La Guardia Civil volverá a sufragar los gastos de una expedición de agentes al santuario católico de Lourdes (Francia). A pesar de la polvareda que levantó este viaje de fe a costa del dinero público el año pasado, el Gobierno insiste para esta edición. En una circular de 27 de marzo de este año, firmada por el coronel Jefe del Servicio, se concreta quién conformará esta asistencia y se le otorga el carácter de “comisión de servicio indemnizable”. También se especifica que la motivación de este servicio es “religiosa”. El presupuesto de este año, según otro escrito del subdirector general de Personal, será de 10.851 euros para cuatro días: del 14 al 18 de mayo.
A Lourdes acudirán 15 guardias de diferente graduación. La nota interna especifica que irán “un coronel o teniente coronel, un oficial y un oficial capellán” como Comisión Delegada y les acompañará una Comisión de Servicio a la que asignan a “un oficial, un suboficial y 10 cabos y Guardias Civiles”. En total 15 efectivos que “voluntariamente soliciten su asistencia motivados por el aspecto religioso de la peregrinación”. Este aspecto merece incluso un apunte en la uniformidad de los guardias que representen a España ya que al hecho de que se vistan con “el uniforme para actos de especial relevancia” se le añade que: “Sin pistola”.
Así que los guardias civiles que viajen a Francia podrán “reclamar” dietas por los días que pasen en su incorporación desde sus unidades al punto de partida en Valdemoro (Madrid) por la estancia en Zaragoza y regreso a sus bases además de “2,5 días de manutención y 3 de alojamiento en Francia”.
En la capital aragonesa se compondrá, en la plaza del Pilar, la Agrupación de Peregrinos de la Guardia Civil –entidad diseñada según la orden 14/2015 que describe cómo participará España en la LVII Peregrinación Militar Internacional–. El 15 de mayo se arrancará con una misa en la basílica del Pilar de Zaragoza para luego marchar a Lourdes. El día 18 se dará por disuelta al agrupación.
“¿No hay dinero para chalecos o para otras cosas del servicio pero sí que hay para esto?”, se pregunta Juan Antonio Delgado, secretario de Comunicación de la Asociación Unificada de Guaridas Civiles. Su queja viene motivada porque “al final, aunque los responsables dicen que es muy poco dinero, todo acaba influyendo. Claro que influye”. Delgado insiste en que no tiene sentido este tipo de actos pagados con dinero público “en un estado aconfesional” . Aunque se muestra algo resignado: “Se ha convertido en una cosa hasta habitual”.