El presidente ruso, Vladímir Putin, admitió hoy la posibilidad de que su país se desconecte de la red mundial de internet ante eventuales amenazas externas para su seguridad nacional.
“No puedo hablar por nuestros socios o decir qué tienen en mente. Creo que ellos mismos se causarían un gran daño. Se lo pensarán cien veces antes de hacerlo, pero teóricamente es posible. Por eso, nosotros debemos crear tales segmentos que no dependan de nadie”, dijo a la prensa local tras pronunciar el discurso anual sobre el estado de la nación.
Putin destacó que las consecuencias de tal desconexión serían tanto políticas como económicas, además del daño que sufrirían los servicios secretos.
“Ellos allí están sentados. Es su invento y todo lo oyen, ven y leen lo que usted dice. Y recaban información. Y en ese caso (de desconexión) no podrán”, explicó, según la agencia Interfax.
Subrayó que, como “todo es posible”, Rusia debe “desarrollar e invertir dinero”, ya que se trata de “uno de los principales campos de desarrollo en el mundo y en Rusia, en particular”.
“Hay que tenerlo en cuenta, pero nosotros no tenemos intención de desconectarnos por propia iniciativa. Pero si ellos llegan a ese punto, el perjuicio para nosotros sería muy grande, diría incluso que colosal”, dijo.
Por ello, añadió, “cuanta más soberanía, inclusive en el terreno digital, mejor”.