La sexta edición de Maestros de la costura celebró “la final más difícil que hemos hecho nunca” tras 10 semanas y 27 pruebas. A ella llegaron Almudena, Ana, Ángel y Erik pero solo XXX se alzó con el maniquí de oro y los 50.000 euros del premio.
La aprendiz pasó de haber sido rechazada en el casting, a entrar como reserva y sorprender por su talento, tanto, que en la final fue indiscutible su triunfo: “Hay que aprovechar todas las oportunidades que vengan, y si es un 'quizás' hay que ir a por todas”, reflexionó sobre su paso.
En segundo lugar quedó Ángel, mientras que la confección de un vestido de novia dejó a Almudena y Erik en tercer y cuarto puesto. “Pase lo que pase estamos muy orgullosos de todos vosotros”, aseguraron Palomo Spain, Lorenzo Caprile y María Escoté ante la gran final.
Primera prueba con la prueba más difícil del programa
En la primera prueba de la final, los aprendices tuvieron que rendir homenaje a una de las mayores figuras de la moda a nivel mundial: Paco Rabanne. Cada aprendiz reprodujo un look distinto del artista. Todo ello con los consejos que les dieron Daniel Rabaneda, sobrino-nieto de Paco Rabanne, y Norma Duval, musa de Rabanne.
Durante la costura, los jueces miraban a los aprendices y confesaban que la prueba era una de las más duras que se habían vivido: “Te doy la razón, es la final más difícil que hemos hecho nunca” decía Escoté.
Tras acabar el tiempo, Almudena entregó un dos piezas con corsé con “calvas que afeaban el resultado”; en cambio, Ana llegó orgullosa de su vestido metálico hecho con “trabajo minucioso y bien resuelto”; le siguió Ángel con un “trabajo increíble y valiente” por lograr un vestido que impresionó al jurado; y Erik presentó un vestido de terciopelo con “fallitos”.
Ante tal panorama, Ángel y Ana fueron señalados como los mejores, pero fue ella quien se alzó con el primer puesto. Le pusieron la chaquetilla entre lágrimas de emoción. “¡Soy duelista!” exclamaba casi sin creérselo.
Prueba de exteriores con el merecido segundo duelista
Después, los tres finalistas se enfrentaron al desafío más ambicioso y crucial de su paso por el talent: confeccionar un vestido de novia. Para ello, el jurado escogió como escenario la finca La Vega del Henares, donde miles de parejas se han dado el “sí, quiero”.
Pelayo Díaz, Juana Acosta y Lolita ayudaron a los tres aprendices a reproducir uno de los tres vestidos firmados por Isabel Zapardiez, T.BA y Claro Couture. Ángel escogió al influencer, Erik optó por la actriz y Almudena hizo equipo con la hija de La Faraona.
A pesar de la dificultad de la prueba, todos lograron presentar una prenda acabada y de alto nivel, gracias a la ayuda de los invitados. Por lo que hasta la presentadora aplaudió a los tres finalistas.
Los jueces también ensalzaron al trío y dieron pase al desfile de los vestidos. Sobre el de Almudena señalaron que era “un trabajo mejorable”, a Erik le faltó resolver un tirante y una cremallera, mientras al de Ángel lo calificaron como “impecable” por no encontrar errores.
Por lo que no hubo lugar a dudas: “El aprendiz que ha confeccionado el mejor vestido y se convierte en el segundo duelista es Ángel”. Dejando a Erik y a Almudena en tercer y cuarto lugar.
El duelo final entre Ana y Ángel
En el último reto de la edición, Ana y Ángel homenajearon a la diseñadora Vivienne Westwood, un icono del movimiento punk y que se convirtió en una de las figuras más irreverentes y comprometidas de la moda. Para ello, el jurado exigió a los duelistas un vestido de gala único, especial y exclusivo.
Empezó el tiempo y empezaron con el modelo dibujado, corrieron a por las telas y no dudaron en empezar a coser. Ambos diseñaron un vestido que les definiera y se mostraron orgullosos con el resultado final. Al acabar el trabajo los dos finalistas se abrazaron y desearon suerte.
El veredicto arrancó con el maniquí de Ángel que diseñó pensando en su duro pasado. Los jueces aplaudieron su “impresionante” propuesta “que lo tenía todo”. Le siguió Ana a la que halagaron la elección de la tela, le sumaron el riesgo en su costura y agradecieron la “apuesta por el minimalismo”.
Por todo ello y tras la deliberación final, Caprile sentenció: “El ganador de la sexta edición de Maestros de la costura es Ana”. Momento en el que apareció su vestido desfilando con la modelo internacional Minerva Portillo.