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El Gobierno devuelve a las madres solas la semana que les quitó el nuevo permiso de paternidad en caso de parto múltiple

El Gobierno ha recuperado la semana que el nuevo decreto de permisos de paternidad les recortó a las familias monoparentales en casos de parto múltiple y de discapacidad. Antes de la entrada en vigor de esta norma el pasado 1 de abril, a las 16 semanas del permiso de maternidad se les sumaba un extra de 2 en estas situaciones, pero la nueva redacción estableció que ahora se deben repartir entre “cada uno de los progenitores”. La Secretaría de Estado de Seguridad Social, dependiente del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, ha dictado un criterio al que ha tenido acceso eldiario.es para volver a la interpretación original en caso de las madres y padres que cuidan a sus hijos sin pareja.

Y es que hasta ahora el texto provocaba, en la práctica, que los menores nacidos en estas familias (la mayoría encabezadas por mujeres) se quedaran sin una semana de cuidado. Algo que, señala el criterio, “no ha sido el propósito del legislador”, por lo que “una lectura más detenida del precepto” permite concluir la nueva interpretación porque el reparto “es evidente que no puede operar cuando solo existe un progenitor”. En consecuencia, prosigue, “cuando la situación da lugar a la suspensión de un único contrato de trabajo, ha de tener la duración adicional de dos semanas que prevé el precepto, sin que sea de aplicación el inciso que introduce el reparto entre los dos progenitores”.

El cambio ha tenido lugar tras la reclamación efectuada por una mujer de Puigcerdà (Girona) que dio a luz a mellizos el pasado 4 de abril. Cristina presentó una queja ante la Seguridad Social porque tras el parto la institución solo le concedió 17 semanas (las 16 habituales más 1 extra). En realidad ella tiene cubiertas por convenio colectivo no solo las 2 semanas por parto múltiple, sino las otras 8 que corresponderían al otro progenitor. Es decir, en su trabajo le sufragan el permiso de maternidad y el de paternidad aunque ella sea la única progenitora. Sin embargo, quiso poner la queja para motivar un cambio en la norma. 

La Secretaría de Estado de Seguridad Social, de hecho, reconoció que la reclamación descubría una laguna en el texto y anunció que sería corregida. Fuentes del organismo señalan que el criterio se aplicará con carácter retroactivo y beneficiará a las familias monomarentales que hayan tenido hijos desde el pasado 8 de marzo, un día después de la publicación del nuevo decreto de permisos en el Boletín Oficial del Estado (BOE), y no solo a las que los tengan a partir de ahora.

La reclamación fue apoyada por la Federación de Asociaciones de Madres Solteras (FAMS), que coordina la Red Estatal de Entidades de Familias Monoparentales y que denunció públicamente esta discriminación. Su presidenta, Carmen Flores, aplaude la reforma y celebra que el Gobierno “haya recogido el guante porque es una cuestión de justicia social y de no retroceder en derechos”.

Flexibilizar los permisos

La norma que equipara los permisos de paternidad y maternidad, aprobada el pasado 1 de marzo por el Consejo de Ministros, pretende reforzar la igualdad entre hombres y mujeres con el objetivo de que no solo sean ellas las que asuman la carga de los cuidados. Así, desde abril los padres (o segundos progenitores) tienen ocho semanas de permiso, que se irán ampliando progresivamente hasta las 16 en 2021 para dar lugar a permisos por paternidad y maternidad iguales e intransferibles. Este enfoque, que permea toda la reforma, es el que dio lugar a que las dos semanas de ampliación por partos múltiples se repartan entre dos progenitores.

Para la FAMS la situación ilustra y simboliza que “no solo no nos contemplan a la hora de legislar, sino que se olvidan de nuestra realidad y pueden llegar a perjudicarnos”, señala Flores. En España, según el Instituto Nacional de Estadística (INE) hay un 1,5 millones de hogares monoparentales sostenidos por mujeres y 340.000, por hombres, que también se ven afectados por esta reforma porque se pueden coger el permiso de maternidad al ser únicos progenitores. Por ello, estas familias batallan por la aprobación de una Ley de Familias Monoparentales que “recoja todas las situaciones que permanecen invisibles y nos tenga en cuenta”.

La FAMS lleva años reclamando que su situación sea tenida en cuenta a la hora de diseñar los permisos por maternidad y paternidad y han presentado sus propuestas en varias ocasiones a los partidos políticos. En la práctica, sus hijos disfrutan de menos semanas de cuidado en los hogares que los menores de familias biparentales porque la ley otorga 16 semanas por permiso de maternidad y 8 por permiso de paternidad. Por ello, piden que exista la posibilidad de que los progenitores que críen solos a sus hijos puedan acumular las semanas de ambos permisos o puedan elegir a otra persona de su familia o de su entorno cercano para que disfrute del otro.

Esta misma reflexión subyace al proyecto de investigación La revisión de la protección de las familias monoparentales por parte de la Seguridad Social, coordinado por la profesora de Derecho del Trabajo en la Universidad de Barcelona (UB), Núria Pumar. El estudio llama a lo que describe la FAMS “discriminación por indiferenciación” puesto que “reciben un tratamiento igual ante necesidades distintas de la clásica familia conformada por ambos progenitores”.

Aunque la investigación señala como elemento fundamental la promoción del reparto equilibrado de cuidado entre hombres y mujeres –tal y como reconoce el reciente decreto de permisos de paternidad– y apunta a que estos son titulares de los derechos de conciliación, sostiene que “el régimen español” es “poco flexible” al no admitir la posibilidad de que sean otras personas las que, en casos de monoparentalidad, disfruten del segundo permiso. Así, alude a que la situación actual es “discriminatoria” si “atendemos al bien jurídico esencial presente en estos permisos como es el cuidado de hijos recién nacidos”.