Ion Aramendi: “Me gustan los nuevos retos como un reality, pero el concurso es donde más a gusto me siento”
“Los concursos, y más los diarios, es un trabajo de picar piedra”, afirma Ion Aramendi, valiéndose de su experiencia propia en televisión. El guipuzcoano lideró El cazador durante dos años, y justo en el momento de su marcha rumbo a Mediaset el formato se encontraba en plena ascendencia. Ahora, el presentador vuelve al género y a la franja de tarde en Telecinco, con Reacción en cadena, la adaptación de un veterano programa estadounidense inédito en España pero que atesora 15 años de éxito en la RAI.
Las palabras de Aramendi van alineadas con las de Christian Gálvez. Ambos debutan este lunes 19 de diciembre en el primer canal del grupo con sendos concursos y ambos expresan similar filosofía en sendas entrevistas con verTele: “Cada vez todo es mucho más rápido y mucho más cortoplacista. También en la televisión”, nos decía, por su lado, el mostoleño. Sobre la combinación que prueba ahora Telecinco, el ahora conductor de Reacción en cadena se muestra confiado, y remite a otras duplicidades similares, como la que durante años ha propuesto Antena 3 con ¡Boom! y Pasapalabra.
Este último será el rival a batir para el nuevo espacio, producido por Bulldog TV, pero Aramendi, en su afán siempre conciliador, pretende restar importancia a la competencia: “Queremos convivir juntos, no queremos que le vaya mal a ninguno”, dice, haciendo valer su amistad con Roberto Leal, del que cuenta que le llamó cuando se hizo pública la fecha y hora de esta nueva aventura del otrora baloncestista, ahora nuevo rostro estrella de Mediaset. A la compañía, donde vivió sus primeros pasos profesionales, volvía en primavera de 2022, y ahora culmina un “año atómico” con este estreno, uno que le permite volver al género donde, recalca, se siente “más a gusto”.
“Me gusta mucho la introspección personal ante retos como un reality, pero el formato del concurso me gusta mucho”, enfatiza Aramendi, que también se deshace en elogios a El cazador, el formato que dejó meses atrás y que ahora es el ejemplo perfecto para este Reacción en cadena, estando en cifras de récord durante las últimas semanas. Ese mismo camino quiere recorrer Aramendi ahora, para lo que espera contar con la paciencia y confianza de Telecinco.
Después de estos capítulos ya grabados, ¿qué destacas de un formato desconocido en España como 'Reacción en cadena'?
Lo que más me mola es que no conocemos mucho en España. Nos puede sonar a jugar a Palabras encadenadas cuando eres niño. Es novedoso, no se ha visto en España y triunfa en muchas partes del mundo. En Italia lleva 15 años y lo ven millones de personas es porque tiene algo. Es tan sencillo de entender que simplemente con verlo vas a querer jugar.
Para mí hay dos cosas claves [en el concurso]. La primera es que tiene cierto punto adictivo: desde que estoy grabando tengo ganas de volver a plató y de probar nuevos equipos... Es adictivo esto de encontrar asociaciones. Y lo segundo es que fíjate si es sencillo de comprender y de jugar que en cuanto das la solución de cualquier propuesta, no ha habido nadie entre toda la gente a la que le he presentado el juego que no me haya dicho, '¡Ah, claro! Esa es la respuesta“. Todo el mundo se ha dado cuenta de que la asociación es esa.
Si es tan fácil, como dices, ¿dónde radica la dificultad?
Que sea sencillo de entender no significa que sea sencillo de jugar cuando la asociación es más compleja. A medida que avanzamos en el juego y aumentamos el premio, la dificultad también se incrementa. la asociación no es tan simple. Entenderlo es muy sencillo, jugar para acertar no es tan fácil, pero aun en las complicadas con la solución no ha habido nadie en las pruebas en plató y en los juegos que he hecho fuera que no haya entendido que esa era la solución.
'Reacción en cadena hace dupla junto con '25 palabras' para revolucionar la parrilla de tarde de Telecinco, al recortarse 'Sálvame' y apostarse por dos concursos. ¿Cómo sientes esa responsabilidad ante el estreno, que además se ha anunciado con tanta antelación, y cómo ves la dupla con Christian Gálvez?
Lo que vamos a intentar es pelear, como siempre. Sacamos dos productos que están muy guais, porque 25 palabras es un concurso muy chulo. Yo con Cristian me llevo de cine y lo que me dice es que es un formato súper divertido, que se lo están pasando bomba haciéndolo, y yo lo mismo del mío. Son dos productos que molan mucho.
