Las estrellas ocultas que ha descubierto La peste para el mundo de las series
El impacto de La peste ha sido elevado desde que comenzara a propagarse el pasado 12 de enero. La ficción creada por Alberto Rodríguez y Rafael Cobos se ganó la renovación apenas 5 días después de su lanzamiento en Movistar+ y se ha llevado las alabanzas de los espectadores por su ejecución y la potente intriga que mantiene durante los 6 capítulos que componen su primera temporada.
Por supuesto, el nutrido y variado reparto detenta gran responsabilidad sobre el calado de la ficción. Con Paco León como gran estrella, la serie cuenta también con otros actores de renombre como Manolo Solo (ganador del Goya hace un año por Tarde para la ira), Paco Tous, Nya de la Rubia, Manuel Morón, Antonio Dechent, Jesús Carroza, Javier Botet y Estefanía de los Santos, así como secundarios reconocibles del cine y televisión nacional, como Manolo Caro o Sebastián Haro, Juan Carlos Montilla y Tomás del Estal.
Sin embargo, en lo alto del reparto destacan tres intérpretes prácticamente desconocidos para el gran público, a quienes La peste ha dado tremendo empuje profesional. Se trata de Pablo Molinero, que lidera la serie como Mateo; el joven Sergio Castellanos como su Watson particular, Valerio; y Patricia López-Arnáiz como Teresa. En ellos nos queremos detener, encontramos las pistas de lo que era su carrera hasta la llegada de la monumental producción de Movistar+.
Pablo Molinero, hijo del “teatro bastardo”
Con 40 años recién cumplidos, Pablo Molinero se reconoce en sus primeras entrevistas “nervioso” por acaparar tanta atención. Aunque las cámaras no eran ni mucho menos nuevas para él, bien es cierto que su trayectoria profesional se había centrado de forma casi exclusiva en los escenarios teatrales.
Licenciado en Filología Inglesa por la Universidad Jaume I de Castellón, donde formaría el colectivo teatral La Casual, y formado en danza y dramaturgia en Barcelona, pasó por compañías como Comediants y La Fura del Baus antes de crear en 2003 loscorderos.sc junto a David Climent (con quien ya coincidió en sus años como estudiante en Castellón) y Pilar López. Uno de sus últimos espectáculos que han levantado, representantes de lo que llaman “teatro bastardo”) ha sido La banda del fin del mundo.
La peste no ha supuesto su debut en televisión. Previamente había participado en una serie diaria para Canal 9 y en el telefilme De colores, junto a Emilio Gutiérrez Caba, y apareció en diversos programas culturales (entre ellos, Miradas 2 y ¡Atención, obras!).
También hallamos algunos roles de reparto en largos y cortometrajes. Lo que queda claro es que La peste es su trabajo de mayor envergadura hasta la fecha. Llegó a ella, por cierto, gracias a Eva Leira y Yolanda Serrano, a las que se deben descubrimientos como el de María Valverde, Jesús Castro, Alberto Ammann o Malcolm T. Sitté, y que son las responsables del casting de la ficción.
Patricia López-Arnáiz, en ascenso desde El guardián invisible
La experiencia televisiva de Patricia López-Arnaiz, que ha dejado una huella indeleble con su retrato de Teresa de Pinelo, no era mayor que la de Molinero. Su único crédito previo a La peste en este medio era en la recordada Qué vida más triste, con un personaje de reparto en 2009.
Su rostro, eso sí, sí se había podido ver algo más en la gran pantalla. El pasado 2017 tuvo su primer papel relevante como hermana de Marta Etura en El guardián invisible, la adaptación de la novela de Dolores Redondo y producida por Atresmedia Cine (con casting de nuevo obra de Leira y Serrano). Este personaje llegaba después de partes secundarias en cintas como La herida, Lasa y Zabala y Otoño sin Berlín.
Después de esta serie, lo próximo para ella es El árbol de la sangre, la nueva película de Julio Médem.
Segio Castellanos, un nuevo valor
Valerio, el adolescente asalvajado que sueña con viajar al Nuevo Mundo y que descubre otra vida gracias a Mateo, es el personaje con el que el joven Sergio Castellanos irrumpe con fuerza en el panorama.
Del mismo modo que su compañera López-Arnáiz, también había intervenido en televisión hacía años, cuando aún era niño, dentro del reparto de Los protegidos. Su papel era la versión infantil de Ángel (Maxi Iglesias). Luego también intervendría en otra serie de época, Toledo. Pero su carrera hasta la fecha estaba restringida al mundo del cortometraje. Entre ellos destacaba el multipremiado 8 de Raúl Cerezo, o Fe, de Juan de Dios Garduño, junto a Víctor Clavijo.
Tras La peste, el joven intérprete volverá a coincidir con la anteriormente mencionada compañera de reparto en El árbol de la sangre. Además, también forma parte de Todos lo saben, la película de Asghar Farhadi, rodada en España y protagonizada por Penélope Cruz y Javier Bardem.
Manolo Solo contaba que en su primera jornada de rodaje, se sintió como en un cuadro de Zurbarán al pisar aquellos escenarios y verse rodeado del resto de actores caracterizados.
Las desgarradas interpretaciones de estos tres, unidas al trabajo de maquillaje y vestuario, enriquecen lo que ya era un trabajo de dirección y arte excelente para terminar de componer este lienzo de tres dimensiones.
