“Nosotros seguiremos nuestra vida en el Valle, y el curso académico con toda tranquilidad y normalidad, sabiendo que Dios y nuestra Madre celestial velan por todos nosotros”. El prior del Valle de los Caídos, Santiago Cantera, ha pedido “calma y serenidad” a los monjes de Cuelgamuros ante su expulsión del complejo tras la aprobación de la Ley de Memoria Democrática, en una carta escrita a su comunidad a la que ha tenido acceso elDiario.es. En la misma, el religioso confirma que venderán cara su salida, augurando un proceso judicial que puede durar “meses, incluso años”, y para el que cuentan, junto con su propio equipo jurídico (los mismos abogados que los representaron en la causa por la exhumación de Franco), con la inestimable ayuda de Vox, que ya ha anunciado que llevará la ley al Constitucional.
“Es sabido ya que al menos un partido político interpondrá además recurso de inconstitucionalidad” explica Cantera a los monjes, sin citar expresamente al partido de ultraderecha. En su misiva, el prior reconoce que “las noticias que aparecen en los medios de comunicación acerca de la Ley de Memoria Democrática y el Valle pueden resultar muy inquietantes”, y arremete contra “la manera y con la inquina con que algunos de esos medios lo ofrecen”.
Recursos para “demorar el procedimiento”
Tras su aprobación en el Consejo de Ministros, apunta el prior del Valle, es probable que el anteproyecto de Ley “comience sus trámites en el Congreso de los Diputados, donde todo su debate puede durar meses o incluso prolongarse un año”. “Es probable que quieran agilizar su aprobación”, advierte Cantera, añade que también “habrá recursos y factores que pueden demorar el procedimiento”.
“Aunque la extinción de la Fundación de la Santa Cruz del Valle de los Caídos que prevé el anteproyecto de ley no es un dato bueno, el texto del anteproyecto no dice nada de la desaparición o expulsión de nuestra comunidad ni de la Escolanía”, insiste el fraile, quien apunta que, “una vez que la ley quedase aprobada por las Cortes, habría de regularse el nuevo régimen jurídico del Valle por un real decreto que, en caso de ser francamente negativo para nosotros, podría recurrirse y ello supondría otra prolongación en el tiempo”.
Pese a todo, el prior del Valle recuerda que la presencia de los benedictinos en el complejo no depende “única ni exclusivamente” de la existencia de la Fundación, sino que tiene “otros fundamentos de peso” que “no se pueden anular sin más”. Entre ellos, su tarea de custodia de la basílica. Como ya informamos, el Gobierno tiene la intención de negociar con la Iglesia católica un nuevo estatuto jurídico del templo, que pasaría a depender directamente del Arzobispado de Madrid y cuya gestión podría quedar en manos de la Comunidad de Sant'Egidio. “Guardad la calma y confiad en Dios”, concluye la carta de Cantera.
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