¿Revolucionar? ¡Ojalá! Pero tampoco en el sentido de ser el pepinazo padre. Ojalá sí, pero ya sabéis cómo es esto. En general cualquier formato, pero sobre todo los concursos, y más los diarios, es un trabajo de picar piedra. Sabemos tanto él como yo que tenemos que picar mucha piedra e ir muy poco a poco. Las franjas de las 19:00h y de las 20:00h son muy complicadas. Estamos en un buen momento, es un buen momento para los concursos en Telecinco.
Roberto [Leal] me llamó y estuvimos hablando. Queremos convivir juntos, no queremos que le vaya mal a ninguno, queremos que nos vaya bien a los dos. Yo le deseo lo mejor para él y él a mí
¿Consideras que es una buena estrategia combinar dos concursos consecutivos?
Sí. No soy el que hace las estrategias. Yo me dedico a presentar, para la estrategia ya hay gente más inteligente que yo y que lleva mucho en esto y que sabe por qué las cosas se hacen. Sí entiendo, por mi experiencia, que la dupla de concursos, tengan o no mucho que ver, funciona. Hay otros ejemplos en otras cadenas que están funcionando. Durante años ¡Boom! y Pasapalabra iban juntos y han funcionado muy bien; ahora mismo El comodín y El cazador funcionan muy bien juntos. Tienen mucho que ver el uno con el otro y van fenomenal. ¿Por qué no? Por mi experiencia estoy convencido de que sí.
Estos concursos son diferentes, aunque tengan algunas cosas en común. No tienen nada que ver el uno con el otro. Uno puede querer jugar a las 19:00h y seguir hasta Reacción en cadena; habrá gente a la que le guste mucho 25 palabras y no le guste el mío... O que no vea 25 palabras y llegue a las 20:00h y le apetezca ver algo guay mientras hace la cena. Esto es así. Mi experiencia con El cazador es que estuve hasta el primer año así. Los concursos van poco a poco, tienes que ir picando piedra y haciendo que el programa crezca, y que tenga una identidad. La gente irá picando de vez en cuando, habrá quien se quede y habrá quien no. Pero ojalá vayamos arrastrando cada vez a más gente y dure mucho tiempo, a mí lo que me gustaría es hacer muchos años Reacción en cadena.
En concreto, ¿cómo ves tu franja y la responsabilidad que asumes al enfrentarte a 'Pasapalabra'?
Creo que es una competencia maravillosa la que vamos a hacer en Reacción en cadena con Pasapalabra. Esto lo tengo hablado con Roberto Leal. Aparte de que nos queremos, porque es un tío de 10 como profesional y como persona, en cuanto se enteró de que íbamos a hacer esto, me llamó y estuvimos hablando. Queremos convivir juntos, no queremos que le vaya mal a ninguno, queremos que nos vaya bien a los dos. Yo le deseo lo mejor para él y él a mí. Nosotros tenemos un producto que mola mucho y, creedme porque a mí la tele me tiene enamorado desde crío y para mí los concursos son el formato que más he visto a lo largo de mi vida, y este merece la pena. Este lo vi por primera vez en italiano, sin entender nada de italiano, y desde el minuto cero estaba jugando.
Es un grandísimo momento para meterlo y espero que muy poco a poco vayamos conquistando a la audiencia, tanto Christian como yo. Pero no restando a nadie, sino haciendo crecer un formato chulo, divertido y al que puedes jugar en familia. No es nada ambicioso en ese sentido. Los que participan pueden sumar mucha pasta, pero los que estamos en casa queremos divertirnos, pasar un rato entretenido y que sea una fiesta. Queremos que a las 20:00h, igual que está Pasapalabra que es un pepinazo de programa y lo hacen estupendo, estemos nosotros que también somos un pepinazo. Espero que podamos demostrarlo.
¿Te han trasladado expectativas de cara al funcionamiento? ¿Qué esperas tú?
Por expectativas, en lo que a mí respecta nadie nunca jamás, pero no solo en Mediaset sino en general, me ha hablado del objetivo de audiencia. No sé si a la productora sí. Todos vivimos por y para el dato. Cuando he estado en un programa diario -y exceptuando Supervivientes siempre he estado en programa diario, desde que era reportero en Sálvame- siempre he vivido pegado al dato diario, y es verdad que eres un poco esclavo de eso. Pero no me puedo marcar un objetivo de audiencia ni nadie en la cadena.
Soy honesto en cuanto a esto: no sabemos lo que va a pasar. Creemos que si ponemos un buen producto, como vamos a hacer, y si, y eso es lo que sí le pido a la cadena, tienen la paciencia suficiente, estoy convencido de que el producto puede brillar. Estamos a una tanto Mediaset como yo: creemos en lo que hacemos, están satisfechos con el resultado de producto, y yo también. Tenemos la oportunidad de que esto cuaje y para ello no hay otra fórmula que la paciencia y dejarle tiempo. Si no, las cosas no se asientan. Los cortoplacistas en tele es muy difícil que funcionen. El medio plazo, el largo plazo, a mí me parece una una estrategia inteligente. Y es lo que espero que pase.
