'Al rojo vivo' (11.6%) firma su mejor dato de la temporada y su cuota más alta en tres meses en laSexta
Al rojo vivo logró este jueves su mejor cuota de los últimos tres meses al promediar un 11.6% en la franja matinal de laSexta. Se trata de la cifra más alta para el programa de Antonio García Ferreras desde el 22 de junio, y por consiguiente, también la más competitiva de lo que va de temporada. Además, la entrega reunió a 445.000 espectadores, récord del presente curso.
Las cifras expuestas refuerzan a Al rojo vivo como uno de los formatos que más, y con mayor amplitud, superan diariamente la media del canal. Este jueves, sin ir más lejos, sumó casi cinco puntos más (11.6% vs 6.7%). Y a nivel global la distancia es superior a los cuatro, pues la tertulia política promedia un 9% en sus primeras 14 emisiones del curso y laSexta apenas un 5.9% en septiembre. Números que, como decimos, ponen en valor el rendimiento de Al rojo vivo dentro de los márgenes del canal de Atresmedia, pero no tanto dentro de los suyos propios. Y es que el récord de temporada de este jueves llega en un momento difícil para el programa de Ferreras, que en el último año ha tenido que hacer frente a varios obstáculos.
El primero, su propia naturaleza de programa político. Es decir, de programa que depende mucho de la actualidad para crecer en audiencias. Ahora estamos en una época de cierta 'calma' y 'estabilidad' -si es que se pueden utilizar estos términos para hablar de la actualidad política, ya sea nacional o internacional- que contrasta, por ejemplo, con las últimas semanas de febrero y las primeras de marzo, en las que se sucedieron, casi a la par, el cisma Ayuso-Casado con los primeros compases de la invasión rusa de Ucrania. Dos acontecimientos diferentes, pero ambos noticiables, de los que ARV informó con grandes datos de audiencia. Ahora, sin embargo, no hay temas tan aparentemente candentes -la invasión rusa continúa, pero en otra escala a nivel mediático- y alcanzar las cifras de aquellos días resulta más complicado.
Más aún si hablamos de otros factores contra los que Al rojo vivo tuvo que luchar entonces, y también ahora. Ahí está la renuncia -tras el cambio introducido a principios de la temporada pasada en el sistema de medición de audiencias- a fragmentar su emisión en dos partes para elevar las cifras de su tramo principal, cuyos efectos notó desde el primer día. Y también el desgaste experimentado por el propio formato debido a sus 11 años de emisiones y a la llegada, durante la temporada 20-21, del ya finalizado Las cosas claras (La 1),.
Contratiempos varios que han jugado, en mayor o menor medida, en contra de Al rojo vivo, que la temporada pasada se movió en torno al 12% de share. Este curso anda lejos de esa cifra, y sin embargo, el programa de Antonio García Ferreras sigue rindiendo diariamente por encima de la media de laSexta y haciendo, con la inestimable ayuda de Aruser@s, que la matinal sea la franja más fuerte de la parrilla de laSexta.