Hay quien aún no le conoce, pero Francisco Martínez Mojica es uno de los principales candidatos para obtener un premio Nobel en España. Lleva ya dos años recibiendo llamadas cada vez que se van a entregar los galardones, ya que su nombre siempre aparece en las quinielas para el Nobel de Medicina o el de Química.
Este ilicitano, que mañana cumplirá 54 años, fue el primero en identificar unas secuencias genéticas a las que denominó CRISPR. Durante 10 años, Mojica fue el único investigador interesado en aquellas secuencias, pero aquel hallazgo sería la primera piedra de una técnica que hoy promete salvar millones de vidas y de la que surgen todo tipo de aplicaciones.
Después de varios años de trabajo Mojica se dio cuenta de que las secuencias CRISPR estaban relacionadas con la inmunidad de las bacterias ante el ataque de ciertos virus, un hallazgo que revolucionó a la comunidad científica. Finalmente, en 2012, la investigadora francesa Emmanuelle Charpentier y la estadounidense Jennifer Doudna demostraron que el mecanismo CRISPR se podía utilizar como una herramienta universal para cortar y modificar cualquier genoma.
Gracias a esta técnica se ha devuelto la visión a ratones ciegos y se ha conseguido curar una enfermedad en un embrión humano. Estos logros han hecho que la mayoría de los especialistas en la materia coincidan en que tarde o temprano esta técnica se llevará el Nobel. Sin embargo, no está tan claro que Mojica vaya a estar entre los premiados.
Cada año que se acercan los Nobel pasa lo mismo ¿cansado de marear la perdiz?
La verdad es que un poco sí. Toda esta situación me tiene un poco desbordado. Llevo ya unos meses de locura y se me van acumulando cosas pendientes por hacer y al final acaba generando bastante ansiedad. Pero bueno, al final terminamos sacando tiempo y lo que no podamos terminar en una semana, pues lo terminaremos en un año. Qué le vamos a hacer.
Con tanta presión ¿tiene ganas de que le den ya el Nobel a CRISPR?
Sí, me quitaría un gran peso de encima. Me gustaría que se lo dieran a CRISPR de una vez y se supiera ya a quién se lo van a dar. Pero bueno, si hay que esperar uno, dos o tres años hasta que lo den, pues esperaremos y sea cual sea el resultado va a estar bien.
¿Aunque no se lo dieran a usted?
Pues eso no lo tengo muy claro [risas]. Aunque sí me alegraría, porque quieras que no, cuando uno está trabajando en un campo concreto y hay un reconocimiento de ese nivel, con un premio tan grande, ya de por sí es algo enorme. Sí es cierto que si le toca a uno disfrutarlo, pues bienvenido sea, pero tampoco pasa absolutamente nada si se lo dan a otros.
Fue usted quién dio nombre a esas secuencias, CRISPR ¿no sería raro que no se lleve el Nobel?
Sería un poco raro, pero depende de cómo se mire. ¿Tiene mérito en sí mismo ponerle un nombre a algo? Pues no necesariamente, pero está claro que cuando se le da un nombre a algo y este se acepta es porque la persona que se lo ha dado está implicada y se le reconoce.
También se podría decir que yo estuve durante mucho tiempo en esto, que me interesé por estas cuestiones de las bacterias y dije que esto podría ser un sistema inmunológico, pero que luego fueron otros los que lo demostraron. Dependerá si miran los orígenes de la técnica o se quedan en los que demostraron que era un sistema inmunológico o incluso pueden quedarse con los que vieron cuál era el mecanismo de esta inmunidad. Es muy difícil. Ahora mismo me preguntas quiénes considero que se deberían llevar el premio y no sabría muy bien elegir, pero al menos 10 o 12.
Pero el Nobel solo permite tres galardonados ¿cree que debería cambiarse esto?
Sí, totalmente. Cuando a Alfred Nobel se le ocurrió la genial idea de dar este premio con unas restricciones determinadas la situación era muy distinta a la que hay actualmente. Cada vez es más evidente que resultados y hallazgos tan importantes como este no parten solo de tres personas sino probablemente de 300. Además, creo que Alfred no restringió el premio a tres originalmente, sino a uno. Así que si ya lo cambiaron una vez, no estaría mal que lo cambiaran otra vez y dejaran de restringirse a un número para premiar a las personas que corresponda en cada caso.
Actualmente hay una batalla de patentes por la técnica en concreto ¿cree que ha influido para que no se de el premio este año?
Sí, es posible que haya influido, pero también es cierto que la técnica, aunque su uso está subiendo de forma exponencial, lleva relativamente poco tiempo, con lo que quizás la academia está esperando a ver si se consolida y se mantiene.
Pero la técnica está consolidada
Por supuesto, es algo que muchos tenemos clarísimo y cuando digo muchos quiero decir muchísimos. De no ser así hoy no habría miles de laboratorios en todo el mundo utilizando esta técnica y desplazando a las que se estaban utilizando anteriormente. Además, hoy en día siguen saliendo nuevas aplicaciones y todo esto justifica sobradamente que se le de un premio.
El último Nobel científico de origen español fue Severo Ochoa hace más de medio siglo, si usted lo gana ¿cree que tendrán que pasar otros 50 años para que haya otro español galardonado?
Estoy convencido de que no, pero tiene que haber convicción en España para ello. Nos tenemos que dar cuenta de la calidad de los investigadores que tenemos y debemos hacérselo saber al resto del mundo. Pero esto no solo depende de la difusión que haga uno, sino que también depende, y mucho, del apoyo que den las instituciones españolas. La fuerza no solo parte de la nominación de unas cuantas personas sino también de que la administración refuerce el mensaje. Esperemos que en algún momento España se vuelva a plantear el dar un impulso a la ciencia viendo que hay posibilidades de que investigadores españoles ganen reconocimientos importantes.
Ochoa pasó casi toda su carrera en el extranjero ¿no ha recibido llamadas de universidades y centros de otros países?
Alguna que otra me ha llamado, pero tengo cuestiones familiares que no me permiten trasladarme fuera de España, así que de momento ni me lo planteo. Si cambian mi circunstancias, ya veremos.
Habla de dar un impulso a la ciencia ¿cree que en España no se apoya lo suficiente?
Que no exista un ministerio dedicado a la ciencia dice mucho de la poca importancia que se le está dando y muestra claramente que no es una de las prioridades del Gobierno.
La última encuesta de percepción de la ciencia en España muestra que hay mucha gente que confía en remedios sin base científica ¿cree que nos falta cultura científica?encuesta de percepción de la ciencia
Lo que creo es que hay mucha gente desesperada. A mí me llegan correos de padres preguntando si con la nueva técnica se puede curar a sus hijos, que tienen una esperanza de vida de pocos meses o años y les tengo que decir que no. Cuando la gente está muy desesperada recurre a lo que sea y cuando la ciencia y la medicina no le dan una solución, pues a veces la buscan donde no hay nada. El problema es que cuando uno pone toda su fe en algo que no tienen ningún tipo de fundamento científico las consecuencias pueden ser nefastas.
Debe ser difícil tener que responder a esos padres
Es lo más duro a lo que se pueden enfrentar uno en este campo. Cuando te piden cosas que están muy lejos de tu alcance es tremendamente duro tener que responderles que lo sientes, pero que no puedes ayudarles.