Texto íntegro de la declaración institucional contra la violencia de género
Ante el encadenamiento de muertes violentas y otros gravísimos delitos contra mujeres y menores que han tenido lugar en nuestro país durante este verano, el Congreso de los Diputados quiere manifestar su repulsa más firme y su solidaridad con los hijos e hijas de las víctimas y con sus familias, así como con aquellas otras que han sido asesinadas en este año y en momentos anteriores.
Queremos hacer un llamamiento al gobierno de España, y a las administraciones autonómicas y locales, para que redoblen sus esfuerzos por prevenir estos hechos y apoyar a las víctimas, mostrando a la vez su total desprecio hacia los maltratadores, que deben sentir el rechazo social por su actitud machista y delictiva. Cada caso conocido debe ser atendido de manera inmediata, proporcionando todos los recursos posibles y adecuados a la situación de cada mujer y de sus hijos e hijas, si los tiene.
De la misma manera, queremos también pedir a la administración de Justicia la mayor atención y sensibilidad hacia este fenómeno, con el fin de dar más amparo a las mujeres y conseguir que un mayor número denuncien la situación que padecen. Solicitamos firmeza en el castigo de los maltratadores, que no tienen cabida en una sociedad democrática y avanzada.
De manera particular, el Congreso de los Diputados quiere manifestar que es consciente de que los hijos e hijas de las madres víctimas están en el epicentro del fenómeno y sufren directamente su impacto, siendo con frecuencia el instrumento para el más brutal de los chantajes y venganzas. Por ello, resaltamos la importancia de que niños y niñas vivan en un entorno seguro, alejado del abuso y del maltrato. Confiamos en que la entrada en vigor, hoy mismo, de la legislación de protección a la infancia, contribuya a evitar estos casos que tanta alarma generan.
Animamos a toda persona conocedora de un caso de violencia de género a que lo ponga en conocimiento de la administración más próxima, para saber de inmediato qué es lo que conviene hacer y proteger eficazmente a las mujeres, parando de una vez por todas esta espiral de violencia que no cesa.
Queremos rendir homenaje también a las víctimas indirectas de la violencia de género -aquellas amigas, hermanos, hermanas, padres, madres- que sufrieron la brutalidad de una violencia que también quiere acabar con la solidaridad y el apoyo a las víctimas.
España es un ejemplo para la comunidad internacional en su lucha contra este terrible problema. Debemos seguir avanzando en su completa eliminación y para ello se precisa de la colaboración de toda la ciudadanía. Todos y todas, desde nuestros respectivos cometidos, personales, familiares o profesionales, debemos comprometernos en esta tarea.
Por ello, pedimos a todos los poderes del Estado y a la sociedad ese compromiso y esa colaboración que tenemos la completa seguridad que obtendremos, para la total desaparición de nuestra sociedad.