Sin dejar 'Pasapalabra', que tiene en El Rosco su gran bastión... ¿Cómo se enfrenta 'Reacción en cadena' a esa prueba final?
La última prueba la estamos viviendo como lo que es. Se llega con un bote muchas veces muy alto. Que alguien se esté jugando esa cantidad de dinero te genera una tensión, quieres saber qué va a pasar, si ese equipo va a tener la capacidad y agilidad mental de que en la última prueba, y se genera un clima de tensión en el que no entra el chascarrillo. Quieres saber si se lo van a llevar, y tú desde casa estás jugando. Hay otras pruebas finales de otros concursos donde no puedes jugar. Es tan rápido o dinámico o tan complicado que simplemente lo ves como espectador. Y en Reacción en cadena como espectador vas a poder jugar incluso en esa cadena final. Es una prueba muy guay y totalmente distinta a las demás, y puede competir perfectamente.
La versión original de 'Reacción en cadena' se estrenó en NBC en 1980, y como comentabas, en Italia lleva 15 años de emisión en la RAI. Sin embargo, no lo conocíamos en España. ¿Te sorprende que no hubiera llegado antes?
Son cuestiones de cadenas y de productoras, que van mirando formatos que funcionan en un sitio u otro. A mí, cuando me dijeron que podía presentar Reacción en cadena y vi el programa italiano, me dije, siendo sincero: 'Joder, qué de puta madre que este concurso, que mola mogollón, sea desconocido en España'. Me parece fascinante. En Italia lo conoce todo el mundo. Es un pepino que lleva 15 años, y eso es por algo. Es verdad que ha habido como otros concursos, tonteos con la cadena, y no ha sido nunca el momento. Sé que estaba en la mente de Mediaset desde hace tiempo y creo que ha llegado el momento oportuno. Me siento un afortunado por eso: programas que funcionan fuera, que llevan un montón de años con una audiencia increíble, que los traigas... ¿Te imaginas que haga unas audiencias increíbles? Pues también está muy bien soñar.
En ese sentido, ¿cómo te has adaptado al formato? ¿Has buscado referencia sobre los presentadores que tiene en Italia?
Tienes que inspirarte en lo que pasa en otro sitio, porque la base es el mismo formato, aunque aquí cambiamos pruebas: no tenemos las mismas que en Italia y hemos implementado alguna nueva que creemos que encajan mejor aquí. Y todos han visto con beneplácito esta nueva manera de hacerlo. Nosotros introducimos el concurso por primera vez aquí: el nivel de dificultad no tiene que ver, algunas pruebas allí son más complejas... Queríamos hacerlo aquí más divertido para que encajara mejor. Como presentador, te fijas en lo que pasa, en la manera y tono de presentar... Pero cada maestrillo tiene su librillo. Si el formato lo clavara como lo hacen en Italia o Estados Unidos, tampoco sería yo. Voy a intentar traer el formato a mi manera de presentar y de ser. Te fijas en cositas pero luego tienes tu propia naturalidad. Tengo la mecánica muy interiorizada, el formato lo tengo clavado en la cabeza, pero yo también necesito mis momentitos para tener mis cositas.
Y hablando de naturalidad, ¿cómo vives los éxitos o fracasos de los concursantes?
Vivo siempre con intensidad todo. Soy muy fan de la gente que es buena en los concursos. Soy fan de los concursos y de los que lo hacen bien, pero empatizo mucho con la gente que no lo hace bien. Y me da pena. Me fastidia porque muchas veces es más sencillo de lo que parece, y nos ha pasado con algunos equipos: hay algún miembro que tiende a complicarse mucho la vida. Me gusta decirle que no es tan complicado. Empatizo mucho con el que pierde, me gusta mucho el que gana. Me gusta mucho cuando la gente acierta y me da pena cuando lo hacen mal.
'Reacción en cadena' llega a Telecinco en un momento en que 'El Cazador', tu antiguo programa, está enrachado y con sus mejores datos históricos. ¿Cómo lo ves en la distancia?
Pues con todo el cariño del mundo. Yo sigo queriendo y quiero mucho a la familia de El cazador. Me alegro mucho de sus éxitos, porque sigue siendo la misma familia exceptuandome a mí que no estoy. Les deseo lo mejor siempre como a la gente con la que he trabajado y que han sido parte de mi vida. Y les va de cine, así que enhorabuena. Les quiero mucho, son amigos y familia. Me alegro infinito por sus éxitos y me consta que también ellos están deseando que me vaya muy bien. He podido hablar con Fani Camarasa, la directora, que es un amor, la quiero un montón. Lo personal me puede a lo profesional. Quiero convivir con todo el mundo, creo que todos tienen su espacio. Espero que nos dejen los demás hueco, ¡no seáis avariciosos! [risas].
