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Los pagos móviles se popularizan en España de la mano de iZettle

La compañía sueca iZettle, que comenzó su andadura comercial en 2011, ha presentado en España su nuevo dispositivo ‘Chip & PIN’ para facilitar las transacciones en el segmento empresarial del pequeño comercio. Se trata de un método sencillo y asequible, en comparación con las tasas que conllevan los TPV (‘terminal punto de venta’ proporcionados por los bancos para aceptar dinero de tarjetas).

El dispositivo contiene un lector de tarjetas de débito/crédito, que reconoce MasterCard, American Express y ahora también Visa, con un teclado numérico y un panel en forma de banda. Estos dos últimos elementos están destinados a la introducción del código pin y a mostrar los típicos mensajes que aparecen en un TPV.

El funcionamiento del Chip & PIN de iZettle está ligado a la aplicación móvil de la compañía, disponible en iTunes y en Google Play. El cliente introduce su tarjeta en la ranura del dispositivo y éste la detecta, enviando la señal al smartphone o tableta a través de Bluetooth. Una vez tecleado el código pin se produce la transacción, que pasa por una cuenta de iZettle y después llega a la del comerciante.

La comisión por el proceso es de 2,75%. “Es algo más que la de los bancos”, explica Stefan Lest, productor de Cervezas Artesanales Lest, que ha empezado a utilizar el método de pago recientemente. Sin embargo, asegura que es más cómodo y a lo largo del mes sale más rentable. El uso de los TPV conlleva el pago de una tasa mensual si no se alcanza un volumen de ventas alto, aparte de un porcentaje sobre cada transacción, que pese a ser menor no deja de tener un impacto en las cuentas.

Desde Black Oveja, una mercería especializada en lana e instrumental de costura, señalan que el método de pago es útil cuando algún cliente del extranjero, sobre todo de Estados Unidos, saca su tarjeta American Express, que su TPV no acepta, mientras que iZettle sí lo hace.

Los pequeños comercios que no realizan grandes transacciones o quienes hacen ventas esporádicas son el público objetivo del sistema de iZettle. El nuevo dispositivo cuesta 49 euros y el anterior, ‘Chip & Firma’, que se conecta físicamente a un smartphone o una tableta y obliga al cliente a firmar, tiene un precio de 25 euros. Aunque gracias a un acuerdo de la compañía sueca con el Banco Santander, a los clientes de esta entidad les será reintegrado parte de la cantidad al hacer la primera venta.

En fase de expansión

iZettle se encuentra actualmente en fase de expansión. Por el momento está presente en siete países, como son Suecia, Noruega, Finlandia, Dinamarca, Gran Bretaña, Alemania y España. La idea es seguir centrados en Europa, según afirma Jacob de Geer, cofundador de la compañía, quien destaca que existe mucha competencia actualmente en Estados Unidos, donde están presentes PayPal, Amazon, Google Wallet o Square, como para lanzarse al mercado.

“Hoy en día no estaríamos aportando ningún valor al mercado de Estados Unidos”, indica, haciendo hincapié asimismo en la cuestión de la seguridad, que califica como más simplificada y, por tanto, menos protectora que los estándares en Europa. Sin embargo, no tardará mucho en vérselas iZettle con rivales del otro lado del Atlántico, ya que está previsto que algunos traspasen pronto sus fronteras.

El cofundador de iZettle explica por qué España ha sido escogida para estar entre los siete países europeos en los que la solución está disponible. El primero de tres motivos es la alta penetración de smartphones entre la población y el segundo se basa en el gran uso que se hace de las tarjetas de crédito/débito para hacer pagos.

La tercera razón es la gran cantidad de pequeños negocios que operan en España. La eliminación de las tasas que sí se cobran con los TPV puede funcionar como reclamo para la adopción de los comercios.