos a que repaséis las normas de participación y a denunciar con el botón de “moderar comentario” las intervenciones insultantes o que no cumplan con estas normas básicas. Creo que no exigimos tanto: solo esa mínima educación y respeto por los demás que algunos, con el anonimato digital, a veces olvidan. Casi todos los ‘trolls' de Internet nunca usarían en persona el lenguaje ni los calificativos que a veces usan en la red.

He traslado la pregunta a Lucrecia Hevia, directora de la edición de eldiario.es en Andalucía, que es donde publicamos esta información. Te transmito su respuesta:

No creemos que sea exagerado hablar de “secuestradas” en el titular que menciona el lector en cuanto a que se refiere a personas retenidas contra su propia voluntad. En cuatro casos (los que menciona la noticia más el último caso de Maloma) se trata de casos públicos de privación ilegal de libertad sobre los que se han pronunciado numerosas fuentes oficiales como la Junta de Andalucía, el Gobierno de España, Naciones Unidas, la organización pro derechos humanos Human Rights Watch y hasta asociaciones del propio movimiento prosaharaui como la Asociación Cordobesa de Amistad con los Niños y Niñas Saharauis (Acansa). Intentamos hacer nuestro trabajo de la forma más rigurosa posible. Por eso no sólo hablamos con las familias sino con las propias afectadas y contrastamos con otras fuentes, como detallo a continuación.

En el caso de Naciones Unidas, el propio secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, definió los secuestros de Darya, Nadjiba y Maloma como “violación de los derechos humanos” y expuso en su informe anual sobre el Sáhara de 2016 que “durante mi reunión con el señor Abdelaziz (ex presidente saharaui, fallecido en mayo), planteé los casos de tres jóvenes mujeres retenidas contra su voluntad por sus familias en los campamentos de refugiados a lo largo de diferentes períodos. El señor Abdelaziz prometió prestar especial atención a la resolución de dichos casos, y me recordó que ya se habían puesto en marcha los procesos correspondientes”. Human Rights Watch, por su parte, ha seguido el caso muy de cerca y mantiene que “retener a un adulto contra su voluntad equivale a privación ilegal de la libertad, independientemente de si los captores son familiares que sienten un profundo afecto por esa persona. El Polisario debería asegurar que estas mujeres puedan ejercer su libertad de circulación y que los actos pasados y futuros de privación ilegal de la libertad sean castigados como delitos”. Todos estos actos son calificados como retenciones ilegales por organismos internacionales y asociaciones independientes que velan por los derechos humanos en el mundo. Por tanto, creemos que está justificado el uso de la palabra “secuestradas”. Nuestra información nada tiene que ver con “la propaganda marroquí” ni con ningún tipo de intento por “desacreditar la lucha del pueblo saharaui”. De hecho, en numerosas ocasiones este periódico ha narrado la situación del pueblo saharaui en su lucha por la autodeterminación.

Sí, lo haremos. Pronto llegará también otra versión de nuestra app con más mejoras.

He comentado tus sugerencias al equipo de diseño. Me transmiten que estamos trabajando ya en sustituir las imágenes fijas por otras de mayor definición, aunque no comparten tu idea de permitir que los lectores puedan elegir entre distintos tipos de letra.

No hemos abierto una sección de fútbol. Es una sección de Deportes, donde caben muchísimas más cosas que el fútbol. De hecho, si miras la sección, verás que el fútbol no es el único ingrediente. Esta semana, con el estreno de la sección, hemos hablado de waterpolo, de balonmano, de rugby, de tenis, de baloncesto, de ciclismo, de atletismo, de halterofilia...

Personalmente –lo he contado otras veces– a mí el fútbol no me interesa nada. No lo sigo, me aburre soberanamente y soy un absoluto ignorante en este deporte. Sí me gusta el baloncesto, pero no soy forofo del deporte de competición en general; nunca me ha llamado mucho.

La razón por la que hemos decidido abrir esta sección tiene que ver con mantener nuestro crecimiento y tener así más recursos que dedicar a lo que realmente nos interesa, que es el periodismo que se dedica a pedir cuentas al poder, más que la información sobre ocio, entretenimiento o competición deportiva.

eldiario.es cuenta ya más de seis millones de lectores mensuales. Es una cifra enorme para un diario que, hasta ahora, solo estaba centrado en la información dura, con muy pocas concesiones al ocio o el entretenimiento. Ojo, no tengo nada contra el ocio –que es imprescindible en la vida– ni contra la competición deportiva ni tampoco contra el fútbol. A mí no me gusta el fútbol, pero me encanta perder el tiempo con los videojuegos, y me gusta leer sobre ellos en eldiario.es (igual que les pasará a otros con el fútbol). Pero ni los videojuegos ni el fútbol son para eldiario.es el foco prioritario.

Si hemos cambiado algo la estrategia para abrir eldiario.es a otras secciones es porque necesitamos seguir creciendo para poder dedicar más recursos al periodismo que personalmente más nos importa. Necesitamos aumentar nuestra audiencia para así tener más ingresos publicitarios con los que dedicar más medios al periodismo comprometido y de investigación que nos demandáis los socios. También pensamos que, más allá de la información sobre competición, se puede hacer ese tipo de periodismo en el mundo del deporte.

Ya somos uno de los ocho diarios españoles más leídos. Empezamos siendo un medio pequeño y especializado y nos estamos convirtiendo en un diario generalista. Creo que es bueno, porque así somos capaces de llegar a más lectores y tener un mayor impacto en la sociedad. No queremos ser Le Monde Diplomatique, con todo el respeto por ese medio, que sigo. Queremos convertirnos en el diario más leído e influyente en España. Y queremos lograrlo siendo un medio tan independiente como lo somos hoy, un periódico que siga estando en las manos de un grupo de periodistas, no de grandes empresas con intereses muy lejanos a los de los lectores.

Para conseguir este objetivo es inevitable que nos tengamos que abrir a otros mundos, pero eso no nos hace perder nuestra esencia, sino que nos ayuda a reforzarla. A diferencia de lo que ocurre en la radio, en eldiario.es la sección de deportes no le quita ni periodistas ni espacio a la información que más nos preocupa.

Por supuesto, en nuestra sección de deportes tampoco cabe todo, ni buscamos la audiencia a cualquier precio. No verás aquí fotogalerías sobre “los mejores culos de las olimpiadas”, ni tampoco un periodismo forofo de uno u otro equipo. Vamos a ser, de largo, el diario que más informe de deporte femenino, o que hable de otros deportes que no sean fútbol, o de la práctica deportiva sin ánimo de competición. Vamos a hacer deportes, pero lo haremos a nuestra manera.

Gracias por vuestro interés y por vuestras preguntas. Todas las críticas nos ayudan a mejorar. Volveré con más respuestas la próxima semana.

La división interna en Podemos no es una invención de la prensa. Es una realidad que está ahí y que ni siquiera sus propios dirigentes niegan ni en privado y, desde hace unas semanas, tampoco en público. Ni endurecemos la información negativa sobre Podemos ni tampoco queremos caer en el otro error, que tú mismo señalas: el de tapar las cosas feas o endulzar la información.