'Dúos increíbles' llegó a TVE como una clase magistral de nuestra mejor música
“Oye que me emociona a mí esto” decía desde la sala de espera Sole Giménez al ver cómo sus compañeros actuaban junto a los jóvenes artistas que venían pisando fuerte. Y es que Dúos increíbles emociona. La gran apuesta musical de TVE llegaba este jueves a su prime time en una noche muy complicada ya que se enfrentaba a la Pesadilla en El Paraíso de Telecinco y al terremoto mediático de la ruptura de Tamara Falcó en El Hormiguero.
Pero más allá de las audiencias que marquen mañana (si es que existe un más allá en televisión), el nuevo formato es una de las sorpresas más agradables de los últimos meses en la cadena pública. Lo es porque se convierte en una clase magistral de nuestra música a través de nuestros artistas más consagrados y de los más prometedores.
Ana Belén, Víctor Manuel, Ainhoa Arteta, Antonio Carmona, Diego Torres, Sole Giménez, Miguel Poveda y Carlos Goñi como cantantes 'senior' de prestigio y Antonio José, Agoney, Nia, Paul Alone, Chema Rivas, Marta Soto, Yoly Saa y La Cebolla como cantantes junior, pisan un escenario por el que no solo salen a cantar, sino que también desentrañan el significado de cada tema que interpretan, hablan de autores, de melodías, de empastar voces y del registro de cada uno.
En Dúos increíbles nos olvidamos de la competencia entre los protagonistas, para ser los invitados del concierto soñado para disfrutar en familia. Para ver la emoción de distintas generaciones a la vez, escuchando a dos artistas a los que nunca hubiéramos visto juntos de otra manera.
Es cierto que no es un programa perfecto, que le falta ritmo en las presentaciones y elecciones de unos y otros, que la mecánica aún desconocida hace que estemos algo perdidos frente a los siguientes pasos, y que Juan y Medio no está lo cómodo que se le ve en otros formatos. Pero todo eso se olvida en cuanto pisan el escenario monstruos vocales como Agoney y corazones en la garganta como los de Victor Manuel.
De forma inteligente, la cuenta oficial del programa fue respondiendo a algunas dudas de los espectadores como de qué forma conocían la canción los junior:
Y para mayor sorpresa, ocurren giros como que Agoney no escoja seguir cantando con Victor Manuel y que este tampoco lo haga con el triunfito: “Es un cantante extraordinario, con un registro impresionante pero no me veo cantando en dúo con él varias semanas y cancones, pero también es una limintación mía. Encontrará otra figura que le va a dar más vida que yo”, alegó el veterano.
Lo que demostró que, además, no estamos frente a un casting “buenín” sino profesional, capaz de conocer sus limitaciones y de detectar las necesidades de otros, para seguir ofreciendo espectáculo. Así como tampoco se cortan a la hora de reconocer que no saben quiénes son los jóvenes y los jóvenes no tienen reparo en admitir su admiración ante los veteranos. Y es que no se puede aprender sin referentes.
Dúos increíbles es un programa que educa, entretiene y lo más difícil: emociona. Una pena que llegue en una noche con tanta competencia.