Entrevista

A quién querría ver Juanma Castaño en 'MasterChef Celebrity': “A Manolo Lama, porque es tan hetero y machirulo...”

 MasterChef Celebrity 6 ya ha ocupado sus dos primeras noches en TVE. Dos galas en las que se han visto piques, muchos gritos y espectáculo en el prime time (y late night, por su excesiva duración) de los lunes de La 1. La edición VIP del concurso producido por Shine Iberia ya ha despedido a dos de sus concursantes, con un último adiós de Samantha Hudson.  Sin embargo, el espacio de cocina promete seguir dando guerra con las variopintas personalidades que está mostrando el alocado casting de esta edición.

En el último programa probablemente se vivió una de las pruebas por equipos más estridentes del formato con una de las concursantes que, en el marco del FesTVal de Vitoria, entrevistamos para verTele: Verónica Forqué y su propia pesadilla en la cocina. También hablamos con Juanma Castaño, otro de los destacados hasta ahora por las polémicas vistas estas dos semanas en el talent, a causa de su pique con Miki Nadal. El trío de entrevistados lo completa Arkano, quien lleva su freestyle con cada situación y plato que se preste en el concurso de cocina.

El silencio ya delataba a Forqué, junto a las risas de sus compañeros, cuando se le preguntaba si daría espectáculo en el talent culinario. Tanto ella como Castaño coinciden en que lo más duro fue compaginar MasterChef con sus vidas, “que van en paralelo”, mientras que Arkano siente el concurso como “volver a ser niños pequeños” entre las risas, los lloros y las peleas.

Los tres afirman que regresar a sus hogares es peor a la hora de cocinar porque “no hay abatidor, no hay para hacer esferas, no hay róner… Vaya p*** mie*** de cocina tengo en mi casa”, tal y como bromea el periodista deportivo. El concursante también asegura que, pese a los piques, con sus compañeros se “iría de vacaciones y pasaría con ellos el día de Navidad”.

¿Cómo ha sido vivir la experiencia?

Arkano (A.): Ha sido una experiencia brutal. A mí personalmente me ha hecho sacar cosas que nunca había sacado en público antes. No pensaba, de verdad, que algo grabado y que se fuera a emitir, me iba a hacer vivir este tipo de momentos.

Verónica Forqué (V. F.): Yo, la verdad es que cuando llevas unos días piensas: qué osadía, qué hago yo aquí, que no sé hacer nada. Pierdes los papeles completamente, no sabes quien eres. Te lo pasas bien y te ríes mucho. Estás muy ocurrente, bueno, hablo de mí. Es una experiencia maravillosa y emocionante; muy transformadora y muy divertida.

Juanma Castaño (J. C.): Yo sobre todo destacaría que es una experiencia muy exigente. En mi trabajo he estado en Juegos Olímpicos, en Eurocopas, en Mundiales… He hecho muchas cosas muy duras, pero MasterChef es eso y más. Es muy duro. Es un programa de televisión que a los celebrities del próximo año a los que llamen, que se lo piensen porque no es lucir palmito a la televisión. Es un trabajo que hay que currarse desde el principio.

V.F.: Muchas horas y muchas cosas que te piden que hagas muy alerta. 12 ó 14 horas, no exagero. No puedes bajar la alarma ni te dejan. “¿Puedo ir al baño? ¡No!”, “¿Puedo ir a fumar? ¡No!”, “¿Puedo comer? ¡No, diez minutos para comer!”. Todo así.

Y con ese nivel de exigencia, por ejemplo Juanma que estás todo el día trabajando, ¿Cómo lo has hecho?

J.C.: El periodo en el que ha coincidido ha sido muy duro. Y ellos lo han sufrido y me han ayudado muchísimo. Yo a veces acababa triturado y en ese momento tenía que empezar a trabajar en la radio, con lo cual ha sido duro. Pero bueno, es lo que yo elegí, así que no voy a ir de mártir porque cada uno tenemos nuestros problemas. Y esta señora (Verónica Forqué) hacía funciones de teatro y venía y tenía la voz… Es muy exigente, porque claro, nuestra vida continúa en paralelo a MasterChef, no es exclusivo.

V.F.: Teníamos ya nuestros compromisos. Yo tenía, como él dice, la gira de teatro y acabé en junio. Entonces hasta junio, no todos, pero casi todos los weekends me tocaba ensayar. Y cómo él dice, estaba afónica.

Pero a ti Juanma, ¿te ha pillado toda la época intensa de fútbol, con la Eurocopa?

V.F.: Sí, le ha pillado.

J.C.: [Ríe] Lo que podemos decir es que en el período que he grabado ha sido muy duro.

¿Cómo ha sido la relación entre los compañeros?

V.F.: Muy mala [ríen]. Yo he tenido que tomar dos lexatines esta mañana para poder venir aquí y por eso me notáis tan relajada. Es una relación de amor-odio.

J.C.: A ver, esto lo puede decir cualquiera y parece que estamos idealizando un poco todo: yo me iría con esta gente a cualquier sitio. Es decir, me iría de vacaciones, pasaría con ellos el día de Navidad, me pegaría una fiesta el día de Nochevieja... y es que no se puede decir nada mejor.

