Andy Rubin es de esos que saben que la venganza se sirve mejor fría y que más vale tarde que nunca. El ingeniero que trabajó para Apple y Google, el creador de Android, el desarrollador al que Larry Page y Sergei Brinn condenaron al ostracismo en 2013 apartándole de su androide verde y el desertor que un año más tarde abandonó la multinacional en busca de nuevos retos, ha vuelto.
Ha regresado solo, haciendo ruido y con una buena agenda de contactos en la cartera. Trae un teléfono móvil en el bolsillo y varias ideas que pasan por conectarlo todo a él: la casa, las comunicaciones, los ordenadores y hasta los tostadores. Por eso también ha dado a conocer Essential Home (una suerte de Google Home) con su propio sistema operativo: Ambient OS. Rubin ya piensa en el Internet de las Cosas (IdC) y lo hace presentando un teléfono que no será un superventas pero sí el primer paso para su plan.
De momento, Rubin vuelve reconvertido en CEO de Essential Products, su propia empresa. La startup tiene muy pocos meses de vida pero ya está preparada para vender teléfonos. Sin distribución física de momento, eso sí. Hace apenas dos días, durante la presentación del Essential Phone, Rubin dijo una de esas frases más propias de los héroes de cómic que de un exingeniero de Google: “Hemos tomado decisiones que los grandes fabricantes no pueden tomar”. Dicen que quien no arriesga no gana, una ironía tremenda si tenemos en cuenta que también se puede perderlo todo.
El creador del sistema operativo más usado en el mundo va contra todos. No le importan las, cada vez, menores ventas de Apple. Está convencido de que antes o después el valor de la compañía sucumbirá ante la heterogeneidad del mercado. Tampoco le preocupa Google Pixel, el último fiasco en forma de teléfono inteligente de la multinacional de Brinn y Page. Por eso Rubin entra al trapo con el Essential Phone, un smartphone de 699 euros que será Android, tendrá una pantalla de 5,7 pulgadas y vendrá sin clavija Jack. También será modular, pero a su manera.
Modular y magnético
El exingeniero de Apple que luego creó Android y que finalmente lo vendió a Google dice estar aburrido de los teléfonos tal y como los entendemos. El martes habló de que los Android son “malos” y de que las operadoras, también. El Essential Phone correrá bajo el mismo sistema operativo que él creó, solo que traerá la etiqueta “modular” entre sus características. Un factor que, no lo neguemos, aporta una ventaja competitiva frente a los superventas, ya sean de Apple, Samsung o Huawei.
Para cundir con el ejemplo presentó también una cámara de 360 grados que se engancha a la cámara trasera del teléfono. La gran cruzada de Rubin también va contra los dongles, esa palabra que no tiene traducción exacta al castellano y que iría directamente contra Apple y la enorme gama de conectores, cables y adaptadores que utiliza la empresa con sede en Cupertino.
El Essential llevará un conector magnético que permitirá acoplar diferentes módulos al teléfono, desde accesorios de audio hasta cámaras (como la de 360 grados), baterías o cargadores portátiles. “Literalmente es un USB 3.0, pero inalámbrico”, dijo Rubin durante la presentación.
Essentials Home: conectarlo todo en casa
La crítica dice que no será un gran teléfono y Rubin, durante la presentación, reconoció que no podría competir en ventas con los grandes. Acusó a Apple y Samsung de hacer lo mismo año tras año sin innovar y avisó de que el teléfono vendrá al principio con Google Assistant, aunque después pasará a tener un asistente propio.
Rondando el precio del Essential se encuentran dispositivos de gama alta como el Samsung S8, el iPhone 7 o los Huawei P9 y P10. El teléfono de Rubin todavía no tiene acuerdos con operadoras y parece que solo se podrá pedir a través de su página web. Sus especificaciones serán las siguientes: un procesador Qualcomm 835, dos cámaras de 12 megapíxels, 4GB de RAM y 128 GB de memoria.
Estará construido a base de titanio y cerámica. La pantalla será una cristal Gorilla Glass 5, que teóricamente son más resistentes que las serie 7000 con las que Apple y Samsung aún trabajan.
Donde el exvicepresidentes de Google sí tiene esperanzas puestas es en su dispositivo Essential Home. Es un altavoz parecido al de Google o al Amazon Echo que correrá bajo un sistema operativo propio, el Ambient OS, y con el que Rubin quiere conectar la casa entera. Será código abierto y su intención es que funcione con cada dispositivo conectado al IdC, independientemente del sistema operativo que corran. “Construir puentes es la mejor manera de describir lo que estamos haciendo”, dijo durante la presentación. Que no venga un huracán.