A 24 días de las elecciones, el candidato del PP a la Alcaldía de Sevilla, José Luis Sanz, ha vuelto a “denunciar” la gestión en materia de turismo del actual alcalde, Antonio Muñoz, al que acusa de haber consentido que la actividad turística “esté a punto de desbordarse” en la ciudad de la Giralda. “En Sevilla no cabe ni un apartamento turístico más, ni mucho menos, viviendas con fines turísticos”, ha recalcado en varias ocasiones el candidato popular durante la comparecencia ante los medios que ha celebrado este jueves en el histórico (y turístico) barrio de Santa Cruz.
Precisamente, la calle Mateos Gago, esquina con Rodrigo Caro, ha sido el escenario escogido por el aspirante a alcalde del PP para presentar su modelo turístico frente al del socialista Antonio Muñoz, quien dio a conocer hace dos días su “decálogo de medidas para un turismo sostenible”. Antes de pasar a enumerar los cinco puntos de su propuesta, Sanz quiso apuntalar que “Sevilla no se puede resignar a depender única y exclusivamente del turismo”, así como poner en evidencia la connivencia del Gobierno socialista para con la “saturación turística” que sufre la capital andaluza, según denuncia el senador, apelando al número de licencias para viviendas turísticas concedidas por el Consistorio hispalense desde el año 2016, “siendo Antonio Muñoz delegado de Hábitat Urbano, Turismo y Cultura”, como ha recordado el candidato popular.
Desde entonces, según datos del PP, la gerencia municipal de urbanismo ha concedido 7.995 licencias de viviendas con fines turísticos (7.633 en el centro, 1.095 en Triana y 167 para apartamento turísticos), lo que se traduce en un total de “casi 45.000 plazas turísticas que ha dado el señor Muñoz”, en palabras del que fuera alcalde de Tomares. Si bien Sanz ha reconocido que es competencia del Gobierno andaluz y no del local establecer límites al número de viviendas de este tipo, desde el PP insisten en que el actual regidor podría haber recurrido a ciertos mecanismos para poner frenos a la “invasión turística”. En este sentido, a preguntas de los periodistas sobre cómo se podría controlar dicha proliferación de viviendas con fines turísticos desde el Ayuntamiento, José Luis Sanz ha avanzado que de proclamarse alcalde de Sevilla el próximo 28 de mayo, sus “primeras reuniones” pasarán precisamente por “sentarme con la Junta para trabajar conjuntamente en el decreto y en la ordenanza que limite el número de viviendas y apartamentos turísticos” en la ciudad.
Descentralizar el turismo con nuevas rutas
Asimismo, ha añadido que él ya está “en conversaciones” con la Consejería competente, que se encuentra trabajando en el marco normativo necesario para adoptar medidas en esta dirección. Cabe recordar que en el mes de febrero, la Junta de Andalucía anunció que estaba ultimando un decreto que “permitirá a los ayuntamientos, si quieren, limitar el máximo de viviendas turísticas, en función de la necesidad de acceso a una vivienda y la protección de los derechos de las personas residentes ante una posible situación de saturación de sus espacios vecinales”, según manifestó entonces el consejero de la Presidencia, Antonio Sanz.
De su lado, el candidato del PP a la Alcaldía hispalense ha señalado como punto prioritario de su programa electoral solucionar “la concentración” del turismo en el casco histórico, en alusión a los “problemas de convivencia con los vecinos” que se están dando en el corazón de Sevilla, según lamenta Sanz. “Eso se hace poniendo en valor nuevas rutas turísticas y utilizando herramientas digitales que estudian cómo se mueven los flujos turísticos por la ciudad”, ha adelantado el líder del PP en la capital andaluza para desgranar, a continuación, las cinco medidas que se compromete a tomar en caso de vencer en las urnas.
