Bruselas, 10 may (EFE).- Alrededor de cincuenta empleados de la embajada de España ante la Unión Europea (UE) en Bruselas se concentraron este martes en el recinto diplomático para exigir la actualización de los salarios de acuerdo con el aumento de la inflación y el pago del gasto del transporte entre el domicilio y el lugar de trabajo, como dispone la legislación belga.
Los manifestantes, que forman parte del Personal Laboral del Servicio Exterior (PLEX), portaban pancartas en las que se podían leer expresiones como “Sin ley”, “Sin transporte”, “Abandonados” o “Sin index”, en referencia a la no aplicación de la indexación salarial.
“En Bélgica, en febrero del 2018, se aprobó una ley que hacía que el personal de todas las embajadas, misiones, consulados y demás que están en Bélgica, están protegidos e incorporados en una comisión paritaria, que es la 337, que exige sí o sí a los empleadores, en este caso, a la administración española, concedernos una serie de derechos, entre los que están el transporte y la actualización salarial”, declara a Efe el portavoz de la protesta, Ángel Castillo Perona.
El portavoz subraya que es a partir de 2018 cuando la legislación belga obliga a que se actualice de manera automática el sueldo de los empleados de las embajadas y consulados, pero que desde ese año el PLEX en la representación permanente de España ante la UE solo ha obtenido una actualización salarial, en 2019.
La actualización salarial, sin embargo, debe producirse una vez que el coste de la vida supera un cierto nivel de inflación.
“Cada vez que Bélgica aprueba para nuestra comisión paritaria una actualización del salario, se tendría que aplicar automáticamente”, detalla, y agrega que la administración les debe una actualización salarial del 10,40 % a partir del año 2018, “más los atrasos”.
Es la Comisión Ejecutiva de la Comisión Interministerial de Retribuciones (CECIR), dependiente del Ministerio de Hacienda, la que debe aprobar la subida del sueldo. Castillo Perona asegura que siguen esperando a que ese organismo “se pronuncie y resuelva favorablemente” la petición de los trabajadores.
Avisa de que si la subida salarial se queda en un 2 %, “evidentemente”, continuarán con las protestas, “porque no es -dijo- lo que nos corresponde”.
Indica que la CECIR tiene el expediente del PLEX “encima de su mesa”, pero que no saben “cuándo se va a resolver ni por cuánto se va a resolver ni en qué condición se va a resolver ni si se va a hacer de forma automática a partir de que se resuelva”.
Apunta que en Luxemburgo sí se lleva a cabo la actualización salarial automática del personal laboral.
“No comprendemos mucho la diferencia entre los países, porque allí es de obligado cumplimiento, como es aquí a partir del 2018”, constata.
En la embajada española ante la UE trabajan personas dependientes de hasta ocho ministerios y Castillo Perona reconoce que algunos de los departamentos del Gobierno sí han aprobado el pago del transporte desde el hogar hasta el lugar de trabajo.
“A partir de 2018, todas las instituciones españolas asentadas aquí en Bélgica recibieron una nota de protocolo comunicándoles que tienen que cumplir con esta ley”, expone.
En cuanto a las exigencias de los empleados, precisa que desde octubre las han transmitido “a través de escritos, a través de reuniones”, y que han intentado “pedir reuniones al embajador, a la responsable de Recursos Humanos”.
En principio, las concentraciones del Personal Laboral del Servicio Exterior de la embajada española ante la UE tendrán lugar dos veces por semana.
En la sede diplomática ante el club comunitario trabajan alrededor de 90 personas que forman parte del PLEX, indica Castillo Perona.
La de Bélgica no es la única protesta laboral de trabajadores de embajadas españolas, ya que en los últimos meses también ha habido concentraciones en La Haya o Londres.