Los directores de los centros de salud públicos madrileños se reunirán este jueves a las 13:30 horas para tomar la decisión de si llevan a cabo una propuesta que contemplaron ya hace tres semanas: dimitir en bloque para protestar contra los planes del gobierno regional de privatizar 27 centros de atención primaria.
El borrador de la carta dirigida al consejero de Sanidad, Javier Fernández-Lasquetty, se redactó hace tiempo y su ejecución dependía de las negociaciones con el Ejecutivo. Los resultados de las reuniones que se han celebrado esta semana no han sido positivos para los trabajadores de la Sanidad pública y han planeado reunirse este jueves para ir más allá en sus protestas: si Lasquetty saca a concurso alguno de los centros de salud públicos, los directores de la asistencia primaria dimitirán en bloque.
Las negociaciones se estancan
Este miércoles Lasquetty (PP) ha reconocido que va a seguir adelante con sus planes, a pesar de las reuniones que ha mantenido con los sindicatos. Sobre la petición de sindicatos y sanitarios acerca de frenar el proceso privatizador, Lasquetty ha dicho: “Es un imposible ilógico, ya que si no se externalizan seis hospitales, si no es así, no hay ahorro. Habría una continuidad en los costes, pero no puede ser un ahorro mantener algo igual que como está: es pura lógica”. Con las mismas, ha calificado el documento de ahorro de la coordinadora profesional (jefes de servicio y directores de centros de salud) de decepcionante y poco sólido. Lasquetty no admite las propuestas de los sindicatos, pero no concreta cuál será el ahorro con la privatización que pretende llevar a cabo. “No le puedo decir en este momento”, ha asegurado este miércoles.
Continúan las protestas
Los trabajadores y pacientes de la sanidad pública madrileña llevan más de un mes de movilizaciones en contra de los recortes. Desde hace varios domingos, el centro de la capital se tiñe de blanco en defensa del servicio público. Además de la primera 'marea blanca', que tuvo lugar el 18 de noviembre, los sindicatos de la Mesa sectorial de Sanidad -Satse, CCOO, Amyts, CSIT, UGT y USAE-, a los que se unió AFEM, convocaron el 27 de noviembre una manifestación en la que participaron más de quince mil personas -70.000 según los convocantes-, coincidiendo con el fin de la huelga de 48 horas de todos los trabajadores de la sanidad.
Los dos últimos domingos se ha repetido la escena y miles de personas marcharon bajo el lema “Somos médicos, somos pacientes, defendemos la sanidad pública”. Este miércoles centenares de personas convocadas por la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) han marchado hasta las inmediaciones de la Asamblea de Madrid, donde un cordón policial les ha impedido seguir el paso, aunque se han dispersado hasta acercarse al edificio.
Hace dos semanas un millar de personas protestaron frente a la sede del Gobierno regional contra las medidas sanitarias del Ejecutivo. Acusaron a la Comunidad de Madrid de “esconder” bajo sus planteamientos la intención de “privatizar” la sanidad y “desmantelar” el sistema sanitario público. La policía detuvo a una persona que supuestamente intentó acceder al edificio.
Desde el anuncio del plan, el pasado 31 de octubre, se mantienen encierros de trabajadores en una veintena de hospitales madrileños. Esta noche se están produciendo encierros en un gran número de hospitales y centros de salud de la región. También se han secundado iniciativas ciudadanas como #abrazatuhospital, en la que miles de personas rodearon los centros sanitarios. El consejero de Sanidad regional se refirió a la protesta como “una muestra de afecto” a los centros y a quienes trabajan en ellos. Además, desde que la consejería de Sanidad ordenó retirar los carteles informativos sobre las medidas planeadas por el Ejecutivo de Ignacio González porque “inducen a error”, se pueden ver sábanas blancas colgadas de las ventanas y balcones en numerosos inmuebles de la región.