Disfruto mucho con los concursantes y con los concursos. Son programas blancos, que no generan polémica, que me generan buen rollo. Verlos me gusta y hacerlos me encanta
¿Crees que estamos en una época dorada de los concursos?
No lo sé. Ahora que salimos, ojalá vivamos con Reacción en cadena una época dorada de los concursos. Pero concursos ha habido toda la vida. Recuerdo El tiempo es oro, o Si lo sé no vengo, Cifras y letras o Saber y ganar... Es una competencia muy bonita, los formatos de concurso son divertidos y te lo pasas bien. No hay que darle demasiado al coco ni volverte loco. Tienes que pasar un buen rato, ver a la gente que se emociona y se pelea por llevarse pasta. El concurso es un formato que no debe desaparecer nunca.
Se acerca 2023 y, con ello, nueva edición 'Supervivientes'. ¿Hay previsión de repetir como presentador de 'Conexión Honduras'? ¿Podrás al menos compaginar la grabación de 'Reacción en cadena'?
Ya sabes cómo son estas cosas. Yo tengo las manos atadas en cuanto a hablar de proyectos a futuro porque no dependen de mí. Me gustaría compaginar esto con todo, y hacer millones de cosas. Ojalá pudiera pasar, pero de momento estoy centrado en Reacción en cadena y estoy deseando estrenarlo, que vaya bien, seguir trabajando, seguir siendo feliz haciendo lo que hago, y haciendo feliz a la gente en su casa. Porque aunque trabajamos para cadenas pero realmente trabajamos para quien está en casa, y eso es lo mejor que me puede pasar.
Volver a Telecinco ha supuesto estrenarte como presentador de reality, pero antes de eso has estado al frente de todo tipo de formatos: talent shows, actualidad... Y concursos. ¿Dirías que es el género en el que te sientes más cómodo, o el que más se adecua a tus registros y tu visión de la televisión?
Es una maravillosa pregunta. Creo que sí. Es donde más a gusto me siento, no sé por qué, disfruto mucho con los concursantes y con los concursos. Creo que son programas blancos, que no generan polémica, que me generan buen rollo. Verlos me gusta y hacerlos me encanta. Es sacrificado, porque cuando grabas varios al día y tienes que mantener un tono muy alegre cuando un día no estás bien, o cuando se te pone el niño malo, pero disfruto mucho. Sin desmerecer ningún otro formato, porque también Supervivientes me ha fascinado. Soy muy fan de los realities y desde Gran Hermano ya lo era. Me gusta el experimento sociológico de cómo se enfrenta la gente a ese tipo de situación, porque me pongo yo ahí. Me gusta mucho la introspección personal ante los nuevos retos como un reality, pero el formato del concurso me gusta mucho hacerlo.
¿Qué balance haces de este año tan movido para ti?
Ha sido un año atómico. Es verdad que empecé el año siendo muy feliz con lo que estaba haciendo en TVE, pero llegó una oportunidad que no es que estuviera esperando pero sí que pasan una vez en la vida, como es volver a la casa que me vio nacer. Además vino de la mano de la posibilidad de tener una continuidad en esta cadena, un sitio donde he sido siempre muy feliz, y de presentar Supervivientes el domingo, lo que me parecía un regalo. Cuando era colaborador de Gran Hermano y hacia los debates de los domingos, veía a Jordi [González] y pensaba, “¡Ojalá ser él!” Años después, va y se cumple. A nivel profesional ha sido una decisión no fácil pero sí clara desde el principio, y de las que más feliz me ha hecho.
Creo que mi paso por Supervivientes fue extraordinario en lo personal, no solo por el dato sino por los maravillosos comentarios que ha habido en cuanto a mi hacer. Me siento súper gratificado. Luego nació mi niña justo al final [del programa], y estoy en un momento personal en el que estoy felicísimo con mis tres hijos. En lo profesional hemos probado cosas y ahora ha llegado el formato que estaba esperando. No es que estuviera esperando justo este, pero era un momento en que me apetecía hacer un concurso, que fuera una marca totalmente desconocida en España, no una que se haya vuelto a probar. Me apetece liderarlo y me siento súper feliz, muy cómodo haciendo un concurso. Me encanta la relación con los concursantes, los juegos... Soy muy juguetón, muy niño, y soy muy feliz haciendo esto y lo que pueda venir en un futuro. Diez de diez.