La Comunidad de Madrid ha informado al equipo de trabajadoras sociales de los juzgados específicos de Violencia sobre la Mujer de la capital (11 en total) de que tendrán que hacerse cargo de los casos que, a partir de ahora, correspondan a la sede nº 2. ¿El motivo? La trabajadora de ese juzgado se jubila y la Consejería de Justicia, de momento, no asigna ninguna profesional que la reemplace. La dinámica de ajustes hace que se aproveche la salida de esta trabajadora para ahorrar el coste del puesto.
El lunes pasado llegó a la sede judicial una carta que rezaba: “La plantilla de trabajadoras sociales deberá prestar apoyo a las causas que necesiten la intervención de un trabajador social en dicho Juzgado”. Con esta frase, la directora general, Carmen Díaz Bustamante, quiere decir que el resto de profesionales deberá repartirse el volumen de trabajo (evaluaciones de los casos, entrevistas con víctimas o hijos e incluso acusados…) que entre en la sede.
En la carta, a la que ha tenido acceso eldiario.es, la directora general recuerda que “será preciso reorganizar el trabajo (…) al objeto de que la parte social de los informes psicosociales quede cubierta en todos los Juzgados de Violencia sobre la Mujer”. Ese lunes también llegó un escrito de la Consejería a todas las trabajadoras sociales restantes para que lo firmaran y darse así por enteradas de la nueva situación. El miércoles, se han reunido con el secretario judicial del juzgado Nº 2 para comenzar la nueva coordinación.
Los trabajadores de estos juzgados comentan que las jubilaciones “no son algo sobrevenido, una baja de un día para otro” como para no poder tener previsto la salida de la trabajadora social y, por lo tanto, su sustituta. Aún así, la directora Díaz Bustamante añade al final de su misiva que hará lo que pueda para “cubrir la vacante”. Existe el temor de que se convierta en un precedente para situaciones similares.
Díaz Bustamante agradece “el esfuerzo que va a suponer esta nueva situación” provocada por los cálculos presupuestarios que determinan el ahorro en el capítulo de personal.