Aprender a no callar y a no soportar ninguna clase de violencia contra las mujeres es el mensaje central que el elenco boliviano Kory Warmis transmite en “Kusisita”, una obra de teatro en aimara que ha llegado a distintas comunidades de Bolivia donde se habla ese idioma indígena.
El elenco se trasladó hoy hasta Tiquina, una población cercana al lago Titicaca, compartido por Bolivia y Perú, para presentar “Kusisita”, que significa felicidad en aimara, sobre una balsa que sirvió como escenario.
“Hay muchas mujeres que soportan la violencia y se callan, pero en esta obra mostramos mujeres que no se callan y deciden abandonar esa violencia”, explicó a Efe la directora del elenco Kory Warmis, Erika Andia.
Las diecisiete mujeres que son parte del elenco aprendieron aimara para presentar la obra en comunidades bolivianas donde la mayoría de las mujeres solo hablan esa lengua.
Según Andia, fueron seis meses de arduo trabajo de las actrices para aprender sus líneas en aimara y transmitir al público el mensaje contra la violencia.
Una tela negra fue la escenografía montada en la balsa y las mujeres vistieron las tradicionales polleras o faldas amplias de las aimaras de color blanco para dar vida a los personajes.
La obra, escrita por Andia, cuenta la historia de una niña y su madre que viven en un entorno de violencia familiar, pero que deciden buscar su propia felicidad.
Además, “Kusisita” también retrata la realidad de la trata y tráfico de personas.
“Algunas mujeres, especialmente del área rural, soportan y soportan la violencia, pero tienen que saber que no está bien”, expresó Andia.
Por su parte, una de las actrices, Gumercinda Mamani, contó a Efe que muchas mujeres que ven la obra se ponen a llorar porque se sienten identificadas y que en algunas ocasiones les transmitieron sus historias para salir de ese entorno.
“Me encanta presentar la obra en aimara, así todos empiezan a entender que no debe existir la violencia”, sostuvo Mamani.
Según Martha Álvarez, otra de las actrices, la obra sirve para sanar cicatrices de muchas de las actrices que también sufrieron en carne propia algún tipo de violencia.
Ellas califican a la obra como una especie de terapia que ayuda a más mujeres a romper las cadenas de la violencia y que se den cuenta de que los golpes y los malos tratos no son sinónimo de amor.
La obra ya ha sido presentada en poblaciones del departamento de La Paz como Copacabana y Huacuyo, entre otras.
Andia anunció que el próximo año “Kusisita” también será presentada en un festival internacional de teatro de lenguas originarias en Cusco, Perú.
Entre enero y septiembre de este año se han registrado 85 feminicidios y 18.576 casos de violencia familiar en Bolivia, según datos de la Fiscalía General del Estado.