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Uno de los curas que aparece en 'Spotlight' se suicida en su celda tras volver a la cárcel por pederastia

El padre brasileño Bonifacio Buzzi, de 57 años, se ha suicidado ahorcándose con unas sábanas en su celda tras haber sido detenido acusado de abusos sexuales a dos menores el pasado viernes, en el estado de Minas Gerais (Brasil). El sacerdote fue condenado en 2007 a 20 años de prisión por pederastia, pero en 2015 consiguió la libertad condicional por buen comportamiento.

El caso de Buzzi, autor de agresiones sexuales a niños durante años, se refleja en la película estadounidense 'Spotlight', que aborda la investigación llevada a cabo por unos periodistas sobre los abusos sexuales a menores en múltiples diócesis de todo el mundo con la complicidad de la estructura eclesial.

La pederastia forma parte del oscuro pasado de Buzzi desde hace mucho tiempo. Las primeras denuncias contra el sacerdote se realizaron en los años 90 en Santa Catarina. En 1995, el sacerdote fue denunciado por unos padres que le acusaban de haberle practicado sexo oral con sus hijos. Buzzi estuvo encarcelado desde 2007 a 2015 por abusar de un menor de 10 años. Y la semana pasada fue acusado y encarcelado por agredir sexualmente a dos niños de 9 y 13 años en el municipio de Tres Coraçoes, en Minas Gerais.

La historia de Bonifacio Buzzi es una más en los miles de casos de pederastia dentro de la Iglesias Católica. Muchos niños y niñas fueron violentados ante el silencio cómplice de toda una comunidad y el encubrimiento de la cúpula eclesiástica. El escándalo de pedofilia en Boston que destapó el equipo de periodistas de The Boston Globe marcó un antes y un después. Hasta entonces, los casos conocidos de curas que abusaban de niños se solucionaban del mismo modo: con el alejamiento del sacerdote de la parroquia en cuestión, su traslado a otro lugar, y una pequeña indemnización para las víctimas, a quienes se obligaba a firmar un estricto acuerdo de confidencialidad.