El portavoz del cuarto grupo de la oposición en la Asamblea de Ceuta, Mohamed Ali Caballas, ha exigido este miércoles al Gobierno autonómico que preside Juan Vivas (PP) que dé “explicaciones convincentes” después de haber afirmado que personal de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Ceuta, incluido el propio consejero, Javier Guerrero, se han vacunado contra la COVID-19 pese a no permanecer a los grupos que marca el protocolo de vacunación
“Fuentes del propio Ejecutivo local nos han confirmado que tanto Guerrero como la directora general de Sanidad y Consumo, Rebeca Benarroch, y al menos dos responsables técnicos más de su Consejería han recibido ya la primera dosis de inmunización contra la COVID-19”, ha asegurado el diputado regional.
“La polémica desatada a nivel nacional por la vacunación de políticos como el ex consejero de Murcia, que ya ha dimitido, y otros políticos de distintos partidos exige”, a juicio de Caballas, “que el Gobierno de Ceuta deje claro qué criterios se han seguido y si en algún momento se han vulnerado las pautas establecidas en la Estrategia Nacional”.
El Ejecutivo ceutí no se ha pronunciado sobre el requerimiento del líder de Caballas y ha convocado una comparecencia ante los medios del consejero de Sanidad para este jueves a las 11.30 horas después de que la que tenía pensado ofrecer este miércoles por la tarde fuese suspendida.
La Ciudad Autónoma fue de las primeras regiones en agotar las primera partida que recibió de la vacuna de Pfizer (1.005 dosis) y la semana pasada recepcionó 200 de la de Moderna. El lunes se hizo cargo de otras 975 de la primera para “concluir el proceso de inmunización de las personas que fueron vacunadas en la fase inicial de la Estrategia Nacional de Vacunación”.
El protocolo sanitario establece que en la primera etapa de vacunación, cuando se dispone de un número “muy limitado” de dosis, los colectivos que deben recibirlas son cuatro: residentes y personal sanitario y sociosanitario en residencias de personas mayores y con discapacidad; personal sanitario de primera línea; otro personal sanitario y sociosanitario; y personas con discapacidad que requieren intensas medidas de apoyo para desarrollar su vida (grandes dependientes no institucionalizados). Dentro del personal sanitario de primera línea se incluye “el de Salud Pública que trabaja en la gestión directa de la pandemia”, siempre “en función de su riesgo de exposición”.
“Todos sabemos cuáles son los grupos de vacunación y los cargos públicos debemos ser ejemplares”, ha expresado este miércoles el ministro de Sanidad, Salvador Illa, en una rueda de prensa en la que ha apelado a la responsabilidad común. “Todos los que queramos vamos a estar vacunados, pero no todos mañana, y son los expertos científicos de las diferentes comunidades han decidido por qué colectivos hay que proceder”, ha añadido.