“Las altas temperaturas que sacudieron a la población de Sevilla a mediados de junio han sido la peor ola de calor de este mes registrada en los últimos 20 años”. Así lo han afirmado en la jornada de presentación del sistema piloto del proyecto ProMETEO. Esta iniciativa sitúa a Sevilla a “la vanguardia mundial de la lucha contra el Cambio Climático”, un problema que causa 1.300 muertes en España según los datos ofrecidos desde la organización internacional que lo lidera. “Nadie cuestiona el cambio climático”, ha arrancado su intervención el alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, en la presentación del proyecto. Y “en Sevilla se manifiesta (el calentamiento global) a través de las olas de calor” ha añadido.
Este proyecto, han explicado, sirve para categorizar las olas de calor de la ciudad en función de su impacto en la salud de las personas lo que, en teoría, ayudará a tomar medidas reales y eficaces con el objetivo de “minimizar el impacto de este fenómeno”. Agregar personal sanitario en las salas de urgencias, abrir refugios con aire acondicionado o priorizar el enfriamiento de la ciudad, son algunas de las medidas que se podrán tomar en la ciudad de Sevilla a partir de los datos de ProMETEO. Durante un año se llevará a cabo este proyecto piloto que no cuenta con presupuesto municipal al ser un acuerdo de colaboración para el desarrollo de la iniciativa.
Las categorías se dividirán en cinco: riesgo muy elevado, riesgo elevado, riesgo medio, riesgo bajo y sin impacto. Las olas de calor extremo recibirán un nombre propio que comenzará por la última letra del alfabeto español, las cinco primeras serán nombradas como Zoe, Yago, Xenia, Wenceslao y Vega. Esto servirá para concienciar a la población y para tomar medidas sobre cómo afrontar el calor extremo. También se podrán implementar acciones por parte del gobierno municipal y de las empresas de la ciudad. Se trata de una llamada de atención para alertar de este fenómeno meteorológico, al igual que se hace desde hace tiempo con huracanes tormentas y nevadas intensas
La Agencia de Meteorología será la primera en avisar (como siempre) de la llegada de una ola de calor. A partir de ahí, se notificará este fenómeno al Proyecto ProMETEO y será entonces cuando se decidirá la categorización de la ola de calor en función de las características históricas registradas durante los últimos 25 años. Los medios de comunicación trasladarán dicha información, en caso de que haya un riesgo muy elevado para las personas, y la ciudadanía tomará medidas que servirán para prevenir “muertes y afectaciones a la salud”.
Minimizar el impacto
Kathy Baughman, directora del Centro de Resiliencia Adrienne Arsht-Rockefeller Foundation, ha declarado que este proyecto es “bueno” porque servirá para alertar a la ciudadanía de las altas temperaturas, con la intención de transformar las ciudades en espacios “mejores y más seguros”. Mauricio Rodas, miembro del mismo Centro y ex alcalde de Quito, ha denunciado, en su intervención durante la presentación en Sevilla, que “las olas de calor son el fenómeno natural que afecta y mata a más personas en el mundo, más que todos los demás desastres naturales en su conjunto”.
Sevilla forma parte de un grupo de ciudades que están comprometidas con proyectos y acciones contra el calor entre las que se cuentan Atenas, Miami, Monterrey y Melbourne. Este proyecto servirá para proteger a la ciudadanía, sobre todo la más vulnerable, y a los sectores económicos de los municipios. El alcalde de Sevilla ha manifestado que “también afecta a las personas que sufren pobreza energética”. “La ciudad está obligada a reaccionar contra el cambio climático”, ha sentenciado Muñoz.
“Sevilla contra el cambio climático”
La ciudad de Sevilla se unió a la Extreme Heat Resilience Alliance (EHRA) en octubre de 2021. Esta alianza, creada en 2020, desarrolla resiliencia al calor extremo y está formada por líderes y expertos para analizar la situación económica y humanitaria que generan las altas temperaturas. Se otorga asistencia técnica a las ciudades para proteger a su población con soluciones concretas. Esta iniciativa pretende que en 2030 se haya podido ayudar a un billón de personas.
La iniciativa ProMETEO está liderada por el Adrienn Arsht-Rockefeller Foundation Resilience Center del Atlantic Council y cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de Sevilla, la Agencia Española de Meteorología, la Universidad de Sevilla (US), la Universidad Pablo de Olavide (UPO), el Instituto Carlos III, la Oficina Española de Cambio Climático y la Alianza para el Día Después, tal como informa el Consistorio en un comunicado.