La portada de mañana
Acceder
Ribera comparece en el Congreso mientras se ultima el acuerdo en Bruselas
“No hay que ser matemático”: los científicos ponen la crisis climática ante los ojos
Opinión - Mazón se pone galones. Por Raquel Ejerique

Occidente trata de blindarse contra el ébola

El brote de ébola en África comienza hacer sentirse vulnerable a los países occidentales –entre ellos España–. Así está tratando de levantar una barrera para mantener el virus lo más alejado posible, especialmente desde que tres ciudadanos, dos estadounidenses y uno español, se infectaron. El catedrático de Salud Pública Ildefonso Hernández analizó para eldiario.es: “Los problemas de salud pública son globalizados”.

A partir de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) decretó la Alerta Internacional por el ébola, que coincidió con el traslado por primera vez a suelo europeo de un enfermo (el sacerdote Miguel Pajares que ingresó en Madrid), muchos paìses despertaron a lo que estaba ocurriendo desde diciembre de 2013 en África. El domingo se descartaba Alicante un caso sospechoso. Este lunes se ingresaba a un ciudadano de Sierra Leona en Basurto (Vizcaya) al presentar fiebre. Tampoco portaba el virus, segun ha confirmado el Servicio de Salud Vasco. A pesar de que la OMS insiste en “el riesgo de transmisión durante un viaje en avión es bajo y que, de igual manera, infectarse en un avión es muy improbable porque ”los enfermos se sienten tan mal que no pueden viajar“, la misma OMS ha pedido a los estados con el ébola activo que hagan ”revisiones a las personas que salgan del país cuando presenten fiebre compatible con una posible infección por ébola“.

En estado de cosas, los hospitales españoles están funcionando con un ojo puesto en los termómetros. En los de la Comunidad de Madrid se ha indicado al personal –y es parecido en la red general sanitaria– que si se presenta un “caso sospechoso de alguno de los paises implicados con dos síntomas compatibles con ébola se debe llevar a un cuarto de aislados”, cuenta a eldiario.es un médico de urgencias de la región. La enfermera deberá colocarse el traje de buzo. Se avisa al médico para extraerle las muestas para las pruebas que deben hacerse fuera, en el laboratorio especializado (de 6 a 24 horas), cuenta.

El protocolo “deja alguna que otra laguna”, opina este doctor, ya que el cuadro de síntomas con el que trabajan “es muy general: dolor, vómitos...”. Y añade un problema: “Casi cualquier fiebre que procede de África es una malaria hasta que se demuestre lo contrario. Y se parecen mucho en la sintomatología, sólo las pruebas los van a descartar aunque la mayoría de lo que nos encontremos será malaria”. De hecho, el paciente de Basurto fue rápidamente positivo en esta patología que se transmite por la picadura de un mosquito y que se importa a España en unos 400 casos al año, según la OMS. “Yo en lo que va de 2014 he tratado a dos”, dice el facultativo.

Según cuenta este doctor a eldiario.es, “no nos han dado un cursillo especial para lo del traje”. También añade que al potencial paciente “se le trata igual que a otro sólo que aislado”. Y hasta que no se le declare positivo o negativo ahí está pensado que permanezca. De todas maneras, la situación ha hecho que en otro hospital de la Comunidad de Madrid, en Getafe, el domingo pasado tuvieran que atender a una persona que “dijo encontrarse mal en los calabozos de la policía y ante la duda pues lo mandaron al hospital”. Era de nigeria pero ni siqueira había estado en África recientemente.

También este martes, un hospital alemán ha declarado que la mujer que ingresó el míercoles pasado, sospechosa de ébola, “no parece tener el virus” e incluso ha contado que “no estuvo en la zona de la epidemia en África”. La mujer tuvo un desvanecimiento en un centro de trabajo y presentó alta fiebre. “En este momento, los expertos no contemplan que sea ébola”, ha dicho un portavoz quien ha apuntado a una “infección estomacal”.

Unos días antes, el 15 de agosto, Austria tuvo que enviar equipos especiales a un apartamento a una ciudad del Tirol porque una mujer británica fue hallada muerta tras llegar al país desde Nigeria vía Alemania. “Es muy improbable que sea ébola”, dijeron los expertos en enfermades infecciosas pero se tomaron muestras para analizar. Cuando una persona muere por ébola, el protocolo de seguridad obliga a incinerarlo sin autopsia y en un féretro sellado.

Confusión y mensajes contradictorios

Desde luego que confusión y mensajes contradictorios se cruzan a medida que el brote sigue descontrolado en África. Los vuelos comerciales y de carga con Liberia, Sierra Leona, Guinea y Nigeria no están restringidos según las recomendaciones de la OMS. Pero la organización le ha añadido ya una apostilla: “Excepto casos positivos o que hayan tenido contacto con infectados”. La Organización de las Naciones Unidas reitera que “actualmente no está recomendado que se hagan revisiones a los pasajeros a la llegada de viajes a países que no comparten fronteras” con aquéllos estados. Sin embargo, los aeropuertos españoles anunciaron disponer de “un protocolo específico” tras la declaración de alerta internacional por el ébola. Si un viajero se muestra enfermo durante el vuelo sí que habrá aislamiento y revisión del pasaje.

El Centro Europeo de Control y Prevención (EDCD) sí que considera que “personas infectadas por ébola pueden llegar a Europa mediante vuelos directos o indirectos”. Incluso aunque “con probabilidad baja”, advierte de que “enfermos pueden viajar durante la fase de incubación y, por lo tanto, no presentar síntomas en el momento de la llegada o llegar con síntomas porque se desarrollan rápidamente”.

En este sentido, su homólogo estadounidense, el CDC, recomienda en una guía sobre “Ébola y tripulación” que “las personas que han estado expuestos al ébola no deberían viajar en vuelos comerciales hasta que hayan pasado un periodo de control de 21 días”. “Las aerolíneas deben considerar el uso de su autoridad para denegar el embarque a un viajero enfermo si se sospecha de ébola”. Si la tripulación cree que hay un caso posible ya en el aire les piden que “lo mantengan lo más alejado posible del resto de pesonas, que le coloquen una mascarilla y utilizar guantes”.

Entre el 14 y el 16 de agosto, la OMS ha recontado 113 nuevos casos y 84 muertes: 53 en Liberia, 14 en Guinea y 17 en Sierra Leona para un total de 1.229 fallecidos. Los infectados totales en África occidental hasta ahora son 2.240.