¿Quién era el copiloto del avión de Germanwings?

Las últimas informaciones sobre la tragedia aérea en los Alpes franceses abren la puerta a la posibilidad de que el copiloto, solo en la cabina en el momento en que el avión empezó a perder altura, hubiese estrellado voluntariamente el aparato.

48 horas después del accidente, se ha hecho pública la identidad del supuesto responsable de lo ocurrido. Según la información aportada por el fiscal francés Brice Robin, el copiloto se llamaba Andreas Guenter Lubitz, tenía 28 años y nació en la localidad de Montabaur, en el estado federado de Renania-Palatinado (oeste de Alemania).

Como ha confirmado el presidente ejecutivo de Lufthansa, Carsten Spohr, en rueda de prensa, Lubitz pertenecía a la plantilla de Germanwings desde el año 2013 y acumulaba 630 horas de vuelo. Terminó su formación en 2008 y su actitud era, según palabras de Spohr, “impecable”. Trabajó después como auxiliar primero y tuvo un paréntesis en su formación hace seis años. Este parón le obligó a ser examinado de nuevo al reicorporarse a la actividad.

Lubitz era el menos experimentado de los dos pilotos que estaban a los mandos del Airbus A320. Su compañero (identificado como Patrick S.), el comandante que se encontraba fuera de la cabina cuando el avión comenzó el descenso brusco, contaba con más de 10 años de experiencia y más de 6.000 horas de vuelo.

Varios medios han difundido una foto del copiloto de Germanwings que pertenece a su perfil de Facebook, ahora borrado.

El fiscal ha informado de que no figuraba en ninguna lista de sospechosos de terrorismo u otros delitos.

Según un artículo publicado por la revista Aviation Business Gazette en septiembre de 2013, la Administración Federal de Aviación (FAA) incluye a Andreas Guenter Lubitz en una base de datos que reúne a los pilotos que han superado la formación, tienen las licencias y cumplen los estándares médicos establecidos por el organismo. Los expertos en seguridad en el transporte recomiendan no volar con pilotos que no posean este certificado.

Lubitz era socio del Club de Deportes Aéreo de su localidad, el LSC Westerwald, que publicó en su web una nota de pésame en la que se podía leer lo siguiente: “Andreas murió como primer oficial de servicio en la catástrofe aérea [...]. Cumplió su sueño de volar, sueño que ahora ha pagado caro con su vida”. El club también explica en el comunicado que Lubitz comenzó como piloto de planeadores, de vuelo sin motor, y se formó hasta ponerse al frente de un Airbus.

La alcaldesa de Montabaur, Gabriele Wieland, de donde era originario el copiloto, explicó a la agencia de noticias alemana dpa que el joven había vivido con sus padres y tenía también un alojamiento en Düsseldorf, ciudad a la que se dirigía el avión que se estrelló con 150 personas a bordo.