Bose te advirtió de que te espiaría con la 'app' de sus auriculares

Kyle Zak, un cliente de la compañía de auriculares y altavoces Bose demandó el martes a la multinacional ante un tribunal de Chicago. Su denuncia se basa en que la aplicación oficial que sirve para conectar varios modelos de auriculares inalámbricos al smartphone viola la privacidad de todos y cada uno de los clientes de la multinacional en el mundo.

Zak y sus abogados sostienen que Bose Corporation espía a sus usuarios a través de la Bose Connect App, que se puede encontrar en la Google Play y en la tienda oficial de Apple. Está convencido de que esa información recopilada luego se vende a terceras partes y otras empresas. Zak se dio cuenta de todo esto leyendo los términos y condiciones de la aplicación.

Nosotros también hemos querido hacer la prueba y por eso nos hemos descargado la app. Al iniciarla, nos pide permiso para usar tres características de nuestro teléfono: el Bluetooth (que ha de estar encendido durante todo el tiempo, ya que así es como se comunican los auriculares con el móvil), el GPS y la ubicación. La Bose Connect App no es indispensable para escuchar música. Con ella, el usuario puede seleccionar qué canción quiere escuchar, ir adelante, hacia atrás o hacer listas de reproducción; así que no entendemos muy bien para qué quiere Bose conocer nuestra ubicación ni a qué sitios vamos con los cascos puestos.

Aunque no tenemos ninguno de los modelos de auriculares que aparecen en la demanda de Zak, sí que es posible consultar la Política de Privacidad y los Términos y Condiciones de la aplicación. Solo con utilizar la app, el usuario ya está aceptando todas y cada una de las cláusulas que aparecen en los documentos.

Saca el máximo partido gracias a tu privacidad

“La app no recoge ninguna información que Bose o nuestros proveedores de servicio puedan usar para identificarte personalmente”, comienza la compañía en su Política de Privacidad. Pero apenas una línea después, explica: “La app recopila automáticamente cierta información del teléfono móvil, tablet o de los otros dispositivos que uses para acceder a la app”. Lo que la compañía no especifica es qué información es esa.

“Cuando utilices la app, nosotros o nuestros proveedores de servicio pueden recibir y grabar, automáticamente, cierta información de tu teléfono móvil”. Entre estos datos, Bose incluye lo relacionado al hardware y al software del teléfono (como la versión de Android o de iOS), la hora y la fecha en la que se usa la app, si se actualiza y cuándo y “alguna otra información” que, una vez más, la empresa no especifica.

“Bose usa la información que recopila ”para que saques el máximo partido de los productos de sonido de Bose“. La compañía justifica el espionaje a sus usuarios para así ”aprender más sobre cómo nuestros clientes usan la app y los dispositivos conectados, para mejorar la app e intensificar las experiencias de los consumidores“. Como Zak asegura en la demanda, Bose Corporation comparte toda esta información ”con terceras partes“. Además, ”otras terceras partes recopilan datos directamente a través de la app“.

Las terceras partes tienen truco

Estas terceras partes puede recopilar esa información de la app o del teléfono del usuario. Bose incluye en esa lista empresas como Crashlytics (especializada en descubrir bugs) y Segment. Según la compañía, esta última “nos permite controlar mejor los datos que van directamente desde la app a los proveedores de análisis de terceras partes”. Segment se define en su web como “una plataforma que recopila, almacena y dirige tus datos a cientos de herramientas de manera fácil y rápida”.

Y es que, según la Política de Privacidad de Bose, su app puede incluir código de otros desarrolladores (las terceras partes) en forma de Software Developer Kits (SDKs) que sirven para “recopilar la información de la app y el dispositivo”. La compañía explica que “el uso de mecanismos de seguimiento online y de datos no personales por estas terceras partes está sujeto a las propias políticas de privacidad de esas terceras partes y no a nuestra política”.

Para terminar, Bose también avisa de que podría utilizar tus datos con terceras partes para “responder a denuncias, citaciones de un tribunal, procesos legales, o para establecer, proteger o ejercitar nuestros derechos legales para defendernos contra denuncias”.

La empresa de componentes de sonido avisa al final del documento que “la información que Bose y las terceras partes recopilan de la app es transferida y procesada en los EEUU”. Como sabe que las leyes en materia de protección de datos son diferentes en Europa, la compañía dice que “usando esta aplicación das tu consentimiento expreso a ese proceso de transferencia de datos”. Y ya sabemos que el Privacy Shield, el acuerdo de transferencia de datos con EEUU que se aprobó en julio del año pasado, nació roto.