El papa Francisco sigue dando sorpresas, incluso en mitad de sus 'vacaciones' romanas. Por primera vez en los dos milenios de historia de la Iglesia católica, un laico dirigirá un Dicasterio (el equivalente a un Ministerio) de la Santa Sede, históricamente reservado a cardenales. El elegido no es otro que el periodista italiano Paolo Ruffini, quien dirigirá el Dicasterio para la Comunicación, responsable de toda la información que entra y sale en los muros vaticanos.
El nombramiento de Ruffini viene después del cese de Eduardo Viganò, despedido de su puesto después de que ocultara parte de una carta de Benedicto XVI en la que el Papa emérito se negaba a prologar un libro sobre la teología de Francisco porque entre los autores se encontraban algunos teólogos, a su parecer, díscolos, y apenas diez días después de que el Papa decidiera ascender la categoría de este departamento, que pasó de ser una Secretaría (dependiente de Secretaría de Estado), a tener rango de Ministerio.
Paolo Ruffini será el primer laico en formar parte del Consejo de Ministros vaticano. Este veterano periodista, nacido en Palermo en 1956, lleva cuatro décadas trabajando en prensa, radio y televisión. Su currículo muestra una amplia experiencia en medios, desde Il Mattino de Nápoles a Il Messaggero, pasando por Radio Rai, el Canal del Parlamento, RAdio 1, Inblu Radio y, en televisión, Rai3 y La 7. Desde 2014 dirigía Tv2000, la televisión de la Conferencia Episcopal italiana.
Casado desde 1986, Ruffini es un reconocido experto en Ética de las Comunicaciones y un estudioso sobre el papel del cristianismo en la información. A partir de ahora, toda la comunicación vaticana pasará por sus manos, desde la gestión directa de los medios de comunicación (Radio Vaticana, L'Osservatore o Vatican News), a la elaboración de la política comunicativa de la Santa Sede.