Así pues, dentro del primer apartado plantea “elaborar un ambicioso plan turístico con el único objetivo de descentralizar esa masa turística que se concentra en un solo triángulo, poniendo en valor otras rutas turísticas” como “la judía, la de los conventos, la de Triana o Macarena”, confiando en que “Sevilla lo tiene todo”. En segundo lugar, Sanz ha situado la “búsqueda del equilibrio entre el vecino y el visitante”, tratando de “frenar la despoblación” que sufre el casco histórico, convertido hoy, según recrimina a Muñoz, “en un parque temático”. Para ello, plantea “ayudar al comercio local y a esos vecinos que cada vez tienen más complicado la vida en el barrio” por la llegada de los turistas.
El turismo, en el centro del debate
Del mismo modo, con el afán de hacer “habitable el casco histórico para los sevillanos”, ha anunciado medidas como la “regulación de los alojamientos turísticos y la creación de una mesa de trabajo para la convivencia turística en la que esté la Policía Local, las asociaciones de vecinos y todos los colectivos implicados” en el sector turístico. Al hilo, ha señalado que seguirá trabajando con la Cámara de Comercio y con los empresarios para descongestionar el turismo que se concentra en el núcleo histórico de la ciudad.
En línea similar, ha prometido “devolver el centro a los sevillanos”, dotándolo de un mayor servicio de transporte público eléctrico, de mayor aparcamiento (hasta 32 bolsas en distintos barrios, ha apuntado), así como bonificando el IBI a los residentes y concediendo ayudas al comercio tradicional porque “este barrio no puede perder su identidad”. Por otro lado, ha garantizado que actualizará las Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS) y pondrá en marcha “un programa de intervención, control, comprobación y supervisión, así como un grupo de seguimiento en el que participarán todos los colectivos afectados”.
Todo ello demuestra que la necesidad de gestionar el avance del turismo en la ciudad se posiciona ya como uno de los temas centrales de la campaña electoral que dará comienzo de manera oficial el próximo 12 de mayo. Tanto es así, que el propio alcalde de Sevilla y candidato del PSOE a la reelección, Antonio Muñoz, presentó dos días antes que el candidato popular su propio “decálogo de medidas para un turismo sostenible” en un encuentro con la Comisión de Turismo de la CES-Cámara de Comercio.
Desencuentros en los modelos de ciudad
En su listado, también Muñoz apuesta por regular viviendas turísticas y “diversificar la oferta y los productos turísticos” con el desarrollo de planes “específicos para Triana, Macarena y la Zona Sur”, además de crear un “nuevo eje cultural en torno a los grandes artistas vinculados a nuestra ciudad”. Lo cierto es que las propuestas en materia de turismo a un lado y otro del arco político coinciden en algunos de sus planteamientos, como en lo relativo a alcanzar “el equilibrio turístico”, proteger “los oficios y la industria local desde el turismo” en pro de la preservación de la identidad o a la “limitación de las viviendas con fines turísticos”, que se recoge también en decálogo socialista.
A este respecto, Muñoz recordó que “la Junta debe autorizarnos a limitar las viviendas con fines turísticos en las zonas saturadas” y aseguró que en su equipo están “dispuestos a liderar este proceso a nivel nacional”, aseverando que mientras estén en el Gobierno “vamos a limitar las viviendas turísticas en la ciudad de Sevilla”.
En cualquier caso, el candidato del PP ha tratado de poner de manifiesto que su “modelo de ciudad” dista mucho del que ha desplegado el actual primer edil durante su mandato. De ahí que haya criticado iniciativas como la colocación de hamacas amarillas en el entorno del Costurero de la Reina, entendiendo que se trata de “un magnífico ejemplo de cuál es la concepción y el tipo de turismo que quiere Muñoz para nuestra ciudad”. Con este tipo de acciones - ha reprochado el líder popular - “el alcalde no solo agrede a la imagen de un monumento, sino que ataca a la identidad propia de la ciudad que es nuestra marca y garantía de la calidad turística”, al tiempo que “se fomenta el turismo de masas y de baja calidad”. De modo que ha terminado remarcando que “Sevilla se vende sola, no necesita unas hamacas amarillas”.