Unas 300 personas se han manifestado este sábado en Madrid contra las terapias del obispado de Alcalá para “curar” a los homosexuales, que desveló eldiario.es. En el acto, convocado por las asociaciones COGAM y Kifkif, parte de los asistentes se han besado para manifestar su repulsa a los cursos que ofrece la parroquia de Reig Pla.
“Ni una cura ni una muerte más, que nos dejen en paz”, ha dicho la diputada del PSOE en la Asamblea de Madrid Carla Antonelli. Desde la plaza de Pedro Zerolo, que está en pleno centro de la capital y que conmemora al histórico socialista, Antonelli ha criticado que la Conferencia Episcopal “avale esta barbaridad” de “curar a las personas transexuales y homosexuales”. “No estamos enfermas”, ha insistido.
Antonelli ha recordado que estas prácticas están prohibidas en la Comunidad de Madrid y que puede incluir una multa y la posibilidad de retirar las subvenciones públicas. La diputada ha insistido al Gobierno regional y a la Fiscalía que actúen contra estas prácticas contra homosexuales y transexuales.
Por ello, Antonelli ha culpado al obispado de Alcalá de las consecuencias de sus terapias: “Llega un momento en que las personas dicen 'no aguanto más' y se quitan la vida. Todas esas personas que nos dicen que nos tienen que curar son corresponsables y culpables de estos suicidios. Al obispado de Alcalá lo hago corresponsable de todas las muertes de las personas LGTBI”.