El 14 de marzo Samsung presentaba su nuevo buque estrella: el Galaxy IV. Un móvil más potente, con pantalla remozada y con dotes de políglota gracias al traductor simultáneo que incluye el nuevo terminal. Sin embargo, todas estas novedades quedaron en parte eclipsadas por una nueva funcionalidad, la del control visual de la nueva máquina de la factoría surcoreana.
Su predecesor ya atenuaba la luz de la pantalla cuando uno retiraba la vista pero ahora se añaden funciones para hacer scroll solo con los ojosscroll o que el vídeo se detenga cuando alguien levante la mirada y la dirija hacia otra posición. El rumor sobre estas posibilidades buceó durante los días previos a la presentación en foros y mentideros especializados. Más allá de la innovación que supone, esta herramienta sirve para ilustrar como el gremio tecnológico está comenzando a replantearse la relación entre el usuario y el smartphone al igual que en el pasado hizo el manos libres con las llamadas, por ejemplo desde el coche. Un nuevo giro que en los próximos meses alumbrará una nueva generación de dispositivos que empezarán a dar forma a la que muchos auguran como una nueva revolución digital.
Relojes inteligentes
Olvídese de dar cuerda o cambiar la pila. En poco tiempo tocará ocuparse de recargar la batería. Aunque no sea un cuco, es probable que el jilguero de Twitter anide en la muñeca de más de una persona con los relojes inteligentes que parecen estar a la vuelta de la esquina.
Apple podría haber conformado un equipo hasta de cien personas que llevaría meses dedicado al desarrollo del iWacht, que tendría conexión a internet y serviría también como puente entre los diferentes dispositivos de la marca. En su extenso catálogo de patentes, los de Cupertino podrían manejar hasta 80 patentes relacionadas.
Bloomberg ha sido una de las fuentes que se ha atrevido a poner fecha de despegue asegurando que ocurrirá a lo largo del 2013. Recibir mensajes, mandar mails, consultar internet o las cuentas de redes sociales son algunas de las funcionalidades que se le presuponen este invento que también ha despertado el interés de Samsung o su compatriota LG. “Hace mucho tiempo estamos preparando el reloj”, aclaró el vicepresidente de la división de móviles, Lee Young Hee.
Aunque probablemente sus modelos marquen el devenir de este nuevo gadget, no son los primeros en hacerlo. En el pasado Mobile World Congress de Barcelona, la marca italiana i’m Watch aprovechó el tirón de todos estos rumores y captó bastante atención gracias a un diseño muy similar al que práctica Apple. Compatible con Android e iOS, se puede comprar a partir de 349 euros. Sony también lanzó el año pasado uno de estos relojes que se conectan con varios modelos de la gama Xperia facilitando el acceso a varias funciones desde 150 euros. Más curioso resulta Pebble, financiado gracias a una campaña de crowdfunding en Kickstarter, que funciona con tinta electrónica al estilo de los ebooks.
Pero, ¿por qué tanto interés en estos desarrollos que a priori no apuntan a ser un superventas? Unos dicen que los relojes se renuevan como mucho cada dos años y eso puede generar mucha rotación. Otros, por el margen de beneficios, que puede ser hasta del 60%, mucho más superior al de smartphones y tabletas.
Google y sus Glass
Por el momento, Google ve los toros desde la barrera. En Mountain View trabajan a destajo para ultimar su próximo gran accesorio: Glass. Las gafas de realidad aumentada llevan dos años en las cocinas y ya han empezado a ser repartidas a los desarrolladores por un precio que ronda los 1.500 dólares. Sergey Brin que ya ha paseado el invento por las calles de Nueva York equipara mirar el móvil –“un tic nervioso”, explica el cofundador de la compañía- a la costumbre de echarse un cigarrillo. “He podido disfrutar más explorando el mundo”, agrega.
Consultar en tiempo real el trayecto de mapas, grabar vídeo, tomar fotos… Lo que han adelantado dibuja un dispositivo prometedor. En la cuenta que el proyecto tiene en Google+ han asegurado que esta montura 2.0 será compatible con lentes graduadas al tiempo que explicaron que apps como Evernote o la del New Times estarán adaptadas a este nuevo formato.
El mayor problema para su popularización podría ser su precio. Aunque en el cuartel general de los Mountain View afirman que el coste para el gran público sería menor al actual y podría rebajarse hasta los 600 dólares. Eso sí, esto no ocurrirá hasta 2014, tras un nuevo retraso anunciado por Eric Schmidt en una entrevista al la BBC.
De momento, la empresa ya anunció algunas de sus especificaciones técnicas: Pantalla de 25 pulgadas a una distancia de 0.74 centímetros, cámara de cinco megapíxeles y grabación de vídeo HD a 720, memoria interna de 16 Gb y una batería con una vida de una jornada entera sin recargarse. Para utilizarla hará falta un dispositivo con Android Ice Cream Sandwich y solo serán compatibles con Wifi por el momento.
Este gadget -que ha levantado gran expectación en todo el mundo- también se enfrenta al debate de la privacidad. Algunos expertos han alertado de las dudas que surgen en torno a este aparato capaz de tomar fotografías con tan solo un guiño de ojo e, incluso, un bar en Seattle ya ha prohibido la entrada a los clientes que las lleven. En torno a esta polémica, Schmidt ha pedido la configuración de “una nueva etiqueta social” y ha equiparado el uso responsable de Glass al “de las cámaras de teléfonos móvil”.
A finales de 2012, Microsoft registró un portfolio de patentes para poder desarrollar sus propias gafas y, más recientemente, Apple acudió a la USPTO para hacerse con los derechos de varios prototipos que estarían dirigidos al consumo de contenidos directamente en una pantalla a poca distancia del ojo. Baidu, el buscador chino, también ha anunciado que desarrollará sus propias lentes.
Una auténtica ola de próximos lanzamientos que bien podría suponer el inicio de la transformación en el mundo de la moda, que apenas cuenta con un puñado de proyectos que van desde sudaderas que muestran los mensajes del móvil hasta tejidos que controlan las constantes vitales, hasta zapatillas con chips que permiten enviar los datos del ejercicio realizado a una plataforma en internet.
Si uno bucea en las oficinas de patentes se puede encontrar también ideas con un punto más estrafalario como el tatuaje 'vibrador' que recientemente patentó Nokia o la evolución de proyectos como 'Glass', lentillas inteligentes como las que están desarrollando en la Universidad de Gent. Aunque la investigación está en sus primeros pasos, han conseguido montar una mini pantalla LCD que reproduce imágenes monocromas con una calidad aceptable.