V.F.: Porque creas una relación de mucha confianza.

J.C.: Es que yo hoy he visto a una participante y le digo que tiene un culazo, con la confianza como si fuera mi amiga de hace 20 años, y es una persona que hace 3 meses no conocía.

V.F.: A mí me dijo un día: “Forqué, estás buena”.

A.: Para mí, lo interesante de este programa o al menos lo que he visto, es que nos ha vuelto niños pequeños. Vas a ver el programa y vas a ver piques, enfados, gente llorando, pero porque estábamos metidísimos en el juego, y tú nos veías por los pasillos y estábamos pensando en recetas, y viendo cómo afrontábamos la prueba… La cocina se convirtió en nuestra vida. Pero luego, cuando salíamos de esto, a lo que yo llamaba “salir del videojuego”, era ver que estaba todo bien.

¿Y no ha habido piques en ningún momento?

V.F.: Hombre, claro que ha habido piques. Juanma ha tenido muchos piques con todo el mundo.

J.C.: Ha llegado a entrar la policía. Los antidisturbios han cargado contra los jueces [ríen].

V.F.: Claro que hay piques, sobre todo en las pruebas de equipos. Qué os puedo decir sin contar anécdotas… En las pruebas de equipo, al ser un equipo contra otro, sale la competición sana. Pero si el equipo pierde ya vas a donde vas…

J.C.: Las pruebas de exteriores son las mejores pruebas de exteriores de la historia de MasterChef.

V.F.: Es que te la juegas, porque si pierdes tu equipo pasa a la eliminación.

J.C.: Lo digo totalmente en serio: los grandes especialistas de MasterChef coinciden en señalar… [ríe] nueve de cada diez dentistas dicen que las pruebas de exteriores son una serie por separado.

¿Qué tal ha ido con los jueces?

V.F.: Con ellos yo siento admiración. Para mí los jueces están a otro nivel.

J.C.: Ni los he saludado. Se creen que son la leche. Samantha la única que tiene un pase [ríen].

V.F.: Ellos acaban el show, en el que están de pie y con mirada seria, y se van cada uno a su restaurante: Jordi se va a Barcelona, Samantha a Segovia y Pepe para Toledo.

Verónica, te convertiste en trending topic por tu video en el aeropuerto porque fue un momentazo. ¿Vas a dar momentazos de estos en el programa?

V.F.: [Ríen] Nada.

J.C.: Lo del aeropuerto es una birria al lado de lo que viene ahora. De eso no se va a acordar nadie.

¿Quién os engañó para entrar en MasterChef? ¿A quién consultasteis antes?

J.C.: No lo sé, pero me gustaría saber quién fue la persona… Es que a mí me ya me daban muchas hostias con el fútbol, y yo ya no necesitaba más hostias [ríen]. Me he metido aquí y me van a caer… Con lo cual va a haber días que juegue el Madrid y que se emita MasterChef y se me van a juntar los del Madrid y los de MasterChef. Trending topic va a haber mucho.

¿Ahora en casa son más exigentes con vosotros y os hacen cocinar?

A.: Yo he vuelto con una presión encima, que vamos, toda la familia que me pide que cocine algo. Pero no he cocinado nada a nadie. Lo estoy dejando en suspense.

V.F.: Yo es que me he mudado y estoy organizando la cocina, pero yo sí tengo ganas.

A.: A mí me ha dado un bajón... Volver a casa con la cocina pequeña, la vitrocerámica que ni va… Vivir las cocinas de MasterChef y luego volver a mi casa.

J.C.: Yo entro en mi casa y no hay abatidor, no hay para hacer esferas, no hay roner… Vaya puta mierda de cocina tengo en mi casa [ríen]. Me dan ganas de reventar el microondas. Unos cuchillos… ¿Tú sabes cómo cortan los de MasterChef? Y en mi casa se me resbalan. ¿Sí o no?

V. F.: ¡Sí!

¿Os habéis cortado o quemado en este programa?

J.C.: Cortar no, pero a mí me pasó algo.

V.F.: Un poquito, pero no tuviste ningún percance físico.

A.: A mí me pasó alguna cosilla.

¿Verónica, aconsejarías a tu hija que se presentara a MasterChef?

V.F.: ¿Por qué no? Claro, es muy lista y ella ya vio el programa…. Y con Tamara Falcó cuando ganó dijo que si ganaba ella, que decía que no lo había hecho en la vida, y estaba monísima, era lista y apañada, ella también podía. Me encantaría, la verdad.

Y vosotros, ¿a quién recomendaríais participar en MasterChef?

V.F.: A Resines.

J.C.: No, a mí me encantaría a Manolo Lama, mi compañero de la radio. Porque es tan hetero, tan machirulo, tan leñazo, que me encantaría.

A.: A mí me encantaría que entrara Ignatius Farray. Sería sembrar el caos en MasterChef. Sería la última edición.

V.F.: Yo invitaría a mi hija.