Lima, 21 ago (EFE).- Hasta 65 nuevas plantas de oxígeno se instalarán en los próximos meses en hospitales de Perú para paliar su creciente demanda, fruto de los miles de contagiados diarios de COVID-19, que en muchos casos se ven obligados a afrontar la enfermedad en sus propias casas por falta de camas en los hospitales.
Estos surtidores de oxígeno aportarán 43 toneladas al día, lo que ayudará a reducir el déficit existente durante la pandemia, según anunció este viernes la ministra de Salud, Pilar Mazzetti.
La demanda actual asciende a 320 toneladas de oxígeno diarias, un 40 % más de lo requerido por los usuarios a inicios de junio, cuando se demandaban 230 toneladas diarias.
CONTINÚAN LARGAS FILAS
Pese a que el Gobierno declaró hace más de dos meses al oxígeno como un bien de interés nacional y estratégico para evitar la especulación de precios, se siguen registrando a diario largas filas de personas cargadas con cilindros de oxígeno de hasta 10 metros cúbicos en busca de un lugar donde recargarlo.
“Hemos 'mapeado' la necesidad de oxígeno en todo el país para distribuir de forma ecuánime los recursos”, sostuvo Mazzetti, cuyo Ministerio distribuirá las 65 plantas previstas por distintos centros médicos sin importar la administración que los gestiona.
Mazzetti señaló que la única forma de suplir la demanda existente es uniendo esfuerzos. “El estado, la empresa privada, la academia y nuestra población deben participar”, indicó la titular de la cartera de Salud durante la partida de un camión que lleva a Arequipa una planta de oxígeno donada por la plataforma Respira Perú.
PREOCUPACIÓN POR AREQUIPA
Esa planta, que tiene una capacidad de rellenar hasta 124 tanques de oxígeno de 60 metros cúbicos al, será instalada en el Hospital Carlos Seguín Escobedo, del Seguro Social de Salud (EsSalud), pues Arequipa, en el sur del país, se ha vuelto desde el último mes en el nuevo epicentro de la pandemia en Perú.
“Arequipa es una de las regiones más golpeadas por el COVID-19, pero gracias a esta planta de oxígeno se podrá mitigar sus efectos”, señaló Mazzetti.
El objetivo de la plataforma Respira Perú, un iniciativa conjunta de la Conferencia Episcopal Peruana (CEP), la Universidad San Ignacio de Loyola (USIL) y la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), busca repetir la misma experiencia de ayuda a otras ciudades del país afectadas por la pandemia.
“Los esfuerzos de esta organización demuestran que se puede unir la capacidad técnica del estado con la capacidad ejecutiva de las instituciones privadas para obtener resultados inmediatos”, apuntó la ministra.
MÁS PLANTAS EN CAMINO
El presidente de la SNI, Ricardo Márquez, anunció que a esta primera planta se sumarán otras tres procedentes de Estados Unidos que llegarán en los próximos días, al igual que un nuevo lote de ventiladores mecánicos de uso temporal que forman parte del aporte de la sociedad a la lucha contra la pandemia.
“Ahora tenemos la responsabilidad de dar esperanza de vida a miles de peruanos que están atravesando duros momentos por efectos del COVID-19”, agregó Márquez.
HUELGA EN CIERNES
En medio de este panorama, que tiene a Perú como el sexto país del mundo con más casos confirmados de COVID-19 al acumular más de 561.000 contagios y más de 27.000 muertes, la Federación Médica tiene convocada una huelga de 48 horas la próxima semana para reclamar más inversión y mejor trato. Algunos médicos llevan tres meses sin cobrar.
Aunque han garantizado que la atención a los pacientes no se verá mermada por la protesta, a este paro se sumaron este viernes otros colectivos de la salud como odontólogos, obstetras, farmacéuticos, técnicos y biólogos, entre otras especialidades.
Al menos 125 médicos han fallecido desde el inicio de la pandemia, que también ha golpeado a otros grupos de la primera línea de la pandemia como policías, militares y periodistas.