El Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha denunciado hoy la escasez de recursos y de personal para el seguimiento y atención de las mujeres maltratadas, y ha pedido más formación de los agentes en esta materia y un equipo multidisciplinar para la valoración del riesgo de las víctimas.
Así lo han manifestado a Efe fuentes del sindicato después de conocer la instrucción del Ministerio del Interior, remitida a las fuerzas de seguridad, que recoge el nuevo protocolo para la valoración del nivel de riesgo de violencia de género y de gestión de la seguridad de las víctimas.
Reconoce el sindicato que este protocolo se encuentra en “una línea de mejora y perfeccionamiento” del sistema de valoración, el conocido como VioGén, por lo que no critica las novedades que han sido introducidas, aunque sí la aplicación de la instrucción.
En este sentido, el SUP recuerda que la valoración del riesgo de la víctima (existen cinco niveles: no apreciado, bajo, medio, alto y extremo) recae principalmente en los agentes destinados en las Unidades Familia y Mujer (UFAM), policías “con mayor o menor formación en materia de violencia de género”.
Pero “la falta de recursos y la escasez de personal” lleva al sindicato mayoritario de la Policía Nacional a denunciar la existencia de “graves carencias”.
Y, entre ellas, asegura que la asistencia en esas unidades, las UFAM, no es de 24 horas, por lo que en horario nocturno, en festivos o en fines de semana las víctimas son derivadas a las oficinas de atención al ciudadano y son atendidas por personal no especializado.
Denuncia asimismo que los funcionarios encargados del seguimiento y protección de las víctimas tienen asignados un “excesivo” número de casos e, incluso, se llega a quintuplicar la cifra aconsejada, “sin medios materiales en la mayoría de las ocasiones”.
“Una fría herramienta informática”
Va más lejos el SUP y dice que la Valoración de Riesgo Policial (VPR) y las posteriores evaluaciones de seguimiento (VPER) del sistema VioGén no dejan de ser “una fría herramienta informática” que asigna los niveles de riesgo en función de la respuesta a una batería de preguntas que debe de cumplimentar el agente de turno según las respuestas de la víctima, testigos, victimario u otros.
Es muy importante para ello la sensibilidad y profesionalidad del policía que realiza la valoración, pero el SUP considera de suma importancia que se cuente con la formación necesaria.
Por eso, propone que sea un equipo multidisciplinar formado por profesionales de diversos ámbitos el que complemente la valoración a fin de que el VioGén deje de ser una mera y fría herramienta informática “de la que dependa la vida o la muerte de una mujer y, en muchos casos, de los dependientes con los que convive”.
Ahora, según el SUP, debe darse un paso adelante en la atención a las víctimas, por lo que propone, en coincidencia con la puesta en marcha del nuevo protocolo, la creación de un centro en el que confluyan todos los operadores relacionados con la atención a las víctimas, como trabajadores sociales, psicólogos, abogados, policías, etc.
El SUP aboga, por tanto, por un servicio integral y transversal y aprovecha para demandar “un seguimiento pautado al victimario”, que en su opinión, “se ha obviado por completo hasta ahora”.