Guayaquil (Ecuador), 17 dic (EFE).- El pleno de la Asamblea Nacional (Parlamento) de Ecuador aprobó este martes que una comisión inicie una investigación para determinar si el Gobierno del presidente Daniel Noboa compró o no el software israelí Pegasus para espiar a opositores políticos, periodistas y activistas en el país.
Con 111 votos a favor, el Legislativo dio paso a una propuesta presentada por el asambleísta del conservador Partido Social Cristiano (PSC) Otto Vera, quien solicitó que sea la Comisión de Soberanía, Integración y Seguridad Integral la que lleve a cabo el proceso de fiscalización.
Además, también solicitó que se llame a comparecer al director del Centro de Inteligencia Estratégica (Cies), Michele Sensi.
Según el legislador, en las últimas semanas ha habido “rumores que han levantado algunas alertas” sobre el posible uso en el país de este software, desarrollado por la empresa israelí NSO Group, y vendido sobre todo a Gobiernos para inicialmente combatir el terrorismo y el crimen.
“Yo no creo que esté mal que se pueda utilizar la tecnología para poder ubicar (a criminales) y que sea más fácil el trabajo para las fuerzas del orden, pero aquí lo peligroso es que este software pueda ser utilizado para quebrantar la intimidad y violentar los derechos humanos de quienes trabajan de manera privada y honesta o peor aún para espiar a periodistas, a políticos o a opositores”, dijo Vera en la sesión en la que se discutió su moción.
El presunto uso de Pegasus como arma de espionaje político también ha causado revuelo en otros países. En España, por ejemplo, se inició una investigación por el presunto espionaje a los móviles del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y de varios ministros.
Y recientemente en Colombia el tema volvió a tener relevancia después de que el diario El Tiempo revelara que la adquisición de este programa por parte del Gobierno del expresidente Iván Duque (2018-2022) se realizó con financiamiento estadounidense como parte de su colaboración en la lucha contra el narcotráfico.
Una vez el teléfono móvil está infectado con Pegasus, el programa es capaz de detectar la ubicación de la persona, entrar en sus aplicaciones, grabar conversaciones, acceder a sus correos electrónicos, a su lista de contactos, fotos y videos, leer sus mensajes de texto o accionar a distancia la cámara para tomar imágenes o grabar conversaciones.
El asambleísta Jorge Chamba, de la bancada oficialista de Acción Democrática Nacional (ADN), lamentó que “ciertos sectores” del Parlamento “promuevan chismes y especulaciones sin fundamento”, con el “único objetivo de generar confusión y caos a los esfuerzos que hace el Gobierno en esta lucha contra el crimen organizado”.
Y aseguró que esa clase de prácticas pudieron haberse realizado “en el pasado”. “¿Por qué creamos fantasmas en donde no hay con el único ánimo que llevar la contra al Gobierno?”, cuestionó.
El pleno de la Asamblea también aprobó que se oficie al embajador de Israel en Ecuador, Tzach Sarid, para que, en el marco de sus competencias, “proporcione cualquier información que pueda contribuir al esclarecimiento del presunto uso del software Pegasus dentro del territorio ecuatoriano”.
La Comisión de Soberanía deberá elaborar un informe sobre esta investigación que el pleno deberá conocer dentro del plazo máximo de treinta días.