Saltó la alarma cuando la principal estrella de la selección española de baloncesto, Pau Gasol, puso en duda su participación en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro debido a la amenaza que supone el virus del Zika. Pero la preocupación de este deportista solo es la parte más visible de un debate que se ha gestado a la sombra de las grandes instituciones internacionales y que pone en tela de juicio la idoneidad de celebrar unos juegos en medio de una alerta sanitaria global.
“Lo que he hecho es empezar un proceso de debate, en el que me gustaría que se hablara de las realidades que el virus del Zika está provocando y de sus consecuencias, y de lo que podría ser a nivel global si se extendiera debido a unos Juegos Olímpicos”, aseguró Gasol a Europa Press.
El baloncestista español acompañó sus declaraciones con un artículo en El País en el que desgrana sus preocupaciones ante “el poco eco que esta epidemia está recibiendo en los medios de comunicación y en el debate público”. Gasol se apoya en una carta abierta firmada por más de 180 científicos y en la que se pide el aplazamiento o traslado de los juegos en nombre de la salud pública.
Los casos de Zika han aumentado en Río de Janeiro
Los firmantes de la carta aseguran que existen motivos para la preocupación, ya que aunque el riesgo para un individuo es bajo, actualmente el gobierno de Brasil ha informado de 120.000 casos probables Zika y 1.300 casos confirmados de microcefalia, mientras que otros 3.300 están siendo investigados.
Además, la ciudad de Río de Janeiro está especialmente afectada, ya que tiene el segundo mayor número de casos probables Zika del país y la cuarta mayor tasa de incidencia. Los científicos informan también de que “los datos oficiales muestran que la tasa de enfermedad era tres veces mayor a principios de 2016 que a principios de 2015, incluyendo un aumento sorprendente en la zona del Parque Olímpico”.
Sin embargo, la respuesta de la OMS no se ha hecho esperar y en un comunicado ha asegurado que “la cancelación o modificación de la ubicación de los Juegos no alterará significativamente la propagación internacional del virus de Zika”. Según la evaluación de riesgos hecha por la organización, el virus está extendido por más de 60 países, con lo que la presencia en Brasil de aproximadamente 500.000 extranjeros más con motivo de los juegos no agravaría significativamente el peligro internacional de infección.
En respuesta al comunicado de la OMS, los científicos han asegurado que “no es cierto que haya 60 países que tengan la nueva y más peligrosa cepa del virus, que es la que está causando la microcefalia y daño cerebral en los niños en Brasil”. Los científicos reconocen que, aunque los viajeros habituales que pasan por Brasil ya han exportado esta cepa viral, “los Juegos Olímpicos son diferentes porque llegan personas procedentes de todos los países del mundo y pueden propagar la infección con una eficiencia insuperable”.
Por último, los firmantes de la carta insisten en que “la evaluación del riesgo hecha por la OMS carece de rigurosidad” y señalan que la organización sanitaria no tiene la neutralidad necesaria, ya que funciona como consultora del Comité Olímpico Internacional desde hace décadas. “Es decepcionante que la OMS haya rechazado crear un grupo independiente que evalúe las pruebas e informe con transparencia sobre los riesgos para la salud a nivel mundial de los viajes a los Juegos Olímpicos”.
Efectos del virus y recomendaciones
Aunque en la mayoría de personas el virus del Zika no tiene mayor incidencia que fiebres o vómitos, las últimas evidencias indican que es de especial riesgo para la mujeres embarazadas, en las que puede causar problemas durante la gestación. En particular, señalan los firmantes de la carta, “la cepa viral brasileña causa microcefalia y, probablemente, síndrome de Guillain-Barré”, pero también alertan de que “es biológicamente plausible que haya otras lesiones neurológicas aún sin descubrir”.
“Ha sido ampliamente aceptado que se pueden producir anomalías fetales graves cuando el virus lo contraen mujeres embarazadas” y “las consecuencias para el desarrollo neurológico a largo plazo de estos niños es probable que sean importantes”, explica a eldiario.es Joe Brierley, uno de los firmantes de la carta y actual presidente de la Sociedad Europea de Pediatría y Cuidados Intensivos Neonatales.
Por este motivo la OMS aconseja a las mujeres embarazadas que no viajen a zonas con transmisión activa del virus de Zika, lo que incluye Río de Janeiro. Además, las parejas sexuales de mujeres embarazadas que vuelvan de zonas en las que el virus esté activo deberían adoptar prácticas sexuales más seguras o “abstenerse de mantener relaciones sexuales mientras dure el embarazo”.
Además de la OMS, otros organismos como el Centro de Control de Enfermedades de EEUU o el Centro Europeo de Control y Prevención de Enfermedades tampoco consideran necesario un aplazamiento o modificación de los juegos.
En España, el subdirector general de Sanidad Exterior, Fernando Carreras, ha asegurado que “no hay nada que justifique el que se tomen medidas adicionales más allá de las que se han adoptado”, que considera “suficientes y necesarias”. Carreras ha insistido en que los españoles pueden acudir “con toda tranquilidad” a Brasil, donde el riesgo de transmisión del virus es “muy bajo”.