Con el Centro Europeo de Física de Partículas (CERN), fundado en 1954, Europa recuperó su preeminencia científica, que ahora otras potencias quisieran arrebatarle proponiendo proyectos inspirados en los éxitos de esta institución, lo que sería una lástima después de tantos esfuerzos desplegados.
Fabiola Gianotti, una investigadora de física de partículas que subió todos los escalones de la ciencia en el CERN y ahora es su directora general, analiza esta situación en una de las pocas entrevistas que concede a los medios.
La científica italiana protagonizó los dos momentos históricos de las últimas décadas en esta casa de la ciencia: el primero fue 2012, cuando anunció al mundo el descubrimiento de una partícula elemental llamada “Boson de Higgs”, intensamente buscada por ser una de las columnas teóricas de la física de partículas.
Ella dirigía en ese entonces el experimento que -con la participación de unos 3.000 investigadores- logró esa hazaña.
El segundo ocurrió en 2014, cuando se convirtió en la primera mujer en dirigir el CERN, que hace posible que más de 17.000 científicos investiguen los componentes fundamentales de la materia que forman todo lo que vemos, y lo que no vemos, en el Universo.
Gianotti (Roma, 1960) dirige con destreza y una energía inagotable -a decir de sus colaboradores- el CERN, donde ya se prepara la etapa posterior al Gran Colisionador de Hadrones (conocido como LHC), que en un horizonte de veinte años será reemplazado por otro capaz de experimentos que requieren de unas condiciones y de niveles de energía inalcanzables en la actualidad.
PREGUNTA: Gracias al trabajo del CERN Europa ha tomado ventaja en la investigación fundamental y ya se debate sobre la etapa posterior al LHC (un anillo subterráneo de 27 kilómetros ubicado en la frontera entre Suiza y Francia), pero China planea construir el suyo propio a un precio menor. ¿Por qué es importante para Europa mantener su liderazgo en el terreno de la física?
RESPUESTA: Es muy importante. El CERN fue fundado en 1954 con dos objetivos principales: devolver a Europa la excelencia científica y utilizar la ciencia para promover la paz. Desde entonces, hemos visto que Europa ha recuperado su preeminencia en la física fundamental y con ello en todas las tecnologías de punta que hubo que desarrollar para cumplir nuestros objetivos científicos.
Mi opinión es que sería una lástima perder este lugar prominente y que debemos seguir siendo uno de los líderes del mundo en física fundamental y tecnología.
Además, no hay que soñar, una máquina como la que se planea, un gran colisionador de partículas, cuesta lo mismo en China, Japón, Estados Unidos o Europa. Por supuesto la infraestructura del túnel puede costar algo menos en ciertos países, pero el costo de la tecnología es el mismo en todos sitios.
P: Si la financiación que requiere el CERN para la construcción del gran acelerador del futuro (alrededor de 9.000 millones de euros en un horizonte de dos décadas) fuese sometida a un referéndum. ¿Qué les diría a los ciudadanos europeos para convencerlos de votar a favor?
R: Hay muchos argumentos y el primero es la importancia de hacer progresar el conocimiento de la humanidad más allá de su impacto en la sociedad porque somos seres inteligentes y el conocimiento, como el arte, son las expresiones más elevadas de nuestra inteligencia.
En segundo lugar, la investigación fundamental ha demostrado ser uno de los motores principales de la innovación porque requiere del desarrollo de tecnología de punta que a la vez ayuda al desarrollo de las industrias.
Y en tercer lugar daría un ejemplo de investigación fundamental que parece inútil y desconectada de la vida diaria, como la mecánica cuántica que estudia el mundo microscópico, pero sin la cual no existiría la electrónica moderna.
Este es un caso de investigación aparentemente inútil pero que ha tenido un impacto absolutamente revolucionario y sin el cual la sociedad moderna no sería lo que es hoy. Y hay que saber que construir un acelerador, claro que cuesta dinero, pero también lleva dinero a las compañía implicadas en los proyectos.
P. Usted acaba de participar en Granada (España) en una reunión de la comunidad europea de física de partícula para establecer las prioridades para los próximos años. ¿Cuáles han sido las conclusiones de la reunión?
