Siete activistas de Femen han llevado a cabo este viernes un acto simbólico de protesta en la Puerta de Alcalá de Madrid para llamar la atención por la situación que han pasado muchas mujeres durante el confinamiento al haber tenido que convivir con su maltratador bajo el mismo techo.
Las activistas, con mascarilla, el torso desnudo y con la cabeza cubierta por un velo llevaban una corona en la que se podía leer “Ni una menos”, en recuerdo de las víctimas del machismo.
Han apelado a la responsabilidad de los grupos parlamentarios para avanzar en el pacto de Estado contra la violencia de género, pendiente de dotación económica, ha dicho a Efe Lara Alcázar, portavoz de este colectivo.
“Mi casa, mi amenaza” y “pandemia machista” eran algunos de los lemas que llevaban escritos en el torso.
Durante el confinamiento se han incrementado las llamadas al 061, por lo que la presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, María Ángeles Carmona, pronosticó esta semana un “repunte” de las denuncias por violencia machista, aunque explicó aún no se conocen las cifras “fidedignas” de denuncias durante el estado de alarma debido, entre otros motivos, a la suspensión de “los plazos procesales” en los juzgados.