María, sobre la comentada visita de su novio a OT: “Que le guste mi culo no me parece machista”

María resultó la novena expulsada de OT 2018 en una gala en la que gran parte del protagonismo se lo llevó su novio Pablo, que apareció en plató al finalizar su actuación para saludarla. El encuentro sorprendió dentro y fuera del plató por su efusividad, y generó polémica por los comentarios de Pablo hacia María: “Lo que más echo de menos es su culo” y “lo primero que haremos será follar”.

Las redes se llenaron de valoraciones sobre si María, considerada una de las chicas más feministas de la Academia, merecía estos calificativos y si estos eran machistas. El día siguiente a su expulsión, la ya exconcursante de OT 2018 habla con los medios para valorar su paso por el programa y cómo vivió ella este momento.

Al ser preguntada sobre si han hablado entre ellos sobre la críticas que ha recibido Pablo por el comentario de su culo, a lo que la pareja de la triunfita ha contestado en Instagram, María ha asegurado que no han hablado de ello. “Anoche yo estaba muerta y nos fuimos a dormir. Él no me ha contado nada. Lo único que puedo decir es que es la persona menos machista que conozco. Que a mi novio le guste mi culo no me parece machista. Me parece guay, a mí me hace ilusión”, ha afirmado.

Pablo ha asegurado en Instagram que creer que “follar con tu novia es machista” hace que “le flipe por estar tan confusos”. María ha añadido durante la videollamada con la prensa que ella no se ha “enterado de nada” de la polémica. “No he mirado nada, acabo de encender mi móvil porque no me acordaba del pin. Pero se me hace raro que se le haya criticado. A mí que le conozco, lo que pasó me pareció natural”, ha añadido.

Debate en torno al término mariconez: “No podría haber actuado de otra manera”

María todavía desconoce el revuelo generado en torno a su propuesta de cambiar la palabra “mariconez” de la canción de Mecano Quédate en Madrid. “Solo sé que había habido un montón de lío, pero nada más”, ha reconocido. Lo que sí tiene claro es que “no podría haber actuado de otra manera. Realmente me incomodaba decir esa palabra y, como dije en su día, me parece súper interesante que se genere debate sobre ello”.

La veterana de la edición ha definido el lenguaje como “una parte muy importante de nuestra sociedad”. Y es por ello que entiende que haya gente “que no esté de acuerdo y que no lo entienda así. Ya había tenido conversaciones sobre este tema antes de entrar en el programa”. De hecho, “me sorprendió que en la Academia estábamos todas bastante de acuerdo”, ha añadido.

Precisamente fue en esa gala en la que fue elegida como favorita, algo que inmediatamente asoció a que “igual a la gente le había molado lo que yo pensaba”. Sin duda, no fue una actuación fácil, porque sentada en el jurado estaba su cantante original, Ana Torroja. “Miki y yo estábamos cagadísimos”, ha admitido, “lo hicimos lo mejor que pudimos y con todo el cariño del mundo”.

Eurovisión, el riesgo y su apuesta para ganar el programa

Hace dos semanas, Noelia acaparaba titulares afirmando que de todos sus compañeros, los únicos que querían ir a Eurovisión eran Famous y ella. Sin embargo, Marilia, la siguiente expulsada lo desmintió y ahora ha sido María quien tampoco ha descartado que cualquiera pueda ir a representar a España en el Festival.

Para la madrileña, lo que ha ocurrido es que “todas le hemos visto allí”. “Pensamos que podía ser lo máximo para este país, pero luego a saber qué pasa”, ha comentado. También ha defendido que “la persona que vaya lo hará encantada y lo dará todo”.

No descarta ser ella misma, aunque aún “no tengo ni idea de cómo va a ser”. Eso sí, de todas las opciones posibles, se ha mostrado especialmente entusiasmada con la idea de ir con alguien: “Eso sería divertidísimo, no había pensado que podía ser con otra persona”.

Manu Guix dijo a María en el repaso de la gala en la que interpretó Voy en un coche que era una artista. La concursante se lanzó de lleno a arriesgar en su actuación y fue valorada positivamente tanto por el público como el jurado.

Dos galas después, volvió a jugársela con Amorfoda, aunque esta vez generando división de opiniones. La exconcursante ha afirmado que “no me arrepiento de nada”, y que desde dentro “no pensaba que estuviera haciendo nada loco”. Además, está contenta con los comentarios del jurado durante el programa: “Respetaba lo que me decían. Siempre eran positivos y me valoraban el trabajo. Cuando me decían que había habido imprecisiones, luego en el repaso de la gala veía que era cierto”.

"Creo que va a ganar Alba Reche"

Para María, cualquiera de los compañeros que quedan en el concurso podría ganar, “aunque creo que va a ser Alba Reche”. Y espera que sea quien sea, “le invite a unas cañas con esos euros”. “Realmente el máximo premio es quedarte hasta el último día”, ha añadido.

La broma que no le hizo “ni puta gracia a nadie”

Otro de los momentos más comentados de la edición fue la bronca de más de una hora que Noemí Galera echó a los concursantes, después de su protesta en forma de sentada por no poder entrar a la habitación hasta las 22:30h. “Nos dio muchísimo bajón porque algo que habíamos pensado como una broma graciosa, claramente no le ha hecho ni puta gracia a nadie”, ha lamentado.

Respecto a su salida de la Academia, María ha insistido en ser “súper fan de Marta. Tiene 18 años, una voz increíble, se ha superado en cada gala, tiene un gusto musical increíble e interioriza todo lo que le dicen”. “Yo si estuviera en mi casa me encantaría votarla”, ha reconocido elogiando a su compañera.

Es por ello que en parte sí se esperaba su salida, “con el numerazo que tenía de Like a prayer, yo estaba súper contenta de haber llegado donde había llegado y sabía que era posible que fuera la expulsada”.

“Pensaba que nadie veía el programa”

La triunfita ha negado que los concursantes hablaran demasiado sobre si el programa estaba teniendo o no audiencia. “Yo pensaba que no lo veía nadie”, ha admitido, “era absurdo comentarlo porque nadie tenía un imput real.

La salida a las firmas no les sirvió para dimensionar cómo se estaba viviendo el concurso desde fuera. “Nos dijeron que habían ido bien pero allí es todo tan raro que era muy difícil hacerse a la idea de la realidad”, ha concluido.

Ayer se confirmó que además habrá gira, de la que ya hay primeras fechas confirmadas, y que dará comienzo en Madrid. “Yo decía que montáramos nosotros una pequeñita por salas si no se hacía, por lo que fue un subidón”, ha celebrado.