La estatua del periodista italiano Indro Montanelli en Milán (norte de Italia) apareció cubierta de pintura roja y con las palabras “racista” y “violador” en su pedestal, en un nuevo ataque contra este intelectual, criticado por haber aceptado a una niña de 12 años como esposa durante la guerra en la ex Abisina.
La figura de Montanelli (1909-2001) se ha encontrado en el centro de las controversias en estos días después de que asociaciones antiracistas pidieran la retirada de su estatua, siguiendo lo que está ocurriendo en algunos países tras el asesinato en Estados Unidos del afroamericano George Floyd a manos de la policía.
El miércoles pasado, la asociación milanesa “I Sentinelli”, que lucha contra las discriminaciones, había enviado una carta al alcalde de Milán, Giuseppe Sala, pidiendo que se retirase la estatua de estos jardines públicos en el centro de Milán y fuese sustituida por “alguien más digno de representar la historia y la memoria de la ciudad”.
Por el momento nadie ha reivindicado este ataque.
De Montanelli se recuerda estos días cómo reconoció durante un programa televisivo en 1969 que cuando participó como soldado en la guerra colonial de Italia (1930) en la exAbisina (ahora Etiopía), había aceptado como esposa una niña etíope de 12 años que le seguía a todos los sitios.
En aquel programa fue increpado por este hecho y Montanelli defendió sin reparos y sin arrepentimiento que se trataba de costumbres del país y que allí las mujeres se casaban cuando eran muy jóvenes.
Durante la guerra en Etiopía, Montanelli tenía 26 años y fueron comúnes entre los colonialistas italianos las relaciones sexuales y convivencias con mujeres africanas, muchas de ellas niñas, hasta la promulgación de las leyes raciales fascistas de 1938 con las que se prohibieron.
En lo que respecta a las relaciones sexuales, ya en 1930 la ley italiana consideraba violación el sexo con menores de 14 años.
No es la primera vez que la estatua sufre ataques. El 8 de marzo de 2019, durante la manifestación para el Día Internacional de la Mujer, algunas activistas del movimiento feminista “Non Una Di Meno” (Ni una menos) la cubrieron con pintura rosa.
La petición de retirar la estatua ha sido criticada tanto por los partidos de derechas como de izquierdas y por representantes del periodismo.
“¡No se toca al gran Indro Montanelli!”, dijo el líder de la Liga, Matteo Salvini, pero el mismo alcalde de Milán, Beppe Sala, del Partido Demócrata, rechazó completamente la idea al afirmar que “todos cometemos errores en nuestras vidas, pero de Montanelli, Milán reconoce sus cualidades, que son indiscutibles”.
Milán ha dedicado desde 2002 un parque al periodista y escritor que sufrió un grave atentado por parte de las Brigadas Rojas en 1977 y en 2006 el entonces alcalde Gabriele Albertini inauguró la estatua que representa a Montanelli sentado redactando con su inseparable máquina de escribir “Carta 22”.