Análisis

'Home Ground', la serie que deberías ver para tomar conciencia del machismo en el fútbol con 'personajes' como Rubiales

El pasado 20 de agosto, la selección española femenina de fútbol hacía historia ganando el Mundial de Australia y Nueva Zelanda. Así podría empezar una serie de televisión que, sin embargo, no se atrevería a escribir el resto de pasajes que se sucedieron en la realidad tras esa gesta histórica.

Pocos guiones serían tan increíbles como para utilizar una situación así y convertirla en el coletazo final de una sociedad que se planta ante las agresiones machistas en su deporte. Sobre todo, porque al proponer que el giro de guion llegara con el beso forzado del Presidente de la Federación a una de las jugadoras, cualquier plataforma tiraría para atrás esa idea. “¿Pero quién se va a creer que puede ocurrir eso en pleno siglo XXI? ¿Y con cámaras delante? No, no, cambiadlo”, sería la probable reacción.

Aún menos veraz sería perfilar a un protagonista capaz de opacar el triunfo histórico de las jugadoras, y que éste fuera su propio Presidente: tocándose sus partes íntimas en pleno palco junto a la Reina de España y la infanta, anunciando que va a dimitir y finalmente hacer todo lo contrario, llevando a sus hijas a la rueda de prensa para criticar al feminismo y anunciando después que su madre está en huelga de hambre en una iglesia por él. ¿Quién se atrevería a imaginar una historia así, y quién se atrevería a comprarla?

Como decía Tom Clancy: “La diferencia entre realidad y ficción es que esta última debe tener sentido”, por lo que muchos guionistas se quejan de que los directivos suelan pedirles credibilidad, ante una realidad que siempre les supera. La del caso Rubiales, por supuesto, es un claro ejemplo.

Sin embargo, existe una serie que ya nos advertía de ese machismo en el fútbol, de las injustas situaciones a las que son sometidas las mujeres en ese deporte y las reacciones tanto de jugadores como de la cúpula. Una serie casi premonitoria (aunque nunca llegará a los extremos de la realidad).

'Home Ground', cuando el machismo en el fútbol no tiene fronteras

En 2014 la productora noruega Vilje Kathrine Hagen recibió el encargo de hacer una ficción sobre un club de fútbol y su entrenador. Aunque al principio no se atrevieron porque les “encantaba Friday Night Lights y no íbamos a hacerlo mejor que eso”, todo cambió cuando decidieron poner como protagonista a una mujer: la primera entrenadora de un equipo de Primera.

Así nacía Home Ground (Heimebane es el título original y se puede ver en Filmin), que contó con futbolistas profesionales (como John Carew) y rodó muchas escenas en la localidad de Ulsteinvik, donde existe un equipo (IL Hødd) que ha estado varias veces en Primera y cuenta con un estadio con capacidad para 4.000 espectadores.

La historia arranca cuando un club de fútbol recién ascendido pierde a su entrenador antes del inicio de la temporada, y Helena Mikkelsen presenta el mejor currículum de los recibidos. Una mujer. La escogen. Tras muchas contradicciones en la cúpula, debates internos y externos que versan sobre el género del mejor entrenador que se ha presentado. Y todo se recrudece al presentarles a los jugadores a su nuevo 'coach'. ¿Cómo les va a dar órdenes una mujer?

A partir de ahí se desatan dos temporadas que reflejan muchos de los aspectos que vivimos en público con el beso a Jenni Hermoso, pero que las deportistas sufren en privado desde que apostaron por jugar en un mundo de hombres.

Al ver Home Ground te explicas muchas de las reacciones del presente, de los aplausos, de los silencios... pero también te hace ponerte en duda a ti mismo al preguntarte cómo nunca nos había extrañado no ver entrenadoras en equipos de Primera. Cómo lo damos tan por hecho. Cómo nunca ha ocurrido una situación así en nuestro país, donde nos jactamos de ser casi los reyes del fútbol. Y si nos atreveríamos a rodar una serie parecida.

Los documentales y series que se están haciendo sobre la Selección femenina

Home Ground es una exquisitez, por la factura, las interpretaciones, el tono nórdico pero sobre todo porque trata una temática poco usual. En estos tiempos en los que se producen series por encima de las posibilidades de consumirlas, encontrar un título que te cuente algo original es un tesoro.

Pero si tras ella aún no se te han saciado las ganas de ahondar en las miserias del fútbol femenino, te recomendamos otros títulos también interesantes:

  • 'Romper el silencio: la lucha de las futbolistas de la Selección' (Movistar Plus+)

Muy oportuno ante la situación actual, el reportaje retrata a Ignacio Quereda, un entrenador mediocre, destructivo, misógino y LGTBIfóbico que permaneció al frente de la Selección Española de fútbol femenino entre 1988 y 2015. A la vez que refleja a un país que, por defecto, obvia a sus mujeres en el espacio público.

La producción muestra la lucha de dos generaciones de futbolistas (apoyadas por la entonces presidenta del fútbol femenino, Teresa Andreu) contra el seleccionador que les ponía motes como “chavalitas” o “pitufinas”, prácticas abusivas e invasivas (como obligarles a dejar las puertas de las habitaciones abiertas al irse a dormir) o recomendaciones de ocultar su orientación sexual lésbica o bisexual.

  • 'Alexia, Labor Omnia Vincit' (Prime Video)

El trabajo todo lo vence, dice la frase en latín que da título a esta docuserie de tres capítulos sobre Alexia Putellas, la jugadora de la Selección y del FC Barcelona, que ha sido dos veces Balón de Oro.

La producción refleja ese trabajo insaciable en su día a día en el campo de fútbol, en familia y en sus compromisos publicitarios. Además, recoge la incertidumbre de lesionarse y perderse la Eurocopa de 2022.

También participan compañeras como Mapi León o Aitana Bonmatí que hablan de ella y recuerdan cómo se las ingeniaban de niñas ellas y sus familias para lograr entrenar.

  • 'Angel City' (HBO Max)

Otra de las defensoras del futbol femenino es Natalie Portman que tiene su porpio club de fútbol. Se llama Angel City, tiene sede en Los Angeles y le han dedicado una docuserie que ilustra la preparación para su primera temporada en la liga profesional de los Estados Unidos.

La oscarizada actriz logra movilizar a compañeras como Eva Longoria y Jennifer Garner, que se convierten en accionistas (y entregadas aficionadas) de un club que nació para cambiar las reglas del juego: liderado por mujeres, con las jugadoras en el centro (reciben comisiones por la venta de entradas de los partidos) y un férreo compromiso con la comunidad LGTBIQA+. Un equipo que demuestra que las cosas se pueden hacer de otra manera.