R: Lo primero que quisiera decir es que la elección de Granada para esta reunión muestra la visibilidad y la gran contribución que España ha hecho al CERN en términos intelectuales, tecnológicos e industriales, así que es un reconocimiento a la comunidad de investigadores españoles.
Dicho esto, fue muy importante ver el enorme progreso de los últimos años en los que conseguimos más de lo que imaginábamos, por ejemplo en el funcionamiento de los aceleradores del CERN.
Para la etapa post-LHC tenemos dos proyectos: un colisionador linear electrón-positrón y el futuro colisionador circular, un anillo de 100 kilómetros para colisiones protón-protón. Por ahora estamos discutiendo las ventajas de cada uno. Es importante ser muy receptivos porque no sabemos dónde se esconde la nueva física, así que tenemos que mirar con un ángulo de 360 grados.
P: ¿Hay preocupación entre los científicos de Europa por la falta de medios económicos para la investigación?
R: Sí. Después de un periodo de crisis económica la tendencia es a recortar en la investigación porque a veces los políticos tienen la impresión de que no es lo más urgente, pero también vemos una tendencia opuesta en ciertos países, donde la financiación para la investigación ha aumentado porque se considera que es la mejor manera de garantizar el progreso.
P: ¿Nos puede hablar del concepto de “ciencia abierta” que promueve el CERN? ¿Hasta que punto la ciencia que desarrolla el CERN con tanto esfuerzo e inversión de sus países miembros puede ser compartida de forma tan abierta con todos?
R: Para nosotros, la ciencia abierta es un deber, el deber de compartir con la sociedad lo que hemos desarrollado con dinero público, así que hablamos de “open software”, de “open hardware” y publicamos nuestros artículos gratuitamente. Nuestros datos son abiertos a todo el que quiera analizarlos.
Vivimos en un mundo en el que la tecnología se desarrolla a una velocidad excepcional y si no tenemos cuidado esto va a ampliar la brecha entre ricos y pobres, entre los que tienen acceso al conocimiento y los que no, y en este sentido la ciencia abierta da a todos la posibilidad de atrapar el tren.
P: Hicieron falta 60 años al CERN para que una mujer accediera al puesto de directora general ¿Ha mejorado la representación de las mujeres científicas dentro de la institución desde que usted la dirige?
R: La fracción de mujeres científicas en el CERN está en permanente aumento y no solamente desde mi llegada, pero efectivamente intentamos profundizar las medidas en favor de la diversidad en términos de género, de origen, etc.
Se han aplicado medidas para facilitar el acceso de mujeres jóvenes a la investigación y también para asegurarnos de que hombres y mujeres progresan en sus carreras por igual.
Incluso este año las mujeres han avanzado un poco más rápido que los hombres. Cuando yo comencé en el CERN (1994) la proporción de mujeres científicas era como del 5 %, hoy es del 18 %, pero es verdad que todavía hay un camino largo que recorrer.
P: ¿Cuáles son concretamente las medidas para promover la presencia de mujeres en la investigación de la física?
R. En general debemos alentar a las jóvenes a investigar y que no piensen que es un trabajo de hombres. No hay cosas que son para hombres y otras para mujeres, es una cuestión de motivación, de amor por la ciencia y hay oportunidades para todo el mundo.
A nivel local tenemos actividades para atraer a las chicas a la ciencia e internamente existen medidas para facilitar la vida de familia, tenemos una guardería y estamos pensando en construir una segunda.
P: Se acerca el momento de la decisión sobre quién deberá asumir el liderazgo del CERN para el periodo 2021-2025. ¿Estaría usted dispuesta a continuar en el puesto o tiene otros planes de vida?
R: Mi sueño sería volver a la investigación, con mis propias manos, y contribuir a uno de los experimentos del LHC. Yo evolucioné en el experimento ATLAS, así que supongo que regresaría allí, o involucrarme en alguno de los proyectos que tenemos a futuro. Para el futuro del CERN, estoy segura de que hay muy buenos candidatos... veremos es una discusión que acaba de comenzar.
Isabel Saco